Historia de la República de Chile. Juan Eduardo Vargas Cariola. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Juan Eduardo Vargas Cariola
Издательство: Bookwire
Серия: Historia de la República de Chile
Жанр произведения: Документальная литература
Год издания: 0
isbn: 9789561424586
Скачать книгу
la carencia de una fuente que asegurara permanentemente el abastecimiento, y esto solo pudo solucionarse en el siglo siguiente con la construcción de una represa artificial en el sector de Peñuelas. En Curicó, en 1874, el agua potable solo llegaba a 87 casas, y el resto de la población debía recurrir a pilones o a alguna acequia de aguas contaminadas340. Pero no siempre una red de agua potable garantizaba la calidad del producto que entregaba. Se denunciaba, por ejemplo que la acequia que surtía al depósito de agua potable de San Fernando pasaba antes por muchas pequeñas propiedades, cuyos habitantes arrojaban a ella los “estrujes” de sus riegos, lavaban la ropa, se bañaban y echaban los desperdicios de sus casas341. En 1886 se iniciaron los trabajos del tendido de cañerías de fierro en Talcahuano,342 y el mismo año la Municipalidad de Talca contrató un empréstito de 60 mil pesos para el ensanche y mejoramiento del servicio de agua potable de la ciudad343.

      El abastecimiento de alimentos en las ciudades fue un objetivo prioritario de las municipalidades, tanto para permitir el fácil acceso de la población a los bienes de consumo cuanto por constituir esa actividad una fuente de ingresos para ellas. En efecto, los mercados de abasto generaban un tributo por las carnes muertas, y otro tanto ocurría con las recovas o mercados y las ferias, constituyendo estas últimas la instalación transitoria de un grupo de vendedores en ciertas calles o plazas. La conducción de los productos en carretas originó el pago de una patente por estas y, en general, por toda clase de coches y carruajes. Muy tardíamente, en la década de 1880, se dictaron los reglamentos para el funcionamiento de mercados y mataderos, y los informes de los intendentes reiteraban las serias deficiencias que unos y otros mostraban. El comercio al menudeo se practicó en almacenes y despachos, en los cuales muy frecuentemente se expendía vinos y licores. También aquéllos eran fuente de crédito para los sectores de más escasos recursos, al permitirles la postergación de los pagos, lo que suponía un encarecimiento de los productos que adquirían.