Varias de las iniciativas propuestas en el proyecto de carrera docente van en el sentido correcto. Es importante elevar las exigencias en la selección de los estudiantes, no solo por el puntaje PSU, sino también valorando el rendimiento escotar a través del ranking de notas, en especial en los colegios vulnerables. Así también, el aumentar el tiempo protegido de los docentes para la preparación de sus clases (a 30%) es un avance que deberá incrementarse en los próximos años, por tratarse de un factor clave para los resultados de aprendizaje en el aula. Se contemplan mayores oportunidades de desarrollo profesional y económico, los que debieran ser un incentivo para atraer a mejores alumnos. Sin embargo, parte importante de la motivación para sentirse atraídos por la profesión docente tiene que ver con la valoración social de su labor, por lo cual la dignidad de los profesores es un tema prioritario a nivel país. El prestigio, reconocimiento y remuneraciones deben estar en la categoría de las profesiones con mayor reconocimiento social. El desafío es contar con los mejores profesores para los colegios más vulnerables.
Es un avance la presencia de estándares mínimos obligatorios, en términos pedagógicos y disciplinares, que deben ser exigentes, de calidad y conocidos, para evaluar la formación entregada por las universidades. Se requiere definir la habilitación para la docencia no solo desde el punto de vista de los conocimientos, sino también de las habilidades desarrolladas en el ejercicio práctico de la profesión. En este sentido, es crucial la evaluación de competencias docentes y una red de prácticas disponibles para la enseñanza.
Dentro de los factores de apoyo con los que cuenta el alumno, es importante mencionar a la familia, un gran estímulo en el aprendizaje. Además, la educación parvularia representa una etapa de gran crecimiento en habilidades cognitivas y afectivas. Ya en la formación escolar, la literatura sobre la formación inicial docente ha destacado la importancia de contar con mentores para los futuros profesores, en especial de los jóvenes que inician su carrera.
Por último, un tema en el cual no se ha enfatizado lo suficiente para las decisiones de política pública es la importancia del diálogo y conocer qué piensan y sienten los profesores. Se habla por ellos, pero no siempre conocemos de primera fuente sus anhelos, frustraciones, sueños y expectativas. Es tiempo de escucharlos de manera activa, de darles confianza y de alinear las propuestas e incentivos en un diálogo que tenga en el centro al estudiante y su maestro. El contacto personal y la relación docente-alumno, de confianza, afectiva, con presencia y profundidad, serán cuestiones fundamentales que marcarán todo el proceso educativo.
Publicado en el diario La Segunda el 13 de septiembre de 2013.
Perfeccionamiento de los profesores
El reciente proyecto de carrera inicial docente ha puesto nuevamente el foco en el aporte de los profesores como el factor clave para mejorar la calidad de la enseñanza y por tanto el aprendizaje de nuestros niños. Existe consenso en que el desarrollo de los maestros debe ser una idea país de gran relevancia, la que se debe planificar de manera programada en varias áreas. Las etapas a desarrollar deben incluir la atracción de mejores estudiantes, realizar cambios curriculares que permitan perfeccionar la formación inicial, dar un mayor tiempo protegido a los profesores para la preparación y evaluación de sus tareas docentes, así como facilidades para acceder a formación continua.
Así también se debe avanzar en la socialización y acuerdo respecto de la obligatoriedad de estándares mínimos de conocimientos disciplinares y pedagógicos. Es importante, además, desarrollar una mejor prueba de egreso que incluya conocimientos disciplinares y competencias prácticas en aula. Es crucial definir la docencia no solo desde el punto de vista de los conocimientos teóricos, sino también de las habilidades prácticas desarrolladas en el ejercicio de la profesión. Para esto, es relevante el rol que puede cumplir un campo educacional constituido por una red de prácticas que ofrezca a los futuros profesores oportunidades activas de aprendizaje.
Es crucial definir la docencia no solo desde el punto de vista de los conocimientos teóricos, sino también de las habilidades prácticas desarrolladas en el ejercicio de la profesión. Para esto, es relevante el rol que puede cumplir un campo educacional constituido por una red de prácticas que ofrezca a los futuros profesores oportunidades activas de aprendizaje.
Por otra parte, es importante avanzar en un diálogo permanente con las universidades y centros formadores, y especialmente conocer el sentir y la visión de los profesores para en conjunto avanzar en la valoración y prestigio social de una de las profesiones y vocaciones más importantes de la sociedad. El prestigio, remuneraciones y reconocimiento social deben alinearse con una agenda país que privilegie tener a mejores profesores para nuestros niños.
Actualmente en Chile existe un gran número de estudiantes de pedagogía, la mayoría con una débil formación escolar, que no logran los puntajes mínimos de postulación a las universidades y realizan su formación en instituciones que presentan serios problemas de calidad y acreditación. En este escenario, junto con potenciar la calidad de su formación actual, es importante recalcar la formación de habilidades y la oportunidad de continuar aprendiendo durante su ejercicio profesional.
Es por ello que parece muy necesario hablar de los más de 180 mil profesores que actualmente se desempeñan en nuestro sistema educacional. La planificación y trabajo de formación, educación y capacitación continua es vital para poder avanzar en su perfeccionamiento a lo largo de su trayectoria profesional.
Los cursos y programas organizados por las universidades, ya sea en formatos de seminarios, diplomados o programas más estructurados a nivel de magíster, deben diseñarse y desarrollarse en un diálogo e intercambio de opiniones más cercano y sensible a los contextos educacionales en que se desempeñan los docentes. Esta debe ser la manera de planificar programas y contenidos acorde a sus reales necesidades. Las áreas de liderazgo escolar, perfeccionamiento disciplinar, actualización curricular, trabajo en aula, competencias docentes, temas de políticas públicas en educación, retroalimentación o feedback y evaluación de los estudiantes, son algunas en que es muy importante realizar una planificación y avanzar. El trabajo debe ser reconocido y validado por los establecimientos educacionales, con financiamiento y dentro del horario de tiempo contratado, para que se demuestre un compromiso y confianza de parte de las autoridades para con sus profesores. De los maestros se espera una dedicación y responsabilidad similar a la que solicitan a diario a sus estudiantes.
El perfeccionamiento continuo de los profesores reviste una importancia crucial. Permite actualizar contenidos y competencias, compensar deficiencias de su período de formación, y además permite una conexión muy importante para el profesor en su proceso de compromiso continuo de enseñanza-aprendizaje. Demos las herramientas y confiemos en nuestros profesores. Los docentes de nuestro país esperan demostrar de lo que son capaces.
Publicado en el diario La Segunda el 7 de octubre de 2013.
Formación docente de los profesores universitarios
La misión de las universidades es la formación de los jóvenes, tanto en los aspectos disciplinarios como en los que permiten un crecimiento integral de los estudiantes para poder aportar al bien común en un mundo global izado.
Junto con este aspecto, la creación de nuevo conocimiento, a través de la investigación, con una genuina y persistente búsqueda de la verdad, del bien y de la belleza, son los dos pilares que le dan sustento a una institución universitaria. Todo lo descrito debe tener un solo norte: servir mejor a nuestro país y a la sociedad. Como se puede apreciar, el compromiso es grande. Es nada menos que con el desarrollo y destino de Chile.
Los estudiantes son el grupo central del diario esfuerzo formativo que se realiza al interior de las universidades. En este énfasis por el desarrollo de una mayor calidad de la docencia universitaria, la formación de los docentes es de la mayor importancia. Son los profesores los que forman, enseñan y se relacionan de manera cercana con nuestros