Los inicios de la automatización de bibliotecas en México. Juan Voutssás Márquez. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Juan Voutssás Márquez
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Социология
Год издания: 0
isbn: 9786073018326
Скачать книгу
El informe final de este estudio fue discutido en una conferencia apoyada por el CLR y celebrada en esa biblioteca en noviembre de 1965 (Avram et al. 1965). Como resultado, se acordó la conveniencia de que la Biblioteca del Congreso se convirtiera en una fuente de distribución de registros bibliográficos legibles por computadora. Como consecuencia, la biblioteca obtuvo fondos para llevar a cabo un primer proyecto piloto computarizado y recibió una subvención para probar la viabilidad y utilidad de la elaboración y la distribución de sus registros. Al proyecto se le denominó MARC, como acrónimo de Machine Readable Cataloging, o catalogación legible por máquina (Avram 2003, 1712).

      El proyecto MARC fue desarrollado por un grupo de bibliotecas seleccionadas junto con la del Congreso entre los años 1965 a 1968, cuando publicaron sus resultados y distribuyeron las primeras cintas con registros a prueba. Siendo un proyecto muy exitoso requería todavía de algunas precisiones y por ello fue lanzada una segunda etapa del mismo denominada MARC II. Esta segunda fase continuó expandiéndose durante la primera mitad de la década de los setenta. A partir de 1968, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos produjo todos sus registros catalográficos en formato MARC simultáneamente con la versiones en papel o cartón de ese entonces. En ese año, la Biblioteca del Congreso comenzó a ofrecer y distribuir regularmente cintas magnéticas de computadora con los nuevos registros a las bibliotecas que lo solicitasen. Por lo mismo, en ese año comenzó a publicar los manuales correspondientes para que las bibliotecas supieran cómo interpretar y convertir los registros electrónicos nuevamente hacia fichas catalográficas (Library of Congress 1968). A principios de los setenta encargó a una empresa la conversión de todas sus tarjetas catalográficas existentes en su catálogo previas a ese año hacia una versión en formato MARC para tener completo todo su catálogo en ese formato. A partir de 1980, la Biblioteca del Congreso ya no agregó tarjetas de cartón a su catálogo manual, el cual quedó estático desde entonces con veintidós mil cajones y veintidós millones de tarjetas catalográficas.

      Por su parte, la Biblioteca Británica también tomó interés por estos tópicos y, partiendo de las recomendaciones de los estudios originales, inició su propio proyecto para sistematizar la Bibliografía Nacional Británica, BNB MARC o British National Bibliography with Machine Readable Cataloguing. Esa organización siguió muy de cerca, colaboró en el proyecto estadounidense y llegó a conclusiones muy parecidas. Posteriormente, cuando la Biblioteca Británica decidió continuar con su propio proyecto MARC, colaboró muy de cerca en la

Imagen 70
Computadora UNIVAC, en la sala de exhibición de la American library Association durante la Fería Mundial de Nueva York, 1964 - 1965. © Copyright American Library Assosiation. This document mat be reprinted and distributed for non-commercial and educational purposes only, and not for resale.

      En 1967, los rectores de las instituciones de enseñanza superior del estado de Ohio, Estados Unidos, decidieron fundar un centro computarizado común que diese servicio de fabricación y distribución de tarjetas a todas las bibliotecas de esas escuelas con el fin de reducir costos. Se creó así el Ohio College Library Center (OCLC). El primer centro de cómputo de esta organización estuvo en el Centro de Investigación de la Universidad Estatal de Ohio y sus primeras oficinas se ubicaron en la Biblioteca Principal de esa universidad en la ciudad de Columbus. En poco tiempo, se volvió un exitoso centro regional que daba servicio a 54 instituciones académicas de ese estado. Con la disponibilidad regular de las cintas de la Biblioteca del Congreso, a partir de 1971 el proyecto se consolidó exitosamente y se convirtió en el gran productor y distribuidor de tarjetas catalográficas de Ohio y un caso práctico de gran éxito del uso de grandes computadoras para ese propósito. En 1977, los miembros de la organización adoptaron cambios en la estructura de gobierno que permitieron a las bibliotecas fuera de Ohio hacerse miembros y participar en el proyecto y el servicio; se hacían de un proyecto muy rentable económicamente. En 1981, la corporación se convirtió en Online Computer Library Center, Inc. (OCLC), una empresa privada con participación

Imagen 71
Henriette Avram presenta una cinta magnética con 9,000 fichas bibliográficas a Richard Coward de la Bibliografía Nacional Británica. 1967. Fuente: “American Libraries”, Octubre 1989. © Copyright American Library Association. This document may be reprinted and distributed for non-commercial and educational purposes only, and not for resale.
Imagen 72
Sótano de la Biblioteca del Congreso de los EUA. Pasillos con los antiguos catálogos en papel. 22,000 cajones con 22 000,000 de tarjetas catalográficas acumuladas hasta 1980. Dominio Público.

      universitaria que sigue brindando servicios de información a bibliotecas hasta la fecha (Rosenheck 1997, 1-7). Su departamento de producción de tarjetas llegó a su máximo en 1985, año en el que produjo 131 millones de tarjetas, ocho toneladas por semana. A partir de ahí, la producción fue declinando año con año con el advenimiento cada vez mayor de los catálogos en línea. Imprimió sus últimas tarjetas en 2015. Según la empresa, en toda su trayectoria imprimió cerca de mil novecientos millones de tarjetas (Leopold 2015).