El adolescente y sus conductas de riesgo. Ramón Florenzano. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Ramón Florenzano
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Документальная литература
Год издания: 0
isbn: 9789561425767
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en conjunto. Para la mayoría de los niños el microsistema original es pequeño y está constituido por la familia, primero en una interacción diádica con la madre que, luego, se amplía a un conjunto de relaciones triádicas con el padre o con los hermanos, en actividades simples: alimentarse, ser aseado, ser acariciado. En la medida que el niño va creciendo surgen mayores complejidades. Hace más cosas, con diversas personas, en más lugares. Para Bronfenbrenner, la esencia del desarrollo es la capacidad de expansión. El motor del desarrollo es el cariño o amor de quienes lo rodean. En cuanto a actividades, el niño comienza tempranamente a jugar y desarrolla más lentamente su capacidad para trabajar. Esos tres elementos: amor, juego y trabajo son las actividades centrales del microsistema infantil y si se dan positivamente, constituirán la base de una adecuada salud mental futura, siguiendo la clásica definición freudiana: la salud mental como "la capacidad de amar y trabajar" con el agregado rogeriano de "... y jugar". El desarrollo infantil se caracteriza por el aumentó en complejidad de las relaciones en las que participa o que observa: el reconocer que los padres tienen una relación entre ellos es un paso importante evolutivo en algún momento de la niñez. El microsistema infantil, entonces, se amplía por un aumento en el número de relaciones recíprocas con más personas y mayor grado de complejidad en la medida en que se crece.

      • Un segundo nivel de interacciones está constituido por los mesosistemas. Éstos son conexiones entre microsistemas en los que está inserto el niño o adolescente. Un ejemplo sería la primera ida del niño sin compañía de sus padres a la escuela. Este sería un vínculo mínimo entre dos sistemas: la familia y la escuela. Es mínimo porque el nexo es único: el propio niño. Si se mantuviera esta relación escasa entre padres y sistema escolar, aparece un factor de riesgo, ya que puede haber diferencias progresivas en cuanto a valores, experiencias o estilos conductuales entre escuela y familia. Las familias que no valorizan la educación, que no tienen preparación formal ellos mismos, que no tienen libros o enciclopedias en casa, que no promueven la lectura u otras destrezas académicas básicas, y que no usan el mismo lenguaje que se usa en el colegio, van colocando al niño en una progresiva desventaja. En contraste, cuando hay vinculación cercana de la familia y colegio, o sea, hay un mesosistema denso, los riesgos se transforman en oportunidades y mejora la posibilidad de una alta competencia académica. El principio global es que mientras más fuerte y complementaria es la relación entre microsistemas, más poderoso será el mesosistema resultante, y más potente su influencia en el desarrollo infantil

      • Un tercer nivel es el de los exosistemas. Éstos son situaciones que afectan el desarrollo infantil, pero en los cuales el niño no participa. Incluyen el trabajo de sus padres y los niveles de decisión, como las directivas de los establecimientos educacionales y las comisiones de planificación de las municipalidades o las juntas de vecinos de los barrios donde viven. Las decisiones tomadas en estos exosistemas afectarán directamente la vida cotidiana del niño. En este nivel, el riesgo puede surgir cuando hay situaciones que empobrecen la calidad de vida del microsistema infantil. Por ejemplo, si el trabajo no le da ninguna flexibilidad a la madre en cuanto a horarios o a tiempo para cuidar a un hijo enfermo, o si el padre tiene un trabajo que requiere que viaje constantemente y pase poco tiempo en casa. El efecto más frecuente del exosistema se ve cuando el nivel de ingresos es inadecuado para las necesidades familiares. Otra fuente potencial de riesgo en estos casos es cuando se toman decisiones que afectan en forma directa y negativa al niño: cuando se decide que las actividades de enriquecimiento curricular deben ser pagadas en forma adicional o cuando el concejo municipal autoriza venta de alcohol en locales cercanos al establecimiento educacional. Muchos niños quedan así expuestos a riesgos innecesarios por falta de una actitud de defensa de los niños de parte de los componentes de los cuerpos intermedios que toman decisiones. El tema de la equidad educacional es, entonces, muy importante.

      • Finalmente, está el nivel denominado de macrosistemas, que corresponde a las instituciones e ideologías que componen una cultura o subcultura particulares. Constituyen éstos los "guiones" del desarrollo individual, sean nacionales (chilenos, argentinos, latinoamericanos), ideológico-religiosos (judeocristianos, socialistas, capitalistas). Se refieren a una orientación acerca de "cómo debiera ser el mundo". El cambio cultural de un sistema a otro ha sido una de las tónicas de nuestro siglo, pudiendo ser evolucionarlo y lento o, revolucionario, cuando unas pocas personas instauran un cambio total, como sucedió con Cuba con el advenimiento de Fidel Castro al poder, o cuando Gorbachov promovió la perestroika de la ex Unión Soviética. El proceso de urbanización acelerada de las urbes latinoamericanas es otro cambio macrosistémico que afecta directamente a los adolescentes de hoy. Estos cambios globales afectan positiva o negativamente a los adolescentes que viven en estos períodos. Una política económica que no ayuda a mejorar la calidad educacional claramente afecta el desarrollo de los individuos así como el grado de sistemas de apoyo a los exosistemas cercanos a las personas en las comunidades locales. Políticas laborales de apoyo a las necesidades de las familias también pueden ser muy necesarias para favorecer un mejor nivel de desarrollo.

      En resumen, la perspectiva ecológica anterior, que se ilustra en el gráfico 1.1, es un mapa mental que permite entender la naturaleza o interacción de muchos de los factores de riesgo que mencionaremos. Éstos pueden ser vistos como negativos, cuando afectan dañinamente el desarrollo, o sea, factores de riesgo en sentido estricto, o positivos, cuando promueven el desarrollo, o sea, factores protectores. Si bien el microsistema es el ambiente más directamente involucrado en el desarrollo infantil, todos los niveles descritos terminan influyendo en el resultado final de éste.

       Gráfico 1.1 Resumen de la perspectiva ecológica del desarrollo adolescente.

      Modificado de Bronfenbrenner.

      La formación de los profesionales de la salud con respecto a adolescentes y jóvenes ha sido errática: en general, en las escuelas de medicina, enfermería, nutrición y otras existe poca información en relación con estos temas, y lo que hay es hecho en forma fragmentaria en diversas cátedras y ramos clínicos: pediatría, ginecoobstetricia, endocrinología, siquiatría, medicina familiar, etc. Lo mismo se aplica a carreras de otras profesiones que posteriormente deben trabajar intensivamente con adolescentes: psicología, trabajo social, pedagogía, etc. Como una manera de remediar lo anterior un conjunto de docentes de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile preparamos recientemente un texto con guías curriculares acerca de estos temas(27). En lo que sigue, revisaremos las definiciones y etapas del desarrollo adolescente normal y su contexto familiar, del grupo de pares, escolar y social. En términos de Bronfenbrenner, estudiaremos primero al adolescente y luego a su microsistema.

      DATOS EMPÍRICOS SOBRE LA JUVENTUD CHILENA: EL PROYECTO EPSAS

      Nuestro equipo en la División de Ciencias Médicas Oriente de la Facultad dé Medicina Universidad de Chile ha trabajado por ya más de una década en el tema de la Salud Familiar. Nuestras investigaciones apuntan a una correlación cercana entre disfuncionalidad familiar y aparición de conductas de riesgo en el adolescente. Estos resultados nos han hecho también buscar intervenciones que eviten tal disfuncionalidad. Nuestra hipótesis fue que el camino a un desarrollo psicosocial sano del adolescente atraviesa por el campo de un fundonamiento familiar activo y enriquecedor. Desde este punto de vista, la mejor manera de prevenir la drogadicción, la delincuencia o el embarazo temprano adolescente es el promover un funcionamiento familiar sano.

      A continuación describiremos un trabajo que buscó estimar la relación entre la prevalencia de conductas de riesgo biopsicosocial en adolescentes escolares de la Región Metropolitana de Santiago de Chile y su relación con la diferentes situaciones dentro de la familia, tales como separación, consumo excesivo de alcohol, y maltrato intrafamiliar. Se entendió como conducta de riesgo, el consumo frecuente de cigarrillo y alcohol y el consumo de drogas ilegales, así como: robo, agresividad individual o colectiva y vandalismo entre las actividades antisociales. La hipótesis de este estudio fue que existía una asociación entre la psicopatología parental y la manifestación de algunas conductas de riesgo, así como la manifestación de síntomas emocionales y la frecuencia de maltrato físico y abuso sexual entre los adolescentes hijos