La administración en el deporte. Othón Díaz Valenzuela. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Othón Díaz Valenzuela
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Зарубежная деловая литература
Год издания: 0
isbn: 9788499106281
Скачать книгу
Código de Arbitraje del Deporte

      Entró en vigor el 22 de noviembre de 1994 y fue revisado en 2003 para incorporar ciertos principios establecidos con anterioridad por el TAS, esto es, jurisprudencia o prácticas frecuentes por parte de los árbitros y la oficina de la Corte.

      El 1 de enero del 2010 entró en vigor la última versión del Código de Arbitraje del Deporte, que se divide en dos partes: la primera parte incluye los artículos S1 al S26 y contienen los estatutos que establecen la forma en que se organizan y funcionan tanto el TAS como el ICAS; la segunda incluye los artículos R27 a R70 y se refieren a las normas de procedimientos para realizar sus funciones.

      Así, el Código establece reglas para cuatro procedimientos distintos:

      • Procedimiento de arbitraje ordinario.

      • Procedimiento de apelación del arbitraje.

      • Procedimiento consultivo, que no es discutible y permite que ciertos organismos deportivos soliciten opiniones del TAS.

      • Procedimiento de mediación.

       El Consejo Internacional de Arbitraje Deportivo (ICAS)

      El ICAS es el órgano supremo del TAS. Se ocupa de la administración y financiación para salvaguardar la independencia económica y de todo tipo de este tribunal, con lo cual se garantiza su imparcialidad.

      El ICAS se compone de 20 miembros, que deben ser juristas de alto nivel con experiencia en la ley de arbitraje y en todo lo referente al derecho del deporte. Tras su nombramiento, deben firmar una declaración comprometiéndose a ejercer su función a título personal, con total objetividad e independencia. En ningún caso un miembro puede desempeñar un papel en los procedimientos ante el TAS, ya sea como árbitro o asesor independiente.

      El ICAS ejerce varias funciones que se enumeran en el artículo S6 del Código de Arbitraje del Deporte.

      El ICAS opera mediante una junta directiva integrada por el presidente del ICAS y dos vicepresidentes, además de los dos presidentes de las divisiones del TAS.

      El ICAS elige a su propio presidente, quien también es el presidente del TAS, además de sus dos vicepresidentes, el presidente de la División de Arbitraje Ordinaria, el presidente de la División de Arbitraje de Apelaciones y los diputados de estas divisiones. También nombra a los árbitros del TAS y aprueba el presupuesto y las cuentas del TAS.

       El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)

      El TAS cuenta con dos divisiones: una División de Arbitraje Ordinario, para disputas, única instancia presentada ante el TAS; y una División de Arbitraje de Apelaciones, para las disputas derivadas de decisiones de instancia adoptadas por las organizaciones deportivas.

      El TAS desempeña sus funciones por medio de árbitros, de los cuales hay al menos 275 que son nombrados por el ICAS por un período renovable de cuatro años. El código establece que el ICAS debe recurrir a “personalidades con una formación jurídica y que posean una competencia reconocida en lo que respecta al deporte”. El nombramiento de árbitros sigue más o menos el mismo patrón que para los miembros del ICAS. Los árbitros del TAS son nombrados a propuesta del COI, de las FI y de los CON.

      El ICAS también designa a los árbitros “con el fin de salvaguardar los intereses de los atletas” (artículo S14 del código), así como los árbitros elegidos entre personalidades independientes de las organizaciones deportivas. Aun cuando los árbitros del Tribunal de Arbitraje Deportivo son propuestos por las organizaciones deportivas, el hecho es que deben llevar a cabo sus funciones con total objetividad e independencia. Cuando son nombrados, tienen que firmar una declaración en este sentido.

      Los paneles del TAS están compuestos ya sea de un solo árbitro o de tres. Todos los árbitros están obligados por el deber de confidencialidad y no podrán revelar información relacionada con las partes, el conflicto ni las propias actuaciones.

       Las oficinas descentralizadas del TAS

      En 1996, el ICAS creó dos oficinas descentralizadas permanentes, la primera en Sídney (Australia) y la segunda en Denver (Estados Unidos). En diciembre de 1999, la oficina de Denver fue trasladada a Nueva York. Estas oficinas están asociadas a la secretaría judicial del TAS en Lausana, y son competentes para recibir y notificar todos los actos procesales.

       EL SISTEMA MEXICANO DE CULTURA FÍSICA Y DEPORTE

       Introducción

      A finales del siglo xix, México comenzó a insertarse en el mundo deportivo con la llegada de un importante número de transnacionales, principalmente en la industria minera. Los dueños trajeron consigo a personas de países como Inglaterra, Irlanda y Alemania, entre otros, y esa inmigración influyó de manera trascendental en el deporte de nuestro país.

      Ciertamente, los técnicos aportaron las formas más modernas de explotación en las minas y otras industrias; sin embargo, también aportaron su afición por el fútbol, tanto en Pachuca como en Orizaba. Asimismo impulsaron la práctica del tenis, el ciclismo, la esgrima, el tiro y el remo, entre otras, que en aquellos años acaparaban la atención en Europa.

      De igual forma, la afición por el bate y la pelota comenzó cuando los marineros estadounidenses del barco Montana, que llegó al puerto de Guaymas, bajaron a tierra y jugaron entre sí un partido de béisbol.

      También por mar llegó la práctica del boxeo, principalmente a los puertos de Tampico y Veracruz, para extenderse con rapidez por todo el país. Al principio fue acogido por la alta sociedad, que lo practicó más como acondicionamiento físico que como deporte.

      En esos últimos años del siglo xix, en diversas partes del territorio nacional se ofrecieron exhibiciones de gimnasia sueca, en tanto que alpinistas europeos iniciaron la práctica del montañismo en las cumbres mexicanas.

      De España se recibió el gusto por la pelota vasca, que años después se convirtió en el frontón, con la participación de famosos pelotaris de apellidos como Goenage, Irribaren y Gurruceaga.

      En tierras veracruzanas, Raúl Dehesa —que había regresado tras haber cursado el high school en Nueva York—instruyó a un grupo de amigos sobre la forma de jugar el fútbol americano.

      En la famosa Casa de los Azulejos se fundó el exclusivo Jockey Club, mientras que en aquellos años la Alberca Pani fue el sitio predilecto para practicar los deportes acuáticos, actividad exclusiva para las clases adineradas del país.

      Pero el deporte también penetró en las escuelas y en los centros privados; muestra de ello es que en 1867 se instituyeron en la Escuela Nacional Preparatoria las cátedras de gimnasia y esgrima.

      La Asociación Cristiana de Jóvenes, o The Young Men′s Christian Association (YMCA), o simplemente la “Guay”, comenzó en 1892 sus actividades en México, pero no fue hasta 1902 cuando se constituyó formalmente. En el año 1910, el entonces presidente de la república, Porfirio Díaz, inauguró el primer edificio propio de la YMCA, con instalaciones para desarrollar deportes y actividades culturales. También introdujo en México la instrucción formal de la educación física, y fortaleció las competencias deportivas, sobre todo de atletismo y básquetbol.

      En los Juegos Olímpicos de París en 1900 se produjo, de manera casual, la primera participación de deportistas mexicanos, al competir en el campo de polo de Bagatelle, en el bosque de Boulogne, los hermanos Manuel, Pablo y Eustaquio Escandón y Barrón, quienes vivían en Francia debido a los inminentes problemas en México con el presidente Porfirio Díaz.

      En París, con el apoyo del estadounidense William Wright, los hermanos Escandón lograron el tercer sitio sin que en México se les diera un reconocimiento especial, debido a que no se reconocía al polo como deporte oficial. Sin embargo, hace unos años, la prueba fue reconocida por el Comité Olímpico Internacional y concedió la presea de bronce para nuestro país. Aunque cabe señalar que en aquellos años no se les otorgó una medalla, sino