SOLUCIÓN
Tras consultar varios proveedores y elegir la opción más favorable para el alojamiento, se adquieren los siguientes elementos de mobiliario y equipos:
Habitación de matrimonio: un somier de 1,35 m, un colchón de 1,35 m, una almohada, un cabecero de madera color nogal, dos mesitas de noche color nogal, una mesa de escritorio nogal, una silla nogal, una televisión, dos apliques para las mesitas, una lámpara de techo, una lámpara para escritorio y un armario de dos puertas color nogal.
Habitación doble: dos somieres de 90 cm, dos colchones de 90 cm, dos almohadas, una mesita de noche (para colocar entre las dos camas) y dos cabeceros color nogal, una mesa de escritorio, una silla, una televisión, una lámpara de techo, un aplique para la mesita, una lámpara para el escritorio y un armario de dos puertas color nogal.
Baño: bañera, W. C., lavabo, armario tocador, luz de techo, espejo sobre el lavabo con dos focos, banqueta, papelera y accesorios de baño.
Salón-cocina: en la zona de la cocina, se dispondrán una hornilla con dos fuegos, un horno, un microondas, un fregadero, un frigorífico, muebles y cajones para utensilios y menaje de cocina y una lámpara de techo. En la zona del salón, dos bancos delante de la barra americana, una mesa de comedor, cuatro sillas, un sofá de tres plazas y otro de dos plazas, una mesa de centro y un mueble de salón con televisión. Además, se necesitará una lámpara de techo que proporcione iluminación suficiente.
Actividades
3. Detalle la relación de mobiliario y equipo necesario para un pequeño hotel rural que consta de seis habitaciones dobles con sus correspondientes cuartos de baño, una suite con salón y dos habitaciones (una con cama de matrimonio y otra con dos camas), una zona de recepción con hall y un salón de eventos con capacidad para reuniones de hasta veinte personas (en adelante, 20 pax).
4. Detalle la dotación necesaria si el hotel dispusiese de una pequeña cocina y de un salón restaurante para los clientes. Calcule la capacidad máxima del hotel para valorar la necesidad de mobiliario.
3.2. Compra y aprovisionamiento de productos necesarios para la oferta de alojamiento
Existen numerosos productos necesarios para el servicio de alojamiento, entre ellos, van a enumerarse los más importantes.
Los productos o elementos no mobiliarios en la oferta de alojamiento son:
1 Lencería de cama: sábanas, colchas y edredones.
2 Lencería de baño: toallas de distintos tamaños.
3 Productos de amenities: gel, champú, jabones, gorro de ducha, peine, etcétera.
4 Productos higiénicos y de limpieza: papel higiénico, lejía, limpiador de baños, limpiador de suelos, limpiacristales, limpiador de superficies en general, bayetas, estropajos, fregonas, cepillos, recogedores, cubos, etcétera.
5 Alfombras y cortinas: se trata de elementos de decoración, sin embargo, debido a su importancia, debe prestarse atención a la hora de elegirlos. Los colores y estampados no deben desentonar con las características rurales del alojamiento y asimismo conviene que estén conjuntados en alguna medida con las colchas o edredones de las camas.
6 Elementos decorativos: jarrones, cuadros, ceniceros, útiles de escritorio, etcétera.
Ejemplo de amenities de alojamiento rural con productos naturales
Nota
Para el desarrollo del servicio de alojamiento, pueden ser necesarios infinidad de productos o elementos de distintas formas, colores o tamaños. Todo dependerá del tipo de alojamiento, del lugar donde esté ubicado y del gusto, filosofía de empresa o estilo que quiera darse a la habitación.
La cantidad de productos a comprar será estimada en función de la ocupación, de la capacidad del alojamiento rural y del espacio disponible para el almacenaje.
Como regla general, se comprarán tres juegos de sábanas por cama hasta la capacidad total del establecimiento y tres juegos de toallas por persona según la capacidad del establecimiento (uno puesto, otro en lavandería y otro en almacén) y dos o tres servicios de cubertería por persona.
3.3. Compra y aprovisionamiento de productos necesarios para la oferta gastronómica
Los productos para la oferta gastronómica serán aquellos alimentos y materias primas necesarias para la preparación de elaboraciones culinarias recogidas en la carta o el menú del alojamiento rural.
Los alimentos pueden dividirse en dos grupos:
1 Alimentos perecederos: a este grupo, pertenecen los alimentos frescos: carnes, pescados, aves, frutas, verduras y productos de cuarta gama o cocina 45 (alimentos frescos, limpios, troceados y listos para consumir o cocinar).
2 Alimentos no perecederos: bebidas, conservas, semiconservas (requieren frío), productos congelados, etcétera.
Por otra parte, habrá que tener en cuenta otro tipo de productos a la hora de dotar la cocina, aquellos que son necesarios para las elaboraciones culinarias, pero no son alimentos.
Estos productos son:
1 Vajillas: platos hondos, llanos, de postre, de presentación, bajoplatos, salseras, tazones, etcétera.
2 Cubertería: tenedores, cucharas, cuchillos, cazos, espumaderas, pinzas, etcétera.
3 Cristalería: copas y vasos de distintos tamaños según la bebida a servir.
4 Batería de cocina: ollas, sartenes, rustideras, planchas, etcétera.
5 Productos de limpieza: productos lavavajillas, quitagrasas, limpiasuelos antigrasa, desinfectantes, papel de cocina, bayetas, paños de cocina y estropajos, etcétera.
También toma parte en el servicio de restauración la dotación de lencería de comedor: mantelería, cubremanteles, servilletas y litos. Si se dispone de una zona de bar, tendría que dotarse de mobiliario (mostrador y estanterías), fregaderos, máquina de café, cámaras frigoríficas, microondas, tostador, cubiertos, cristalería y vajilla necesaria.
Sabía que...
En el subsector de la restauración, se utilizan varios cientos de productos, sin embargo, en un establecimiento hotelero, pueden encontrarse varios miles de productos tanto perecederos como no perecederos.
La propuesta de compras se hará por la cantidad estrictamente necesaria y según la capacidad de compra. La capacidad de compra se determina teniendo en cuenta los stocks mínimos y máximos (que serán tratados en el capítulo 3), el tamaño del almacén y la capacidad de las cámaras frigoríficas, la fecha de caducidad de los productos y la capacidad financiera del alojamiento rural.
Podrán elegirse uno o varios proveedores de cada producto y, dentro de la gama del producto, tendrá que elegirse cuántos tipos del producto van a tenerse en el establecimiento, ya que, por ejemplo, no podrían tenerse todos los tipos de arroz del mercado.
Para el aprovisionamiento de materias primas necesarias para las elaboraciones culinarias, tiene que hacerse una estimación