115 «Los protagonistas [de Mayo del 68] tenían por objetivo la esfera pública, [pero] privatizaron la existencia; criticaban el deseo de consumo, [pero] han desarrollado y consolidado el proceso de consumo, etc. En definitiva, han hecho historia, pero no la que ellos pensaban» (L. Ferry, A. Renaut, La pensée 68, cit., p. 100).
116 GILLES LIPOVETSKY (1987). Op. cit., pp. 6-7.
117 «El individualismo sufre un aggiornamento que llamamos aquí […] narcisista: el narcisismo, consecuencia y manifestación miniaturizada del proceso de personalización, símbolo del paso del individualismo “limitado” al individualismo “total”, símbolo de la segunda revolución individualista». (G. Lipovetsky (1987). La era del vacío. Op. cit., p. 12).
118 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 8.
119 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 51.
120 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 9.
121 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 42.
122 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 51.
123 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 36.
124 G. LIPOVETSKY. Op. cit., p. 38.
125 «Occidente se está muriendo. Sus naciones han dejado de reproducirse; sus poblaciones han dejado de crecer, y empiezan a reducirse. Desde la Peste Negra del siglo XIV, que se llevó a un tercio de la población, no se enfrentaba la supervivencia de Occidente a una amenaza de este calibre. Hoy, en 17 países europeos, hay más entierros que nacimientos, más ataúdes que cunas. [...] "Si tuviera un niño", dijo Jane, una alta ejecutiva, "no podría hacer la mitad de las cosas a las que estoy acostumbrada. Cada sábado, a las 10.30 de la mñaana, todavía en la cama, mi marido y yo nos miramos y decimos: gracias a Dios que no tenemos un mocoso que nos estaría incordiando desde las 5". […] La cultura popular, en su jerarquía de valores, pone las alegrías del sexo muy por encima de las de la maternidad. Las revistas femeninas [tipo "Cosmopolitan"], las series de TV, las novelas románticas, etc. celebran todas ellas a la mujer profesionalmente brillante, sexualmente liberada y soltera. [...] ¿Cuántas series o reality shows de la TV celebran la maternidad? [...] "El matrimonio", escribe Andrea Dworkin, "es una institución que se desarrolló a partir de la práctica de la violación" [o sea, es violación institucionalizada]. [...] La conclusión lógica que se sigue es que "la familia nuclear debe ser destruida", como dijo la feminista Linda Gordon. [...] "El matrimonio ha existido para beneficio de los hombres: ha sido un método legalmente sancionado de control sobre las mujeres. [...] El fin de la institución del matrimonio es una condición necesaria para la liberación de las mujeres", escribieron en 1973 Nancy Lehmann y Helen Sullinger [...]. "El colapso del matrimonio y de la fecundidad marital, dice el demógrafo belga Ron Lesthaeghe, se debe a un desplazamiento del sistema ideacional occidental desde los valores afirmados por el cristianismo —sacrificio, altruismo, sacralidad de los compromisos— hacia un individualismo secularizado centrado en el yo"». (PAT BUCHANAN (2002). Op. cit., pp. 8-9, 25-37, 42-48).
126 G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 56.
127 Ya en 1983 constataba esto Lipovetsky (el síndrome no ha hecho sino agudizarse en la era de Internet): «La falta de atención de los alumnos, de la que todos los profesores se quejan hoy, no es más que una de las formas de esa nueva conciencia cool y desenvuelta, muy parecida a la conciencia telespectadora, captada por todo y nada, excitada e indiferente a la vez, sobresaturada de informaciones, conciencia opcional, diseminada, en las antípodas de la conciencia voluntaria, “intra-determinada”» (G. LIPOVETSKY (1987). Op. cit., p. 57).
128 JACQUES BAYNAC et al. (1998). Op. cit., p. 94.
129 L. FERRY; A. RENAUT. Op. cit., p. 122.
130 «[El liberalismo cree] que cada votante, cliente y espectador debería usar su libre albedrío para crear sentido, no solo para su vida, sino para todo el universo. [Pero] Las ciencias de la vida socavan el liberalismo y aducen que el individuo libre es solo un cuento ficticio pergeñado por una asamblea de algoritmos bioquímicos. En cada momento, los mecanismos bioquímicos del cerebro dan lugar a un destello de experiencia, que desaparece de inmediato. Después aparecen y desaparecen más destellos, en rápida sucesión. Estas experiencias momentáneas no suman para dar una esencia duradera. […] Los humanos somos maestros de la disonancia cognitiva, y nos permitimos creer algo en el laboratorio y algo totalmente diferente en el tribunal o el Parlamento». (YUVAL NOAH HARARI (2017). Homo Deus: Breve historia del mañana. Debate, Madrid, pp. 216-217).
131 «El “yo” se ha convertido en el shiboleth definitorio de las aspiraciones espirituales más altas de la modernidad precisamente en el punto de la historia en que la mayoría de los filósofos y psicólogos niegan su misma existencia. Valoramos la autorrealización, el autodescubrimiento, la auto-expresión, la autenticidad (es decir, el actuar en consonancia con el “yo verdadero”) y la autonomía (actuar por razones internas, y no como resultado de influencias externas) precisamente cuando el concepto mismo de “yo interno” está fuertemente cuestionado». (JOHN LAWRENCE HILL (2016). After the Natural Law: How the Classical Worldview Supports Our Modern Moral and Political Values. Ignatius Press, San Francisco, p. 145).
FROM SEXUAL TO GLOBAL REVOLUTION
Gabriele Kuby
In times of revolutionary change it is interesting to know which span of history a person has lived through. The life experience of people who have memories of the time before 1968 and those who have been born after 1968 are completely different. I was born in the last year of the war in 1944. The first touching of hands with a species of the other sex still aroused accelerated