Figura 3. Publicación de Miauricio Macri.
Figura 4. Publicación de Miauricio Macri.
“Reacciones” y comentarios a los que los contenidos de la página dan lugar en su comunidad de usuarios
¿Qué entendemos por “recepción” en una página de humor político en Facebook? Teniendo en cuenta los planteos de Eliseo Verón, podemos pensar que la recepción engloba, entre otros discursos, a todos aquellos que se producen “en respuesta” a otros, que en este caso serían las publicaciones que hace la página, y que incluyen textos verbales, fragmentos audiovisuales, e imágenes fijas. La red social habilita a sus usuarios a expresarse de múltiples maneras. Por ejemplo, los botones de “reacción” –el clásico “me gusta”, al que se le han agregado los de “me encanta”, “me enoja”, “me entristece” y “me asombra”, además de la posibilidad de uso temporal y restringido de otros como el de “me enorgullece”– permiten, sin apelar a lo lingüístico, expresar acuerdo o desacuerdo con una publicación, y otros sentimientos, estableciendo, asimismo, una cierta gradación entre ellos (por ejemplo, la relación entre “me gusta” y “me encanta”). La posibilidad de “compartir” el contenido de la publicación –de manera tanto pública como privada– y de agregar un texto que permite expresar la propia posición respecto de aquello que se comparte resulta también una forma de participación. En este trabajo se rastrearán aquellos contenidos compartidos de manera pública. Una tercera posibilidad, a la que dedicaremos la mayor parte de este apartado, consiste en comentar las publicaciones, pues es en los comentarios en los que, particularmente, se expresa la colaboración, sea seria o humorística, de los usuarios con la propuesta enunciativa de la página (Slimovich, 2012). La práctica admite una amplia gama de opciones: en efecto, se puede comentar para mostrar tanto acuerdo como desacuerdo, pero también para introducir matices, abrir temas conexos de conversación, convocar a otros usuarios para que vean u opinen sobre el contenido en cuestión y establecer debates, entre otras posibilidades. Una modalidad de interacción diferente consiste en que los usuarios publiquen directamente en el “muro” de la página, lo que se asemeja al uso tradicional de una cartelera y que sirve, también, para expresar acuerdo o desacuerdo sobre la página, proponer contenidos nuevos y difundir informaciones que se juzgan de interés. Por último, aunque no sean rastreables debido a su carácter no público, podemos mencionar los mensajes privados que hacen llegar los usuarios a los administradores de la página. Analizaremos, pues, las cuatro primeras modalidades de participación, priorizando especialmente la de los comentarios.
El uso que se hace de los botones de reacción será el primer elemento que abordaremos. Si bien se producen variaciones entre las distintas publicaciones, encontramos que, por lo general, existe un promedio de entre 150 y 300 reacciones respecto de cada publicación, con algunas que superan los 350. Las fotos de perfil y de portada, que son idénticas a las de la página oficial del presidente, tienen una cantidad considerablemente menor, lo que posibilita sostener que en las recepciones del sitio predominan las intenciones paródica, satírica e irónica, y que precisamente se tiende a rechazar aquello que más se asemeja a la figura oficial de Mauricio Macri. Consideramos que el dato de la baja cantidad de reacciones en relación con estas fotos no es menor, debido a que la página tematiza explícitamente la apariencia física del personaje, y que tanto los administradores como los usuarios publican una gran cantidad de otras fotos del expresidente que se utilizan para producir el efecto humorístico. Esto nos permite afirmar que son las fotos “recontextualizadas” las que generan las mayores reacciones, puesto que generalmente son publicadas junto con enunciados verbales que expresan las incongruencias comentadas en el análisis en producción.
Por otra parte, las reacciones que predominan en las publicaciones son, por orden de importancia, “me divierte”, “me gusta” y “me encanta”, evidenciando esta última considerable distancia respecto de las otras dos. El conjunto de estas reacciones permite pensar en la existencia de una alta adhesión de los usuarios hacia la propuesta de la página, a la vez que el predominio de la reacción “me divierte” da cuenta de que, en efecto, las publicaciones son recibidas de modo cómico, modo que induce a los usuarios no solamente a expresar el acuerdo con las ironías expresadas, sino también a reconocerles eficacia humorística. Esta clave de lectura reduce sensiblemente el margen para establecer debates sobre la figura presidencial o sobre la realidad nacional, a la vez que muestra una alta cohesión ideológica entre los usuarios de la página.
En lo que sigue, nos referiremos al acto de compartir las publicaciones, relacionándolo numéricamente con las reacciones comentadas anteriormente. Al respecto, se observa la existencia de, aproximadamente, cinco reacciones por cada publicación compartida. Esta cantidad (20%) aumenta en las publicaciones más populares (donde “compartir” alcanza el 36% del total de las reacciones) y disminuye en las publicaciones menos populares, donde solo se comparte menos del 10%. “Compartir” una publicación implica un grado de compromiso y adhesión mayor que el que conlleva reaccionar a ella, dado que lo usual es compartir un contenido para manifestar acuerdo con la página a los contactos que el usuario tiene en su muro privado. “Compartir” implica, desde esta óptica, “apropiarse” del contenido, reivindicarlo y mostrar de manera singularizada su concordancia con él, asumiendo como propia su enunciación (lo cual es posible, además, si se agrega un texto propio a lo compartido). Este funcionamiento de la herramienta “compartir” es el que nos permite hipotetizar que las publicaciones más “exitosas” en cantidad de reacciones son también las que más se comparten, puesto que suscitan una adhesión mayor que aquellas menos populares, las que, entendemos, se juzgan poco interesantes, por lo que no merecen ser apropiadas.
En lo que sigue, haremos foco en las publicaciones que se vehiculizan a través del muro de la página. En este caso, aunque predominan las que expresan alegría por la reapertura de la página en marzo de 2018, advertimos una relativa dispersión de los contenidos publicados. Estas publicaciones generalmente adoptan un tono irónico, con el que acusan de “censura” a miembros de la oposición política o responsabilizan a las problemáticas socioeconómicas del cierre del sitio y de un ataque al presidente. En este caso, la ironía consiste en que la página probablemente haya sido cerrada por denuncias de usuarios oficialistas, y no al revés; la capacidad de censura es mayor cuando se ejerce el gobierno que cuando se forma parte de la oposición.
Figura 5. Comentarios en el perfil de Miauricio Macri.
En cambio, hay publicaciones que consisten en compartir contenidos provenientes de otras páginas –que generalmente son también contrarias al gobierno de Mauricio Macri–, y así reproducen, o bien memes opuestos al presidente, o bien injurias dirigidas hacia su persona. En este último caso, muchas de las intervenciones consisten en enunciados que contienen acusaciones de distinto tipo, las que se efectúan bajo lo que podríamos caracterizar como el