Mediciones y métodos de uso común en el laboratorio de Química. Yo-ying Chen. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Yo-ying Chen
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Математика
Год издания: 0
isbn: 9789561425590
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la cantidad de material tóxico que produce la muerte en un 50% de los animales utilizados en la prueba. Este término normalmente incluye el peso corporal del animal. Por ejemplo, la toxicidad DL50 del elemento mercurio (Hg), se expresa como 50 mg/kg. La concentración letal (CL) de una toxina es similar a la DL, pero se refiere a las concentraciones de esta en el aire. Se define como cualquier sustancia altamente tóxica si la DL50 es de 50 mg/kg o menos, cuando se administra en forma oral, o cuando la CL50 es de 200 ppm (partes por millón) o menos, cuando se administra en forma de gas.

      Reglas para disminuir la exposición a sustancias tóxicas

      Es posible disminuir la exposición a las sustancias tóxicas en el laboratorio, siguiendo algunos lineamientos generales:

      a.Antes de iniciar el trabajo de laboratorio, se debe conocer las propiedades químicas y tóxicas de todos los materiales involucrados.

      b.Cuando sea posible, sustituir las sustancias tóxicas por sustancias no tóxicas.

      c.Usar campana de extracción y probar periódicamente su eficiencia.

      d.Emplear siempre equipo de protección personal (delantal, guantes, mascarillas, gafas de seguridad, etcétera).

      e.Evitar la exposición excesiva a los reactivos químicos.

      f.No ingerir bebidas alcohólicas en el trabajo por razones obvias; además, el etanol tiene efecto sinérgico con algunos disolventes.

      g.Monitorear rutinariamente la atmósfera del laboratorio, para determinar contaminantes específicos y sus concentraciones.

      Desecho de las sustancias químicas

      Antes de desechar alguna sustancia por el drenaje, habrá que investigar hacia dónde se dirigen los desechos, ya que el drenaje usualmente está interconectado y se pueden producir reacciones sinérgicas que resulten peligrosas.

      En general, los desechos sólidos son menos voluminosos y más fáciles de ser eliminados que los desechos líquidos, y para ello deben ser identificados y separados en forma adecuada.

      Los disolventes orgánicos que se pueden desechar en contenedores de vidrio o de metal, son aquellos no corrosivos o reactivos y que no contengan sólidos. Además, estos deben separarse e identificarse según el tipo de compuesto del que se trata (disolventes clorados, hidrocarburos, etcétera), colocándolos en los contenedores correspondientes para tal fin.

      Evitar desechar las sustancias indiscriminadamente. Considerar siempre la posibilidad de que puedan ocurrir reacciones espontáneas, explosiones o reacciones que conduzcan a incendios. Marcar los recipientes indicando las características de su contenido.

      Si se desconoce y/o se tiene duda respecto de este punto, se debe consultar al profesor o supervisor.

      ¿Cómo disponer de los desechos químicos?

      Antes de desechar las sustancias, se debe consultar la bibliografía correspondiente y al profesor, para determinar la correcta manera de hacerlo.

      a.Disoluciones ácidas o básicas: se deben desechar por el desagüe, mientras se mantiene abierta la llave del agua para que estos se diluyan. Cuando se haya terminado de desechar todo el material, volver a enjuagar con grandes cantidades de agua, para eliminar los efectos corrosivos. Es conveniente diluir hasta que el pH se encuentre entre 3 y 11.

      b.Desechos orgánicos: estos son compuestos no solubles en agua, por lo que deberán guardarse en un recipiente especial. Hay que separar los disolventes que sean volátiles en recipientes especiales no inflamables y almacenarlos a bajas temperaturas. Además, es importante separar los derivados halogenados de los que no lo son.

      c.Desechos de sodio y potasio: estos se deben eliminar adicionándoles lentamente etanol absoluto.

      ¿Qué hacer cuando se derrama algún reactivo químico?

      El peligro ocasionado por un derrame se puede minimizar, si se conoce la manera de limpiarlo, evitando así condiciones que conduzcan a incendios, accidentes, etcétera.

      1.Sólidos y sustancias secas: estas sustancias se pueden limpiar recogiéndolas en un papel. Posteriormente, se depositan en un recipiente adecuado para el tipo de desechos de que se trate.

      2.Disoluciones ácidas: estas disoluciones se deben diluir con agua y desecharse en el sistema de drenaje, como se especificó anteriormente. También se puede usar bicarbonato de sodio (NaHCO3), ya sea sólido o en disolución, para neutralizar cualquier residuo ácido y luego enjuagar con suficiente agua.

      Precaución: cuando el agua entra en contacto con ácido sulfúrico (H2SO4) se genera calor excesivo (reacción exotérmica) y salpicaduras de ácido. Agregar con cuidado una pequeña cantidad de agua para diluir el ácido (recordar que al preparar disoluciones se debe realizar el agregado del ácido sobre el agua lentamente y por las paredes del recipiente), para disminuir la generación de calor y posteriores salpicaduras.

      3.Disoluciones alcalinas: estas deben ser enjuagadas con agua y eliminadas en el drenaje. Se puede usar un trapo y una cubeta para limpiarlas, siempre y cuando se eviten las salpicaduras. Enjuagar el trapo y la cubeta, remplazando frecuentemente el agua.

      Las disoluciones alcalinas provocan que el suelo quede resbaloso; por lo tanto, se debe esparcir arena limpia sobre la salpicadura, antes de limpiarlo.

      4.Disolventes volátiles: cuando se derraman disolventes volátiles, estos se evaporan rápidamente, debido a una mayor superficie de contacto. Este tipo de derrames puede crear un incendio, si el disolvente es inflamable y, al mismo tiempo, puede causar una concentración alta de vapores o gases peligrosos en el laboratorio. Estos vapores pueden tener serios efectos fisiológicos cuando se inhalan. También se pueden formar mezclas explosivas con el aire, por lo que se deben limpiar de la siguiente manera:

      a.Si las cantidades derramadas son pequeñas, limpiar el líquido con papel absorbente y desecharlo en el contenedor correspondiente.

      b.Si las cantidades derramadas son grandes, usar un trapo y un balde.

      5.Sustancias aceitosas: estas sustancias se pueden trapear para remover el exceso de líquidos y la sustancia así recogida se deberá depositar en el contenedor correspondiente. Seleccionar un disolvente volátil no inflamable para retirar la sustancia; colocar un poco de este en un papel absorbente y limpiar donde se derramó la sustancia. Repetir esta operación hasta que el área se vea limpia. No obstante, el piso puede quedar resbaloso, por lo que se debe limpiar con un detergente común.

      6.Mercurio: Las gotas de mercurio son una de las fuentes más comunes de vapor de mercurio en el laboratorio. Cuando se derrama mercurio, se puede distribuir en un área grande y las gotas pequeñas pueden quedar atrapadas en las ranuras del piso. Después de limpiar, se debe ventilar el lugar. El procedimiento de limpieza es:

      a.Empujar las gotas, con el fin de unirlas en una gota grande.

      b.Si existen algunas ranuras en el piso donde puedan quedar atrapadas gotas de mercurio y no puedan ser recogidas, sellar las grietas con cera para piso o con aerosol para el cabello, reduciendo de esta manera la evaporación.

      c.Una vez que todo el mercurio se encuentra confinado en una gota grande, se coloca azufre en polvo para fijarlo, se recoge con una espátula y se coloca en un frasco de vidrio, para contenerlo hasta su disposición final.

      Precaución: Las superficies que aparentemente están libres de mercurio, pueden contener gotas microscópicas; la vibración favorece la formación de microgotas. Fumar en áreas contaminadas con Hg puede ser muy dañino, debido a que la adhesión del mercurio al tabaco favorece su inhalación, por lo que conviene ventilar el área y abstenerse de fumar.

      La etiqueta

      Es la fuente de información básica y obligatoria que identifica el producto y los riesgos asociados a su manipulación.

      Nunca utilizar los reactivos químicos que se encuentren almacenados en recipientes que no tengan etiqueta. De igual manera,