Si la propuesta ya favorece el trabajo en grupo entre el alumnado, también lo hace entre los maestros. Hace falta que los docentes vivan Reciclajuego como un proyecto común: como un embudo donde cada uno vierte su esfuerzo y aportación, y de donde fluye una sustancia rica, dulce y espesa de-nominada aprendizaje significativo.
Suple el déficit económico de los departamentos de Educación Física
La elaboración de material físico-deportivo a partir de la transformación de material de rechazo reutilizado puede suponer una solución temporal (y por qué no, final) para aquellos centros donde los recursos económicos del departamento de Educación Física no son los que desearían los especialistas.
El coste del material que utilizamos es nulo (al menos en el momento en que nosotros lo utilizamos) y su transformación no tiene que encarecer demasiado el producto.
El número de unidades que se pueden confeccionar de cada nuevo objeto es, en cierto modo, ilimitado: cada niño puede tener uno si la actividad lo requiere.
La durabilidad del material dependerá de sus características, del uso que se le dé y de su conservación. Pero ya veremos en el apartado «Clasificación del material» que su reparación o suplantación también es muy sencilla y ba-rata.
¿Cómo se aplica Reciclajuego?
La aplicación de Reciclajuego en las escuelas se estructura en dos fases: fase modelo y fase creativa.
Fase modelo
Objetivo. El objetivo de esta fase de aplicación es mostrar modelos de objetos construidos con material de desecho al alumnado, para facilitar la puesta en marcha de la segunda fase, metodológicamente más compleja.
Al mismo tiempo, esta fase pretende despertar en el alumnado la inquietud y la creatividad en torno a este tipo de material.
Papel del especialista. La persona especialista de Educación Física debe disponer de materiales ya diseñados y fichas instructivas de construcción ya elaboradas. Con estos objetos debe proponer a los alumnos y alumnas juegos y actividades de vivencia para que éstos puedan comprobar el funcionamiento y cerciorarse del potencial lúdico de estos materiales.
En los apartados «Diseño y transformación de materiales» y «Juegos con material transformado», el especialista dispone de un amplio abanico de recursos para poner en marcha esta fase.
El especialista debe coordinar la temporización y las sesiones, el material que presentará en cada una y el proceso de construcción.
Papel del alumnado. En esta fase los alumnos y alumnas toman el papel de receptores de modelos dados por el especialista. Siguiendo los pasos de las fichas de construcción de los objetos ya diseñados pueden construirlos. El especialista les propondrá actividades para poder jugar con ellos.
Material. La aportación de materiales fáciles de obtener pueden realizarla los alumnos/as trayendo de casa envases, bolsas de plástico, cajas grandes, latas, etc. Aquellos materiales que sean más difíciles de conseguir correrán a cargo del especialista (espuma de colchón, plástico de burbujas, etc.). Aun así, no hay que descartar que los chicos y chicas puedan aportar materiales verdaderamente sorprendentes o que pensáramos que no conseguirían.
Todo el material de construcción que deba utilizarse en la transformación del material de desecho (tijeras, cinta adhesiva, etc.) correrá también a cargo del especialista y del centro escolar.
Temporización. Cada especialista decidirá cómo estructura las sesiones de construcción y vivencia del material y en qué orden presentará cada objeto. Pero hay que tener en cuenta que habrá objetos que se utilizarán en muchas sesiones y que es mejor construirlos en las primeras clases para poder utili-zarlos en las siguientes, como por ejemplo las pelotas o las pelotas-cometa.
Se pueden dedicar a la fase modelo tantas sesiones como se crea conveniente, pero no hay que olvidar que a la hora de programar hay que dejar suficiente tiempo para la puesta en marcha de la segunda fase.
Fase creativa
Objetivo. El objetivo de esta fase es que los alumnos y alumnas tomen el re-levo de la primera fase y empiecen a crear sus propios objetos y juegos.
Papel del especialista. El especialista debe coordinar el trabajo de los grupos de creación formados por los alumnos/as. Debe acompañar, que no dirigir, todo el proceso creativo y debe dinamizar las sesiones.
Puede colaborar con los grupos cuando sea necesario y aconsejar si lo cree conveniente pero sin coartar la creatividad e implicación de los chicos y chicas.
Papel del alumnado. En esta fase los alumnos/as se convierten en los verdaderos protagonistas del proceso. Deben agruparse libremente para diseñar y construir un nuevo material físico-deportivo utilizando material de rechazo. Deben implicarse en el proceso de creación, obtención de materiales y en la concreción de las reglas del juego.
Es en este momento, cuando trabajen en grupo reducido y deban llegar a acuerdos, donde se puede incidir de una manera más directa en el trabajo de los valores y actitudes.
Material. La obtención de los materiales necesarios para la construcción de los nuevos objetos debe correr a cargo de los alumnos pero no hay que descartar la implicación del centro o del especialista si se cree necesario.
En esta fase, todo el material de construcción que se tenga que utilizar en la transformación del material de desecho (tijeras, cinta adhesiva, etc.) también correrá a cargo del especialista y del centro escolar.
Temporización. La estructura en sesiones de esta fase es mucho más compleja que la anterior debido al enfoque interdisciplinario y transversal con el que hay que dotarla. En el apartado «Ejemplos de planteamientos interdisciplinarios», se muestran algunos modelos para esta fase de aplicación. A grandes rasgos, el siguiente esquema puede facilitar la comprensión del modo de aplicación:
No cabe duda de que Reciclajuego puede ponerse en práctica sólo parcialmente, llevando a cabo sólo una de las dos fases, pero el potencial pedagógico de la propuesta quedará reducido a la mitad. De este modo, un especialista puede incorporar en su programación anual sólo la fase modelo, o por el contrario, lanzarse directamente a la fase creativa. Cada especialista debe analizar previamente la situación del grupo y la propia y tomar enton-ces dicha decisión.
Algunas orientaciones metodológicas
A la hora de plantearse la inclusión de Reciclajuego en la programación anual o trimestral del área de Educación Física, es necesario que los maestros y profesores tengan claras algunas premisas de carácter metodológi-co y organizativo, fundamentales para que la propuesta siga adelante y no pierda potencia. He agrupado dichas premisas en torno a cinco grandes bloques:
•Funcionalidad y globalidad de los aprendizajes
•Planteamiento de actividades flexibles, abiertas y activas
•Definición del papel del docente y del alumnado
•Definición previa de objetivos y contenidos
•Secuenciación bien estructurada y estrecha coordinación entre profeso-res
Funcionalidad y globalidad de los aprendizajes
La búsqueda insaciable de funcionalidad en todas las actividades debe ser nuestro gran reto: las actividades que planteemos y que vayan surgiendo tienen que servir para despertar una nueva inquietud en el alumnado y ser el punto de partida de un nuevo reto. Los chicos tienen que