Trastorno en | Simpático | Parasimpàtico |
Primer centro | Un trastorno en el hipotálamo desencadena tanto disregulaciones simpáticas como parasimpáticas. Todo el sistema orgánico se puede ver afectado. Es posible que el paciente pase varias veces al día de una posición simpática a una parasimpàtica | |
Segundo centro | El trastorno se sitúa a nivel de la región de occipucio-atlas-axis (OAA) o del sacro. El tono parasimpàtico está reducido en relación con el aumento del simpático | El trastorno se sitúa en los segmentos C8-L2. Aumento del tono simpático y reducción relativa del parasimpático |
Tercer centro | El trastorno se sitúa en el propio órgano. La consecuencia es una reducción del tono parasimpàtico | El trastorno se sitúa en el tronco simpático. La consecuencia es una reducción del simpático (p. ej.. en el síndrome de Horner) |
4 Mecanismos patológicos
Mecanismos de protección arterial y venosa
El tejido nervioso es uno de los tejidos mejor perfundidos en el organismo humano. Pese a solo suponer un 2 % de la masa corporal, el sistema nervioso precisa un 20 % del oxígeno disponible en la sangre [26]. Además, el sistema nervioso reacciona a la falta de oxígeno con mucha mayor sensibilidad que otros tejidos corporales. Para poder garantizar un suministro continuo, el organismo dispone de algunos mecanismos de protección.
Conexiones vasculares arteriales
Existen tanto vasos extraneurales, que suelen denominarse como el propio nervio (p. ej., nervio femoral y vena femoral), como vasos intraneurales que transcurren paralelamente al nervio (
Las conexiones entre los vasos se denominan barras en T, o elementos de transición, y se caracterizan por presentar un recorrido ondulado (también reciben el nombre de espirales, o cola de cerdo). Las barras en T permiten la desviación rápida de la sangre, en caso de que una rama esté obstruida (
• La tracción en el nervio provoca un estrechamiento de los vasos extraneurales e intraneurales, así como un ensanchamiento de los vasos de conexión.
• La presión en el nervio provoca un ensanchamiento de los vasos extraneurales e intraneurales, así como un estrechamiento de los vasos de suministro.
Esta forma de conexión permite un alargamiento y un deslizamiento del nervio sin que se produzca directamente un empeoramiento del riego sanguíneo. Sin embargo, la capacidad de alargamiento es limitada. Según Van der Berg [26], en caso de un alargamiento de un 8 % del nervio, el riego sanguíneo empeora; si asciende a un 15 %, se interrumpe.
• Apunte osteopático
A menudo, las adherencias de un nervio provocan que, en las cargas de la vida cotidiana, se alargue el nervio, con lo que se desencadena una isquemia. Para la autocuración, es imprescindible resolver las adherencias.
Mecanismo valvular venoso
Los capilares de los vasos de suministro penetran en el perineuro (véase el apartado «Vainas de tejido conectivo de los nervios periféricos» en el