La pedagogía [es entendida] como el discurso que posibilita al maestro el soporte de un saber específico, circunscrito a las prácticas que tienen lugar en las prácticas del saber, y como el lugar teórico que conceptualiza tanto acerca de la enseñanza como de las múltiples relaciones conceptuales y prácticas con las cuales entra en relación la enseñanza.17
Tabla 1. Realidad compleja de la educación y saberes que la estudian
Redes del saber educacional | Objeto |
Historia de la educación | Cambios y transformaciones de la educación |
Sociología de la educación | Proceso de la educación e institución social |
Psicología de la educación | Aprendizaje |
Pedagogía | Enseñanza |
Filosofía de la educación | Fundamentos epistemológicos y axiológicos |
Política de la educación | Misión educativa del Estado |
James Bowen, al inicio de su monumental Historia de la educación occidental, afirma que “la educación se ocupa de la preservación de una conciencia social y cultural, así como de la transmisión de una tradición informativa que constituye la base de la civilización”.18 Con esta definición el autor delimita el objeto de su investigación (la historia de la educación) como un proceso cultural y una institución social, tal como se señaló anteriormente. La dimensión personal de la educación como proceso formativo no se percibe en dicha definición porque este aspecto corresponde más a la psicología y a la filosofía.
Existe otra rama del saber que es cada vez más necesaria: la política de la educación, que tiene por objeto la gran misión educativa del Estado (tema sobre el cual Platón fue el primero en teorizar). El Estado tiene que valerse de los expertos en las redes de los saberes educacionales para programar e implementar una adecuada política educativa.
Podemos concluir que la educación es la formación de los seres humanos mediante la cual estos se benefician de la cultura de la sociedad y se ponen en situación de crear nueva cultura y transformar la sociedad. La pedagogía es una parte de la red de los saberes educacionales cuyo objeto propio es la enseñanza, sus métodos y estrategias. El término metafórico redes del saber educacional alude al hecho de la complejidad de la educación y, en consecuencia, a la necesaria complementación de estos saberes para el logro de los fines de la educación.
La filosofía
El término filosofía también es de origen griego (φιλοσοφία), y proviene de philia: amor y sophia: sabiduría, o sea, “amor a la sabiduría”. Sabio, dirá Platón, sólo es Dios; el ser humano sólo es “amante del saber”. Se atribuye a Pitágoras de Samos una frase en la que aparece por primera vez el término filósofo:
Comparaba la vida humana a un concurso festivo de todas las gentes, pues así como unos vienen a él a luchar, otros a comprar y vender, y otros, que son los mejores, a ver, también en la vida unos nacen esclavos de la gloria, otros, cazadores de haberes, y otros filósofos, amantes de la virtud.19
Aristóteles definió la filosofía como el saber de los primeros principios y las primeras causas de todas las cosas. Las ciencias se ocupan de las causas inmediatas de las cosas, y la filosofía de las primeras causas y los primeros principios. Existen principios que son comunes a todas las ciencias, como el principio lógico de no contradicción (hay contradicción cuando afirmamos de una misma proposición que es verdadera y falsa al mismo tiempo y bajo el mismo aspecto). A la filosofía corresponde estudiar los principios que todas las ciencias usan pero que ellas mismas no elucidan. Aristóteles vio claro que los primeros principios no se demuestran sino que se ponen en evidencia. Si los principios primeros se demostrasen, necesitaríamos otro principio para demostrarlos, entonces ya no serían primeros principios, sino segundos. “Lo que se llama sabiduría se ocupa de las causas primeras y de los principios”.20
La filosofía es un saber que se vale principalmente de un lenguaje conceptual. La formulación de conceptos, la enunciación de proposiciones, la organización de argumentos son funciones de la lógica, y esta es la que le da una estructura conceptual al lenguaje filosófico. De ahí que Platón consideraba la filosofía como dialéctica, es decir, razonamiento. Este aspecto lingüístico es hoy de considerable importancia en el modo de entender la filosofía, como se puede apreciar en esta definición de la actividad filosófica: “La filosofía es el intento de expresar, mediante un trabajo sobre el lenguaje, el sentido que el hombre da a su experiencia, a su condición, a su historia, a este ‘mundo’ en que vive y a las relaciones que mantiene con él”.21
La filosofía no estudia solo los principios del conocimiento (epistemología) sino además los valores fundamentales o principios éticos (ética). Hay, pues, distintas redes del saber filosófico. Descartes, en el siglo xvii, utiliza la metáfora del árbol del saber para explicitar la finalidad de la filosofía: el tronco del árbol del saber es la física, todas las grandes ramas son las ciencias, y las raíces son los principios a cuyo saber se dedica la filosofía; esta es entonces un saber radical, va a las raíces del saber humano. En el siglo xix los positivistas sostuvieron una posición agnóstica al decir que no hay principios del conocimiento humano y que la filosofía, si quería existir, debía ser filosofía científica. La filosofía quedaba así anulada o se convertía en ancilla scientiae, sierva de la ciencia. El saber humano tiene presupuestos que son comunes a las distintas ciencias. Así, todas las ciencias buscan verdades, pero ninguna se detiene a considerar qué es la verdad y cuáles son los criterios de la verdad. La filosofía es ciencia de la verdad y de sus criterios. De modo que no es tan fácil pretender anular la filosofía de un plumazo. Después de que los positivistas pretendieran anular la filosofía, esta resurgió vigorosa en movimientos tan importantes como el marxismo, la fenomenología de Husserl, la filosofía de la vida de Bergson, la filosofía de la existencia de Jaspers, Sartre o Heidegger, el pragmatismo de Charles S. Peirce, Dewey o Rorty, la filosofía lingüística de Wittgenstein, la filosofía latinoamericana de la liberación, o el pensamiento tardomoderno de Foucault, Derrida o Deleuze.
La filosofía de la educación investiga los principios epistemológicos, antropológicos y éticos que son necesarios para fundamentar la actividad educativa de los seres humanos. En otras palabras, las distintas ramas de la filosofía ayudan al esclarecimiento de los fundamentos de la educación. Dado que la educación implica una actividad cognoscitiva, la filosofía contribuye a elucidar los fundamentos de la educación analizando en qué consiste el conocimiento, cuál es el criterio de la verdad del conocer y cuáles son las mejores formas de comunicar ese conocimiento a los demás. La educación no implica sólo conocimiento, sino además formación y autoformación, los cuales, a su vez, implican valores. La rama de la filosofía que se ha denominado ética estudia los valores