— Muy interesante. Usted dice que esta es la segunda vez que usted va allí. ¿Cómo fue la primera vez?
— Fue hace un año. Yo era un pobre soñador en busca de sabiduría y controlar mis “Fuerzas opuestas”. Con aquel objetivo subí la montaña, alcance la cumbre, encontré al vigilante (un ser milagroso que sabe misterios profundos), desafíos llevados a cabo, encontré al fantasma, la juventud y el niño, y finalmente entré en la cueva. Esta última experiencia cambió mi vida completamente, porque me hizo el vidente, un ser capaz de superar las barreras de tiempo y espacio y omnisciente por sus visiones. Con mis nuevos poderes, yo podría entender los sentimientos más profundos y las intenciones de las otras personas. Mientras tanto, todavía no puedo decir que estoy listo. La vida es un aprendizaje eterno en el cual la cueva era sólo una etapa. Ahora estoy listo para nuevos desafíos y por lo tanto mi vida está de vuelta. Esta vez quiero entender mi noche oscura del alma, el significado de todo lo que he vivido hace dos años. Creo que encontraré respuestas en la montaña o al menos comenzaré un nuevo viaje.
— Su historia es realmente impresionante. Le creo, porque yo podría sentir su sinceridad. ¿Sólo no entendí una cosa, cuál es el sentido de esta expresión, la noche oscura del alma?
— En este momento, yo mismo no sé el sentido completo de la noche oscura. Pero puedo dar una noción básica, es el momento que nos separamos nosotros mismos del Universo fuerzas benignas para pensar sólo en nuestras vanidades. Este momento es crítico, siendo capaz de destruir o salvar el alma de un ser humano, dependiendo del caso.
—Creo que entiendo. He pasado ya por la noche oscura cuando yo era infiel a mi esposa con mujeres de la noche. Cuando ella me abandonó, me di cuenta del valor real, me arrepentí y fuimos capaces de solucionarlo. A partir de entonces yo soy un nuevo hombre.
— Lo que le pasó a usted le puedo garantizar que fue un lapso. En efecto, la noche oscura es más profunda de lo que podamos imaginar. Espero encontrar las respuestas que yo tanta necesito.
—Buena suerte con su búsqueda. Puedo verle como un chaval culto, inteligente y decidido. La gente decidida siempre alcanza sus objetivos.
— Gracias. Ahora yo tengo que meditar y tener un descanso. No me despierte hasta que hayamos alcanzado nuestro destino.
Aurelio me tranquiliza y luego me concentro en mi interior, olvidando todas las preocupaciones. Gradualmente, mi cuerpo se relaja y los sentidos extra-sensorial son despertados. Pronto comienzo a ver imágenes deformadas y confusas. Un rato más tarde, mecido por la fuerza de los pensamientos, me veo en una llanura enorme por todos los lados. Estoy exactamente en medio de este lugar. De la derecha surge un sol ardiente y fuerte. Esto limpia todas mis impurezas y me da una sensación de paz y libertad. Al mismo tiempo, de la izquierda aparece una nube gruesa y oscura, trayendo una atmósfera pesada, llena de sentimientos y pensamientos negativos. Esta fuerza es capaz de condenar a todos aquellos que estén cerca, los absorbidos por su sombra. Al lado de ello me siento culpable, hasta sin haber tenido un juicio justo. Las dos fuerzas se ponen cerca todo el tiempo, produciendo en mí la reunión de las dos “Fuerzas opuestas”, esto hace tiempo parecía que yo había controlado. Poco después, entre las dos fuerzas, un ángel aparece y lleva en su cara la señal de la opción de la palabra. Lo invoco, y el choque entre las dos fuerzas opuestas se detiene, al menos temporalmente, dejándome un poco más relajado. Aun así, no estoy libre de las posibles interacciones de la noche oscura, que parece ser parte de cualquiera y cada individuo.
Después de la invocación, el ángel, el sol, la nube oscura, el paisaje, todo desaparece y gradualmente me hago consiente. Finalmente me despierto. Siento que estoy en el mismo lugar, dentro de un taxi en movimiento. ¿Qué significará todo esto? A fin de encontrar respuestas, miro fuera de la ventana y veo que estoy casi en mi destino. Estoy feliz, estoy más cercano para conseguir algunas respuestas.
El camino hacia la montaña
Finalmente, el coche llega al destino y se detiene. Inmediatamente, agarro mi maleta y salgo con convicción. Marchándome, comienzo a imaginar todos los aspectos del centro de pueblo. A primera vista, parece muy tranquilo y acogedor justo como la vez pasada. Comienzo a ir adelante y algunas personas conocidas vienen para encontrarme, tratando de ayudar. Les agradezco y en seguida comenzamos a charlar. Después del rato, digo adiós, usando como excusa un negocio importante y urgente en la montaña
La caminata se reinicia, llevando la maleta pesada y las preocupaciones indeseables. ¿Qué me esperará después de subir la montaña por segunda vez? ¿Cómo será la querida dama guardián? Aquellas eran algunas de las preguntas que llenan mi mente.
Sigo caminando y por primera vez me siento cansado. Las circunstancias me hacen detenerme un rato y otra vez una angustia invade mi ser completamente. ¿Qué me sucedía? ¿Dónde estaba el espíritu, la fe y la energía del aventurero, que comenzó su sueño hace un año? En aquel momento, todo me hizo creer que yo ya no era la misma persona. Antes de la desesperación total, decido analizar imparcialmente la situación. En un corto e intenso periodo post-cueva, las situaciones completamente adversas han ocurrido, que me hizo repensar sobre quién yo era. Sin embargo, en aquel momento concluyo que era necesario volver a mí, el soñador. Sin ello, yo no sería seguramente capaz de afrontar todos los obstáculos que quizás me separaron de entender totalmente la noche oscura del alma. Pensando en esto, inhalo y exhalo profundamente buscando la energía capaz de guiarme, y cuando creo que lo he alcanzado, ando otra vez. En este momento, me siento ya más relajado y consolado, aunque yo sólo esté en el pie de la montaña.
Camino un poco alejado del fondo y las voces de la montaña comienzan a actuar. Me siento confuso y mareado, porque son realmente fuertes. Como la otra vez, ellos tratan de persuadirme a rendirme. Aparte de las voces, mi sexto sentido es sometido a una secuencia de imágenes. En ellos, veo fuego, dolor, acciones inhumanas, traiciones, la reunión de las fuerzas opuestas y la noche oscura del alma. Durante un momento, perdí la conciencia y me veo en los tiempos coloniales del Brasil. Veo el principio, el medio y final de todo. En esta visión retrospectiva, veo el primer contacto de los dueños inocentes de Brasil, los indios, con los extranjeros que detrás de su aspecto amistoso esconden sus segundas intenciones. Ellos son bienvenidos, y sin la sospecha de anfitriones, ellos intentan de cualquier modo encontrar la riqueza. En su primer intento, ellos no encuentran lo que buscan y se retiran. Más tarde ellos vuelven y de manera brutal esclavizan a los indios, exploran sus recursos naturales y esto causa una de las mayores masacres étnicas de todos los tiempos. Esto representa el fuego de la noche oscura del alma, un fuego que destruyó vidas, sueños y esperanzas.
En otro momento me veo en campos de concentración de nazis, en la Segunda Guerra mundial. En esta visión, es muy bien claro el aspecto de los opresores de la noche oscura, porque ellos actúan con falsedad, astucia, frialdad y maldad sin límites. Soy sujetado a escenas muy fuertes de la violación de los derechos humanos y esto me hace ponerme a llorar. ¿Cómo puede existir seres humanos, imagen del Creador, ser capaz de tales atrocidades y con tal odio? La gente así, nacionalistas y prejuiciosa, que hacen al Satán parecer a un ángel en verdad. Esto representa el dolor de la noche oscura del alma y es un camino sin regreso.
Un momento después, soy llevado a una explosión de vegetación, más exactamente el bosque del Amazona. Vuelo sobre el área y en un cierto tiempo veo un grande despeje en el bosque. Decido aterrizar para investigar. Con poca sorpresa, encuentro a hombres con varios tipos de instrumentos, que apuntan a la tala de la mayor cantidad de árboles posibles, en un área que debería ser para la conservación de ambiente. La situación me hace gritar otra vez y maldigo la fuente de poder y riqueza que son la causa de todo esto. En otro lugar, no demasiado lejos, la