Una cosa sencilla. Eddie Stern. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Eddie Stern
Издательство: Bookwire
Серия: Ananta
Жанр произведения: Сделай Сам
Год издания: 0
isbn: 9789873761546
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revivir y elevar nuestra cultura”.

      5. Swami Sivananda, de Rishikesh, realizó dos tours alrededor de toda India para diseminar el conocimiento del yoga y la espiritualidad. En 1950 viajó al norte y al sur de India, así como a Sri Lanka (antes llamado Ceilón), visitando a millones de personas a lo largo del camino. Sus anotaciones están registradas en Sivananda’s Lectures During All India and Ceylon Tour, 1950, editado por Swami Venkatesananda (Rishikesh, India: Divine Life Publications, 2009).

      6. Annie Gowen, “India’s New Prime Minister, Narenda Modi, Aims to Rebrand and Promote Yoga in India”, Washington Post, diciembre, 2014: “Shripad Yesso Naik, el nuevo ministro del yoga de la India, sueña con el día en el que los saludos al sol y la postura del perro que mira hacia abajo sean tan populares en su país como lo son en el resto del mundo”. http://www.washingtonpost.com/world/asiapacific/indias-new-prime-minister-narendra-modi-wants-to-rebrand-and-promote-yoga-in-india/2014/12/02/7c5291de-7006-11e4-a2c2-478179fd0489story.html? utmterm=.0e4cd7edc2a3 [6/11/2019].

      7. Una búsqueda rápida en Internet te mostrará listas de muchas organizaciones que proveen estos servicios. La David Lynch Foundation, por ejemplo, se especializa en enseñar Meditación Transcendental a veteranos de guerra, a mujeres rescatadas de la trata de personas y a niños en las escuelas, solo por nombrar una organización.

      8. Por ejemplo, en 2015 en Encinitas, California, se llevó adelante un juicio que buscó distinguir entre el yoga como una práctica de bienestar social/emocional y una práctica religiosa: Steven Sedlock et al. v. Timothy Baird et al., Court of Appeals, Fourth Appellate, Division One, State of California, D064888, 3 de abril, 2015. https://cases.justia.com/california/court-of-appeal/2015-d064888.pdf?ts=1428084026 [6/11/2019].

      9. Ver en Yoga Sutras 2.31: “Sin embargo, las restricciones se convierten en un gran voto cuando se tornan universales, y son irrestrictas en relación con la clase social, el país, el tiempo o el deber (en cualquier persona)” (Jātideśakālasamayānavichhinnāh sārvabhaumā mahāvratam).

      10. Patañjali, Yoga Philosophy of Patañjali: Containing His Yoga Aphorisms with Vyāsa’s Commentary in Sanskrit and a Translation with Annotations Including Many Suggestions for the Practice of Yoga, comentado por Swami Hariharānanda Āraṇya. Albany: State University of New York Press, 1983, 3.

      11. La seis son: Brahma Sutras, Yoga Sutras, Purva Mimamsa Sutras, Vaisheshika (o Kanada) Sutras, Sankhya Karika y Nyaya Sutras.

      12. Yogaschittavritti nirodhah, Yoga Sutras 1.2.

      13. Patañjali, Yoga Philosophy of Patañjali, 1.

      14. Ibíd., 8.

      15. Sri K. Pattabhi Jois, Yoga Mala: Las enseñanzas originales del Maestro del Ashtanga Yoga Sri K. Pattabhi Jois. Buenos Aires: El hilo de Ariadna, 2017, 37.

      16. Vivekakhyātir aviplavā hānopāh, Yoga Sutras 2.26.

      17. Jois, Yoga Mala, 37-38.

      LAS OCHO RAMAS

      La definición literal de ashtanga yoga es ocho ramas, o partes, enumeradas por el sabio Patanjali. Aunque establecer fechas es un gran desafío debido a la falta de registros de las antiguas tradiciones filosóficas indias, existe un consenso generalizado que estima que Patanjali escribió sus textos alrededor del año 200 de esta era. En las antiguas tradiciones indias de sabiduría, contar o enumerar distintas prácticas y grupos de cosas es muy común: las ocho ramas del yoga, los cuatro Vedas, los 108 Upanishads, las veinticuatro categorías de la experiencia, y así sucesivamente. Enumerar cosas nos ayuda a mantener nuestra mente organizada, para así tener guía o foco cuando pensamos acerca de ideas abstractas. Las ocho ramas tienen significados tradicionales asociados con ellos, pero en este libro uso un enfoque un poco más ligero y más contemporáneo. La traducción literal de las palabras sánscritas puede ser engorrosa, y lo literal no siempre nos ayuda a progresar o transformar, o siquiera a comprender el supuesto significado de una palabra. Gran parte del canon sánscrito está escrito de forma alegórica. Las traducciones no se pueden hacer solo con un diccionario, y es aquí donde surge mucha confusión acerca del significado de los Vedas, los Upanishads, y el hinduismo en general.

      Idealmente, lo que buscamos en una práctica espiritual es transformación, no rigidez. En este libro exploro las ocho ramas del yoga en relación con la decisión consciente que realizamos al comprometernos con el crecimiento, la honestidad, la disciplina y la transformación. Cuando miramos a través de esta lente, las ocho ramas se convierten en un medio para estar presentes en todos los niveles de compromiso, desde el nivel del mundo y las personas que nos rodean hasta la forma en que nos vinculamos con nuestro ser interior. Después de todo, experimentar el mundo es una de las maneras primordiales de saber que estamos vivos, que vivimos en un mundo interconectado, interdependiente y dinámicamente diverso. Si vivimos solo en nuestros pensamientos, nos desconectamos de la experiencia y nuestra morada verdadera.

      Podríamos describir las ocho ramas clásicas del siguiente modo:

      1. Yama: principios éticos de la no violencia, la verdad, no robar, la moderación sexual y la no codicia.

      2. Niyama: práctica personal de la limpieza, el contentamiento, la austeridad, la repetición de mantras y la entrega a Dios.

      3. Asana: la práctica de posturas.

      4. Pranayama: la práctica del control de la respiración.

      5. Pratyahara: el retraimiento del contacto de los sentidos con los objetos del mundo.

      6. Dharana: concentración sostenida.

      7. Dhyana: meditación ininterrumpida.

      8. Samadhi: la experiencia de la no diferencia entre el que observa y lo observado.

      Aunque estas son traducciones muy precisas, y aunque es importante estar atentos al uso de estos términos técnicos, también es muy importante que comprendamos, como “usuarios finales” de la práctica, de qué manera estas ramas pueden actuar como guías. ¿Cómo me responsabilizo al comprometerme con una práctica espiritual? ¿Cómo puedo aplicar las ramas de manera que pueda transformar y suavizar mis propias asperezas? Con esta idea en mente, las ocho ramas pueden ser vistas como la perspectiva de elegir muy conscientemente comportamientos alternativos, y pueden ser vistas así:

      1. Yama: elijo conscientemente que mis interacciones interpersonales sean reflexivas, amorosas y respetuosas.

      2. Niyama: elijo conscientemente dedicarme a mis prácticas y disciplinas espirituales.

      3. Asana: elijo conscientemente cuidar de mi cuerpo y mi mente a través de la práctica de posturas.

      4. Pranayama: elijo conscientemente regular y equilibrar mi respiración y mi sistema nervioso mediante las prácticas respiratorias.

      5. Pratyahara: elijo conscientemente prestar atención a la consciencia que me habita y que anima mis órganos sensoriales.

      6. Dharana: elijo conscientemente dirigir mi foco y mi atención, y volver a centrarme cuando sea necesario.

      7. Dhyana: elijo conscientemente mover mi mente hacia la concentración