Especial atención dieron a la formación de su espíritu guerrero sobre la base de una organización social por grupos mediante la elección de toquis o jefes y acatamiento a sus resoluciones, pero carentes de cohesión política lo que hacía proliferar las rivalidades entre ellos. Sin embargo, con la llegada de los españoles, aprendieron de éstos tácticas y estrategias de combates que aplicaron inteligentemente y que les permitió importantes triunfos y poder mantener durante varios siglos el territorio desde el sur del río Bío Bío sin acceso al español. La idiosincrasia del pueblo mapuche y su espíritu de reivindicación se ha mantenido permanente hasta nuestros días.
10. Invasiones incásicas
El imperio de los incas, que tenía sede en el Cuzco, y bajo el reinado de Túpac Yupanqui, aproximadamente en el año 1460, invadió la parte norte de Chile llegando hasta la región de Coquimbo. Posteriormente, Huaina Capac, hijo del anterior, y después del año 1485, con un eficiente ejército, extendió la presencia incásica hasta el río Maule, no pudiendo continuar más al sur, debido a la derrota que sufrió en esa zona de parte de los aborígenes.
Con el objeto de controlar y evitar posibles alzamientos en contra del imperio, los incas establecieron numerosas colonias llamadas mitimaes que estaban constituidas por agricultores y artesanos pacíficos traídos desde distintas partes del imperio, los cuales se transformaron posteriormente en caseríos como Limache, Llay Llay, Colina, Apoquindo, Macul, Lampa.
La dominación incásica en Chile fue de corta duración pero fue muy importante para la vida de los indígenas, ya que aportó progresos tales como la construcción de habitaciones de adobes, empleo de la piedra para cercos, riego en la agricultura, construcción de caminos, trabajos en los lavaderos de oro, ornamentación cerámica, y organización administrativa, especialmente destinada a facilitar el cobro de tributos y el respeto a la autoridad.15
1Ballesteros Manuel G. Historia de la Cultura. Ediciones Pegaso. Gráfica González. Madrid. 1952. Pág.27
2Real Academia Española.Diccionaio de la Lengua Española. Edit. Espasa Calpe. Madrid. 1984.
3Eyzaguirre Jaime. Historia del Derecho. Edit. Universitaria. Santiago. 1955. Pág.3.
4García P. Manuel, Historia Universal. Edit. Planeta. Barcelona. 2004. Pág.43.
5Heise G. Julio. Historia Constitucional de Chile. Edit. Jurídica. Santiago 1959. Pág. 11.
6Sánchez Luis A. Historia General de América. Edic. Rodas. Madrid. 1972. Tomo I. Pág.39
7Pereyra Carlos. Breve Historia de América. Editora Zig Zag Santiago Chile. 1946. pág.66.
8Secco E, Oscar y otro. Historia Universal. Epoca Moderna. Edit. Kapeluz. B. Aires. 1972. Pág.26
9Eyzaguirre Jaime. Historia del Derecho. Editorial Jurídica. Ob.Cit. Pág.230.
10Latchman Ricardo. La agricultura precolombina en Chile y los países vecinos. Santiago. Ediciones U. de Chile.1936. Pág. 13.
11Silva Galdámez Osvaldo. Historia de Chile. Prehistoria. Editorial Universitaria Santiago. 1981.Pág.69
12Molina Ignacio Abate. Compendio de la Historia Civil del Reyno de Chile. 2° Parte. Pehuén Editores. Santiago, 2000. Pág.222.
13Thayer O. Luis. Formación de la raza chilena. Revista Chilena de Historia y Geografía. N°30. Tomo XXVI Año 1918. Pág 77.
14Oliver Sch. Carlos. Los indios en Chile. Lo que actualmente se sabe sobre ellos. Talleres Gráficos El Sur. 1932. Pág, 69.
15Aldunate Carlos y otros. Historia de Chile. Salesianos Impresores. Santiago.2012. Pág.37.
CAPÍTULO II
PERÍODO COLONIAL
11. Descubrimiento de Chile
Diego de Almagro (1475-1538) nació en La Mancha, España, y en circunstancias que se encontraba en Panamá, formó una sociedad con Francisco Pizarro González (1478-1541) y con el cura Hernando de Luque con el objeto de conquistar el imperio de los Incas que se extendía desde Ecuador al río Maule en Chile.
Pero debido a que el gobernador de Panamá no otorgó su autorización para llevar a cabo la exploración, Francisco Pizarro se dirigió a España logrando suscribir con el Monarca Carlos V, el 26 julio 1529, las Capitulaciones de Toledo, por las cuales fue nombrado Gobernador, Capitán General y Adelantado de las nuevas tierras.
De regreso a Panamá y después de logrado el objetivo de la conquista del imperio incásico, Pizarro y Almagro solicitaron al monarca Carlos V que les concediesen sendas gobernaciones en los territorios conquistados, pero, habiendo surgidos otros interesados, el rey optó por efectuar un reparto general de gobernaciones dividiendo el territorio en cuatro extensas zonas contenidas en las Capitulaciones de 1534 por la cual se efectuaron las siguientes concesiones:
1°. La Nueva Castilla a Francisco Pizarro González, que comprendía por el Norte desde el pueblo de Santiago, hoy Ecuador hasta 270 leguas al Sur hasta Cincha, hoy Perú y por el Oeste comprendía todos los territorios pertenecientes a la monarquía de Castilla.
2°. La Nueva Toledo a Diego de Almagro que abarcaba 200 leguas al Sur de la anterior y por el Oeste comprendía asimismo los territorios del monarca de Castilla.
3°. La Nueva Andalucía a Pedro de Mendoza que se extendía por espacio de 200 leguas al sur de la Nueva Toledo y por el Este hasta los dominios portugueses y océano Atlántico.
4°. La Nueva León a Simón de Alcazaba que comprendía una extensión de 200 leguas al sur de la Nueva Andalucía.16
En virtud de lo anterior, y recurriendo a sus propias riquezas obtenidas en la conquista del Perú, Diego de Almagro organizó una expedición hacia el sur, por mar y por tierra, compuesta de españoles y de indios. Inició la travesía por los caminos cordilleranos, sufriendo muchas pérdidas humanas por las dificultades e inclemencia del tiempo y, en marzo de 1536, cruzó la cordillera y descubrió el valle de Copiapó.17
Posteriormente, Almagro recibió refuerzos con la llegada de tres naves a cargo de Ruy Díaz, una de las cuales piloteada por Alonso Quintero, descubrió la actual bahía de Quintero y otra, comandada por Juan de Saavedra, la de Valparaíso.
Debido a la resistencia de los indígenas, a la ausencia de oro y plata se generó un desencanto entre los expedicionarios, por lo cual Almagro dispuso el regreso al Cuzco a través del desierto de Atacama. Almagro no efectuó un mayor reconocimiento del territorio, sino que “vio y se volvió”18
A su llegada al Perú, Diego de Almagro se encontró en un grave conflicto bélico con Pizarro y, a consecuencia de ello, fue hecho prisionero y condenado a pena de muerte, falleciendo en el año 1538.
12. La conquista de Chile
La iniciativa de la conquista de Chile correspondió a Pedro de Valdivia (1497-1553) quien nació en la villa de Castuera, en Extremadura, España, proveniente de una familia de hidalgo pobres. Se enroló en las milicias militares de Carlos V y participó en las campañas de Italia. Posteriormente, se trasladó a Venezuela y, más tarde, pasó al Perú en 1534 donde prestó servicios bajo el mando de Francisco Pizarro en el conflicto de éste con Diego de Almagro, por lo cual fue compensado económicamente logrando una notable fortuna.
En abril de 1539, y pese a las reticencias de Francisco Pizarro, obtuvo de éste