—Bueno, sólo me queda a mí ahora desearte mucha suerte en tu camino. Eres un chaval dedicado y mereces tener éxito. Sabemos que muchos corazones van a aprender de ti los secretos de ser mejor y más feliz persona. Sin duda tu contribución será importante e inmensa.
Después de haber dicho eso, la dama guardiana terminó de comer, observó afuera y se dio vuelta hacia mí.
—Es tiempo para el desafío. Estoy en mi camino y no te olvides de mis recomendaciones.
Inmediatamente, ella se levanta y desaparece en la noche, dejándome solo con mi ansiedad. En este momento, miro mi reloj de bolsillo, dándome cuenta de que era tarde en la noche y un sueño ligero comenzó a aparecer. Pienso por un instante y decido hacer un sacrificio a favor de mis objetivos. Al tomar esta decisión, tomo una antorcha de mi maletín y salgo de la cabaña. Saliendo, me doy cuenta de que su luz no es suficiente para darme seguridad en la cima de la montaña sagrada y peligrosa. A pesar de eso, no me rindo y creo en mis capacidades. Tomo unos pasos y tomo otra decisión: Podría comenzar a caminar en el lado del oeste de la parte superior, donde se encuentra la majestuosa cueva. Lo hice, porque tenía una sospecha interior.
Determinado, ir a la ruta más cercana. A mitad de camino empiezo a escuchar ruidos de animales salvajes. ¿Y ahora? ¿Cómo me voy a proteger? Con miedo, empiezo a repetir una oración silenciosa y los ruidos abate inmediatamente como por arte de milagro. Me siento más relajado y sigo caminando, concentrándome en el desafío. Otra vez las dudas aparecen incesantemente y me pregunto: ¿será posible para mí superar este primer desafío tan difícil? Bueno, por mi parte estaría haciendo todo lo posible para hacer lo mejor para empezar a cumplir mis objetivos: la búsqueda de respuestas sobre la noche oscura y mis ansias de conocimiento.
Sigo caminando y con los intensos cricrí de los insectos pierdo la concentración. Como alternativa, decido apostar por mis instintos y experiencia para que no se pierdan en el camino. Después de algún tiempo, con mis pasos constantes y rápidos me acerco a la cueva de la desesperación, donde me convertí en el vidente de los libros.
Caminando hacia adelante y de pie delante de ella, los recuerdos de la última vez que estuve aquí volvieron a mí. Recuerdo todos los detalles, incluyendo el que era sólo un soñador que había subido la montaña en busca de un destino desconocido. Por subirla completamente, tuve el placer de conocer la dama guardián, un espíritu milagroso capaz de entender los misterios más profundos del ser humano. Con su ayuda, he logrado tres desafíos, uno más difícil que el otro. Todavía en la montaña, he enfrentado al fantasma y la juventud con el objetivo de afirmar lo que yo quería para mí. Después de todas esas etapas, finalmente pude entrar en la cueva de la desesperación, la cueva que era capaz de hacer posible lo imposible. Yendo, superando todos los obstáculos, fui a través de secciones hasta que llegué a la cámara secreta. Allí, se fortalecieron mis dones naturales y terminó convirtiendo en el vidente, un ser capaz de hacer milagros en el tiempo y el espacio. Con todo me di cuenta que dejé la cueva y viaje a través del tiempo, corregí las injusticias, ayude a alguien a encontrarse a sí mismo y por último recogí mis fuerzas opuestas como la última vez. He tenido éxito en mi misión y ahora me sentía preparado para una nueva aventura, penetrar en la densa noche oscura del alma, algo que nadie nunca lo hizo. Lleno de entusiasmo, caminé más adelante y me detuve en la entrada a la cueva a la espera de una señal de lo sobrenatural, pero no pasó nada. Con el paso del tiempo, me había convencido de que la cueva no tenía nada que ver con el desafío real y me aleje de ella busque otro camino, hacia el lado norte de la montaña. Lo encontré enseguida, ayudado por la luz de la antorcha y continúo caminando.
Escogiendo un nuevo camino, siento mi fe y esperanzas renovadas, porque creo que voy a cumplir los planes y encontrar el éxito tan deseado. Seguro y siguiendo los instintos desarrollados de vidente, en un momento determinado, decido dejar el camino y entrar en la espesura. Incluso frente a dificultades, como las espinas que me lastiman, sigo caminando en la misma dirección, porque tenía la seguridad interior. Sigo a este ritmo durante unos diez minutos, hasta que de la nada apareció un claro. Delante de mí había cuatro caminos distintos y tengo que elegir uno de ellos. Bajo presión, empiezo a analizar todas las posibilidades. En este caso, no es sólo suerte o destino, simplemente conocimiento. Entre los caminos se encuentra el camino de la luz, el camino de la pasividad, del arrepentimiento y el camino de la noche oscura del alma. La primera de ellas pertenece a todos los que se dan a la llamada del padre, su misión. Sin duda este es el camino más difícil, porque exige renuncias y elecciones que la mayoría no están dispuestos a hacer. Sin embargo, el segundo, el camino de la pasividad, representa todos aquellos que persisten con sus errores sin preocuparse por las consecuencias, como el dolor de los demás. En este caso yo elijo este camino que puedo incluso llegar a la locura. En relación con el camino del arrepentimiento, éste pertenece a todos y cualquier ser humano que está dispuesto a cambiar la vida, para perdonar y tratar de entender el otro lado. Sin embargo, la mayoría de la gente no puede pisarlo por mucho tiempo, sobre todo por orgullo, exactamente el pecado cardinal que voy a tratar de comprender hasta el fondo en este reto particular. En el caso que yo opte por este camino, observaré y sentiré un montón de sufrimiento. Por último, es el camino de la noche oscura del alma que representa el conocimiento y la experiencia mística de la oscuridad que todo el mundo pasa en cierto momento en la vida. Después de meditar un rato, termino decidiendo que el camino de la noche oscura del alma es el más adecuado a seguir en ese momento. Antes de continuar el viaje, sin embargo, recuerdo mis últimos retos especialmente cuando tuve que elegir, en la última aventura, entre las dos fuerzas opuestas. En este caso, el camino de la derecha fue el más correcto, porque representa el camino de la luz, mientras que el de la izquierda representa el camino de la oscuridad. Ahora la situación era diferente, porque hubo cuatro caminos y sólo uno era la opción más adecuada. Yo medité por más tiempo, me decido a invertir los papeles y denominar el camino hacia la extrema izquierda, el de la luz pura y uno al lado como el de la penitencia. Por lo que denomino la ruta de la extrema derecha, como uno de la noche oscura del alma y el de a su lado como uno de pasividad. Para confirmar mi intuición, Yo cree un aura alrededor de los caminos y este plan me dio el resultado deseado. Entonces sigo el camino de la extrema derecha buscando la verdad que pocos saben.
Después de caminar un tiempo, mi ritmo me lleva a un lugar plano, exuberante y enorme, con un lago en el centro. En sus orillas, una mujer está saludándome, llamándome. Por curiosidad, yo respondo a su llamada y me acerco. Hasta llegar a ella, empiezo la conversación:
— ¿Es usted la dueña del misterio del origen de la noche oscura del alma?
—No, mi estimado. Pero puedo ayudar.
Dicho esto, la mujer se mueve de forma rápida y en pocos segundos se coloca detrás de mí, empujándome hacia el lago. Indefenso, entro en el agua. En este momento, la montaña tiembla, las fuerzas gravitacionales son afectadas, el cielo se oscurece y mi cuerpo asciende a una velocidad enorme. Poco a poco pierdo mis sentidos y aparecen entonces las visiones. Me concentro en una de ellas, y como si estuviera viajando a través del tiempo, veo una gran explosión y sus consecuencias. En esa visión particular, contemplo la creación de los sistemas solares y todos sus elementos creadores, lo que representa la creación de la materia. Además de ésta, ocurrió simultáneamente la creación espiritual de todos los seres humanos. En éste, en particular, observo los ejércitos de ángeles bajo el mando de un único maestro, ayudado por un sirviente llamado Lucifer, un ángel muy útil y eficiente. Todo iba bien en el plan espiritual, hasta que un día el Maestro de los Ejércitos tuvo que irse con el objetivo de crear nuevas galaxias en universos distantes, y así dejó a cargo del cielo a Lucifer. Tan pronto que el Maestro se fue, Lucifer creció en importancia y el poder se le subió a la cabeza. En un instante decidió que ya no sería un sirviente y se rebeló con algunos otros ángeles. Obtuvo partidarios de todas las jerarquías: Tronos, poderes, Ikiriris, arcángeles, ángeles, etc. Sin embargo, los planes de Lucifer fueron descubiertos a tiempo por otro sirviente: Miguel. Éste no estaba de acuerdo con la ambición de su hermano Lucifer y con otros ángeles