Siempre nos quedará Beirut. Laila Hotait Salas. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Laila Hotait Salas
Издательство: Bookwire
Серия: Cine
Жанр произведения: Документальная литература
Год издания: 0
isbn: 9788446050278
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con la ocupación de varias granjas del pueblo de Chebaa durante la guerra del 67, a pesar de que el Líbano, como nación, fue neutral. Con el desencadenamiento de la guerra civil, las injerencias israelíes aumentaron, apoyando militarmente a la extrema derecha cristiano-maronita, viendo en ello la oportunidad de incidir en la desmembración del Líbano y cumplir su objetivo de anexionarse el Sur. De hecho, en 1978 Israel ocupó 700 kilómetros con el pretexto de crear una zona tapón que preservase al norte israelí de los ataques de la guerrilla palestina. Incluso gran parte del conflicto fue gestionado por una franquicia militar libanesa de Israel, el denominado Ejército del Sur del Líbano dirigido por Saad Hadad.

      Aun así, viendo los planes que abocaban el país a una guerra, llevó a cabo una huelga de hambre de cinco días en la mezquita beirutí Al-Amaliya en contra de la guerra y la división nacional. Más tarde, ya comenzado el conflicto, en 1976 llevó a cabo una gira por diferentes gobiernos árabes en busca de solidaridad frente a las agresiones israelíes. Sus visitas a líderes internacionales continuaron hasta que en 1978 nunca volvió de la Libia de Muammar Al-Ghadaffi, donde desapareció para siempre sin que se haya sabido nunca cuál fue su destino. En fin, podríamos decir que Sadr fue en sí mismo un fenómeno de cambio total desde dos perspectivas. Primero, supuso un importante punto de inflexión la aparición de un líder para una comunidad antes infrarrepresentada como la shií. Así, también significó un giro hacia la religiosidad de una parte importante de la población shií, algo que no era excepcional en la dinámica que vivía todo el país. Este despertar shií en el Líbano tuvo una particular relevancia no sólo en el país sino en toda la región árabe, ya que los shiíes habían sido históricamente vistos como una amenaza para la hegemonía política de los sunníes desde que la comunidad musulmana se escindió en esas dos grandes ramas, consecuencia de la discrepancia y enfrentamiento por la sucesión del califato en el siglo vii.

      Últimos pasos hacia la guerra