Lado a lado. Edward T. Welch. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Edward T. Welch
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Сделай Сам
Год издания: 0
isbn: 9781629461748
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usa para ayudar a otros.

      Durante el proceso de aprender esto—estar en necesidad y ser necesarios—Jesús estará presente. Él fue débil antes que nosotros lo fuéramos; Él fue dependiente de Su padre y dependiente incluso de simples seres humanos. Él también vino a servir en lugar de ser servido, y Él lo hizo lado a lado. En la medida que seamos capaces, hagamos esto unos con otros.

      Estamos Necesitados

      Tu necesidad te califica para ayudar a otros. Tu necesidad, ofrecida adecuadamente a alguien más, incluso puede ser uno de los grandes dones que des a tu iglesia. Inspirarás a otros a pedir ayuda.

      Recuerda algún momento cuando estabas en un grupo y alguien habló abiertamente de una lucha en la vida diaria. ¿Qué sucedió? En la mayoría de los casos, el grupo de pronto llegó a ser mas como una familia. Otras personas abrieron sus vidas, y las oraciones del grupo se asemejaron mas a los Salmos. Cuando algo como esto sucede, queda descubierto ese mito de que todos tenemos resuelta nuestra vida, y comenzamos a compartir nuestras cargas unos con otros, justo de la manera en que Dios lo desea.

      Pasamos demasiado tiempo ocultando nuestra necesidad. Necesitamos dejar de esconderla. El estar necesitados es nuestra condición básica. No hay vergüenza en ello—simplemente así es. Comprender esto, aceptarlo y practicarlo te hará un mejor ayudador.

      Esta parte del libro comienza con un simple bosquejo de quienes somos. Desde allí, te ayudará a entender, admitir y practicar tu propia necesidad.

      Estamos necesitados

      La vida es difícil

      Nuestros corazones están ocupados

      El encuentro de circunstancias difíciles con corazones ocupados

      El pecado pesa mucho

      Pide ayuda al Señor

      Pide ayuda a los demás

      La vida es difícil

      La vida es demasiado difícil como para manejarla sin ayuda. La vida también es buena, pero es difícil. No hay un solo día en que no nos enfrentemos a circunstancias difíciles.

      El admitir eso no es quejarse. Simplemente es verdad. Jesús dijo, “En el mundo tendréis aflicción” (Juan 16:33) y, si nos detenemos a pensar en esas tribulaciones, nos damos cuenta que son interminables:

      • Nuestra salud

      • Incógnitas financieras y laborales

      • Violencia local

      • Promesas rotas

      • Demasiadas cosas que hacer

      • La salud de nuestra familia

      • Discriminación e injusticia

      • Terrorismo internacional

      • Conflictos con amigos

      • Fallas mecánicas

      ¿Por qué nos tomamos la molesta de identificar tales dificultades? Lo hacemos porque los seres humanos prosperan cuando llevan sus dificultades públicamente a Dios y al menos a una persona más. Cuando observamos los salmos, descubrimos que este es el deseo de Dios para nosotros.

      A ti, oh Jehová, clamaré,

       Y al Señor suplicaré. (Salmo 30:8)

      A través de salmos como este, el Señor esencialmente nos dice, “Ven a mí con tus dificultades. Eso es lo que los hijos hacen con su Padre”. Las cosas difíciles de la vida son importantes para Dios, y si son importantes para Dios, son importantes para nosotros y vamos a trabajar en hacerlas audibles.

      La vida organizada

      ¿Dónde comenzamos? Ya que hay tanto, pudiera ayudar el organizar las circunstancias de nuestras vidas. La Figura 1, mostrada abajo, es una manera de hacer esto. Organiza aquellas circunstancias, buenas y difíciles, en una serie de círculos concéntricos. Imagina una radiografía de nosotros y del mundo a nuestro alrededor. El corazón y el primer círculo (nuestro cuerpo) nos representa; los círculos concéntricos adicionales son las circunstancias que nos rodean. Son el mundo en el que vivimos.

      Figura 1. Una radiografía bíblica de una persona y el mundo que la rodea

      Considera primero algunas circunstancias que moldean nuestras vidas. (Trataremos con el corazón en el siguiente capítulo).

      Nuestro cuerpo

      Nuestro cuerpo es una parte integral de nosotros, pero también es un tipo de circunstancia que nos afecta. Nos bendice con salud, y nos trae dificultades tales como molestias y dolores diarios, falta de sueño, dolores de cabeza y un sinnúmero de diagnósticos médicos. El cuerpo, incluyendo el cerebro, contribuye a trastornos psiquiátricos. Si estas experimentando manía, ciertas características de depresión o déficit de atención—la lista puede ser larga—esto podría significar que te llegarán algunos problemas físicos.

      Nuestras Relaciones

      Las relaciones es en donde encontramos lo mejor y lo peor de la vida. En ellas está el placer de las relaciones crecientes y pacíficas, y aquí es donde se pierde la esperanza y se pierde el amor. Aquí es donde experimentamos soledad, victimización y rechazo. Sea que nos guste o no, necesitamos a las personas, pero ellas pueden hacer la vida difícil.

      Nuestro Trabajo

      El trabajo incluye el empleo que tenemos o nos gustaría tener, la futilidad de alguna tarea y el dinero que ganamos. El dinero, en particular, puede tener una influencia significativa en nuestras vidas. Tanto la pobreza como la riqueza nos dejan vulnerables. La pobreza sugiere que Dios no está con nosotros, así que confiamos en nosotros mismos, y las riquezas sugieren que tenemos lo que necesitamos, así que confiamos en nuestro dinero. El trabajo y el dinero moldean nuestras vidas más de lo que nos damos cuenta.

      Seres Espirituales y el Mundo

      Los seres espirituales están tras bambalinas, pero tienen gran efecto. Los ángeles nos protegen, mientras seres espirituales confabulados con Satanás se oponen a nosotros. Estos seres espirituales tienen el poder de afligirnos físicamente, como lo vemos con Job. Pero sus principales armas son mentiras, medias verdades y tentaciones, tácticas que son mucho más poderosas que cualquier aflicción física.

      El mundo está incluido entre estas influencias. La Escritura utiliza la palabra mundo en dos formas diferentes. Algunas veces mundo quiere decir la creación habitada, en otras palabras, nuestra tierra. Otras veces, y la forma en la que la estoy utilizando aquí, se refiere a Satanás y aquellos quienes están a la par con él y en contra de las formas de Dios. Juntos crean un coro de voces que silenciosa pero poderosamente hablan en contra del carácter de Dios y anuncian que no hay nada malo en el pecado. Puedes escuchar al mundo especialmente en lo que nuestra cultura dice del libertinaje sexual. Esto quiere decir que nosotros somos, en efecto, personas vulnerables que necesitan el poder y protección de Dios (por ej., Efesios 6:10–12).

      El Dios Trino y Su Reino

      El círculo que envuelve todo es Dios mismo. Vivimos, en todas las maneras y en todo momento, delante de Dios—Padre, Hijo y Espíritu—y en Su mundo (Hechos 17:28). Dios está sobre todas las cosas y rodea todas nuestras circunstancias. Él es soberano y está activo, nunca duerme. Dios está en los detalles de la vida diaria; Él está en los amplios trazos de la historia, al ir moviendo todas las cosas hacia un clímax final, y lo necesitamos para poder tener “vida, y para… [tenerla] en abundancia” (Juan 10:10). En ninguna manera es Dios tan solo un observador distante, contemplando silenciosamente nuestros problemas—aun cuando fácilmente pudiéramos pensar tales cosas. En cambio, Él creo todas las cosas, por lo que le pertenecen.

      Pudiéramos agregar más círculos. El trasfondo étnico y religioso es la circunstancia más importante de