32 Es pertinente señalar que Majone 5([1989]1997) se distancia explícitamente del anarquismo metodológico, considerando que es necesario encontrar para el análisis (calificado por él más como un arte que como una ciencia) un camino, un “plan seguro entre el extremo de la certeza absoluta y el del anarquismo metodológico” (p. 80).
33 Latour (2005, pp. 81y ss. y 146-151) muestra también como la retórica, entendida como el estudio de la manera como se persuade a la gente de creer algo o de comportarse de una cierta manera, es la forma habitual de los debates, y que estos favorecen, a través de una retórica científica, el desarrollo de la ciencia.
34 Existe toda una corriente de investigación en política pública que se interesa particularmente en las prácticas y consecuencias de la globalización en las políticas públicas, en particular el import-export, la transferencia de políticas, la política internacional, que no hemos tratado en este libro, al igual que el análisis comparado de las políticas públicas.
35 Al respeto, nos parecen interesantes las reflexiones de Roiz (2008) sobre el curso particular del establecimiento del Estado occidental moderno a partir del siglo xin, concebido como un resultado de la constitución de una sociedad “vigilante”, que se caracteriza por considerar la vida como una guerra incesante y que termina identificando la política con la guerra. Su propuesta alternativa consiste en construir una nueva ciudadanía basada en la recuperación de la antigua tradición retórica mediterránea de Marco Fabio Quintiliano y Giambattista Vico.
VICTORIA ALEXANDRA CALDERÓN ROMANOV1
LA PERSPECTIVA DE HAROLD D. LASSWELL (1902-1978) PARA EL ANÁLISIS DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS (APP)
Introducción
Este capítulo presenta a Harold D. Lasswell, uno de los más importantes teóricos de la ciencia política, sus conceptos, métodos de análisis más importantes y sus principales aportes para la fundamentación epistemológica y metodológica del análisis de políticas públicas (APP).
El modelo de Harold D. Lasswell es determinante para el APP, porque establece que es posible comprender y estudiar las decisiones del gobierno a través del análisis de sus funciones o prácticas, así como se hace con cualquier otro proceso social. Este modelo, a pesar de numerosas críticas, aún continua vigente, tras su difusión y ampliación por parte de Charles O. Jones, a partir de 1970, como el policy process model.
Los procesos políticos de decisión, según Lasswell, pueden ser estudiados como una serie de acciones individuales o colectivas encaminadas a influenciar la obtención de determinados valores (influence process) y pueden ser descritos, a su vez, a través de siete prácticas o funciones: información (intelligence), promoción (promotion), formulación (prescription), adopción (invocation), implementación (application), finalización (termination) y evaluación (appraisal). El modelo de Lasswell es normativo, ya que establece que los valores son los propósitos de la decisión individual y fundamentan el proceso político de decisión. De acuerdo con esto, los individuos toman decisiones con el objeto de adquirir valores determinados en un marco institucional, mediante el uso de sus propios recursos y a través de estrategias de manipulación (manipulative strategies), de persuasión o coerción.
La función de los modelos normativos no es solo explicar las decisiones políticas, sino también proporcionar recomendaciones a las instituciones gubernamentales para optimizar el logro de alguna utilidad o valor político. Justamente, esta última es la aplicación que proponemos para el modelo de Lasswell, que tendría dos momentos: el análisis de las funciones de la acción gubernamental y la recomendación para la acción gubernamental.
El acierto de este modelo está en su capacidad de contener un gran número de elementos dentro de la categoría de la decisión individual y política; pero entre sus limitaciones está que el marco de valores propuesto es, a la vez, el punto de partida, el origen y la consecuencia de la decisión política. No obstante, la aproximación normativa al análisis de los procesos políticos de decisión proporciona un enfoque dinámico y estructurado para la comprensión y el APP, y, por ello, el modelo de Lasswell se mantiene vigente, hoy en día, como fundamento esencial para el estudio de la ciencia política y para el APP.
Antecedentes de la ciencia política en los Estados Unidos
Para pensar cómo orientar el APP en Colombia, es preciso revisar sus orígenes, que se encuentran en los modelos de investigación de la ciencia política estadounidense, pues, evidentemente, los discursos sobre las políticas públicas en Colombia no son propios, sino que pertenecen al contexto político y económico norteamericano (Jolly y Cuervo, 2007, p. 19). En primer lugar, entonces, es necesario recordar el contexto histórico que motivó la aparición de determinados conceptos y métodos epistemológicos en los Estados Unidos.
La Segunda Guerra Mundial dejó al mundo dividido en dos grandes bloques ideológicos que se disputaban, por así decirlo, el significado y la propiedad de la verdad política. Cada uno pretendía defender la validez de sus instituciones y de sus prácticas políticas, lo que demandaba un esfuerzo conjunto de sus dirigentes, científicos, artistas y de los ciudadanos en general. Esto significó que, tanto en la Unión Soviética como en los Estados Unidos, las instituciones gubernamentales enfocaron sus esfuerzos en defender la validez de sus ideas y valores. En Estados Unidos este contexto convirtió en un imperativo la defensa de los valores americanos liberales, tales como la democracia, la libertad de expresión y la propiedad privada frente a la amenaza del totalitarismo.
La academia no fue ajena a esta situación y los investigadores en el campo de la Ciencia Política se unieron en la defensa de los valores liberales, que, junto a la creciente preocupación por el avance científico de la disciplina, propició la creación de una disciplina muy particular que no pretendía quedar relegada a los muros de las universidades, sino que buscaba colaborar con el gobierno en la construcción de los valores democráticos y en la resistencia a los valores totalitarios del Estado soviético.
Con la llegada, durante los años treinta, de un considerable número de académicos extranjeros, principalmente refugiados alemanes, los métodos de investigación de la sociología y la psicología europeas comienzan a emplearse en el estudio de los procesos políticos norteamericanos, transformando radicalmente la aproximación al estudio de los fenómenos políticos (Dahl, 1961, p. 764). Es así como, en estos años, la Ciencia Política en los Estados Unidos no se constituyó, únicamente, como un proyecto académico o científico, sino que fue influenciada por las necesidades económicas, políticas y militares de este momento específico, lo que conllevó a que se apoyara en dos proyectos: un proyecto científico, que buscaba una mejor comprensión de la conducta y la opinión públicas (el comportamiento político de los grupos de interés, las preferencias de los votantes) y de las instituciones (los procesos de decisión del congreso y de las cortes); y un proyecto político nacional, que pretendía mejorar las condiciones sociales de los ciudadanos, proteger a la nación de las naciones enemigas, hacer crecer la economía y fortalecer la democracia. Estos dos proyectos fueron inseparables (Prewitt, 2005, p. 15).
Con el tiempo, el interés de la Ciencia Política viró hacia temas como las relaciones internacionales o los movimientos sociales, enfocándose principalmente, en la participación de la nación norteamericana en asuntos internacionales (Prewitt, 2005, p. 15). Al constituirse la Ciencia Política en dos proyectos entrecruzados, uno científico y otro político, esta enfocó toda su atención y energía en tratar de comprender y mejorar las prácticas políticas americanas (Prewitt, 2005, p. 15). Los responsables, en gran medida, de este proyecto fueron el profesor Charles E. Merriam (1874-1953), de la Universidad de Chicago, y uno de sus alumnos más brillantes y significativos para la Ciencia Política, Harold D. Lasswell (1902-1978).
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