Canon | CRW y CR2 |
Casio | BAY |
Fuji | RAF |
Hasselblad | 3FR |
Leica | RWL |
Nikon | NEF y NRW |
Olympus | ORF |
Panasonic - Lumix | RW2 |
Pentax | PTX y PEF |
Phase One | CAP, TIF y IIQ |
Sony | ARW, SRF y SR2 |
Esto supone un problema pues un programa más antiguo que nuestra cámara puede no leer los archivos generados por esta. También podría suceder que algunos formatos Raw antiguos no sean soportados por los reveladores futuros. Para intentar evitar este problema existen movimientos como DNG (promovido por Adobe y seguido por Leica, Hasselblad, Samsung, Pentax…) y OpenRaw que pretenden unificar la forma en que son codificados para que sean universales. Mi opinión es que veo muy complicado que se pierda la compatibilidad en un futuro próximo y que algunos reveladores pueden trabajar mejor, o tener opciones más avanzadas, con el Raw original que con un Raw convertido a DNG.
La imagen en pantalla
Un archivo Raw incrusta en su interior una imagen JPEG de pequeño tamaño editada con los parámetros personalizados que tengamos seleccionados en nuestro equipo y que es, precisamente, la que vemos en la pantalla de la cámara al revisarla. A pesar de ello a un Raw solo le afectan el tiempo de exposición, el diafragma y la sensibilidad. El resto de parámetros se pueden aplicar durante el revelado con igual o mejor calidad que en la toma.
Sin embargo, la tendencia de los fabricantes a “personalizar” sus Raw también incluye una cierta gestión del ruido antes de guardar el archivo en la tarjeta o incluso modificar la geometría de algunos objetivos. Si es el caso, conviene comprobar si la cámara procesa mejor que nuestro programa y activar aquellas opciones que logren un resultado más apropiado.
La percepción del color la podemos representar de diferentes modos en nuestros dispositivos, en función de la forma en que alcanzan a mostrarla y de nuestros intereses.
Modo de color RGB
El color se define mediante las componentes roja, verde y azul, en inglés red, green y blue, de cuyas iniciales deriva su nombre. Lo emplean todos los dispositivos que generan imágenes acumulando o emitiendo luz, como nuestras cámaras, escáneres y monitores.
El efecto de la luz, verde, roja y azul se va sumando en el modo RGB, por eso se denomina método aditivo. Si el monitor está apagado o no recibe ninguna señal obtenemos el negro.
En imágenes de 8 bits cada canal puede tomar un valor entre 0 y 255. Si los tres tienen un valor de 0 obtenemos negro y blanco si es el máximo. Un tono gris medio tendría un valor de 127 para los tres canales. Un azul puro tendría a 0 los valores rojo y verde y de 255 para el azul. Como cada canal tiene 8 bits la imagen será de 24 bits (8x3). De esta forma cada píxel podrá tener 16,7 millones de colores diferentes. Si la imagen es de 48 bits (16 bits por canal) cada canal tendrá 16,7 millones de valores tonales diferentes.
Modo de color CMYK
El modo CMYK se emplea para el trabajo con tintas. A medida que añadimos tintas vamos eliminando el tono del soporte y por eso se llama método sustractivo. Los colores más claros tienen un porcentaje pequeño de tinta, por su lado los más oscuros asumen porcentajes mayores. En las imágenes CMYK, el blanco puro se genera si los cuatro componentes tienen valores del 0 %, en este caso no se añade ninguna tinta y quedaría el tono del papel.
Si los pigmentos fuesen totalmente puros y no tuviesen ninguna impureza, el cian (C), el magenta (M) y el amarillo (Y) se combinarían para dar lugar a un negro profundo. Por desgracia, las tintas contienen trazas de otros tonos y reflejan parte de la luz que reciben, por eso se añade una cuarta tinta, la negra (K) que tiene un comportamiento más perfecto que la mezcla de los tres pigmentos. Además, también tiene un precio inferior y permite abaratar costes. Otra ventaja es que si imprimimos texto en negro no es necesario alinear los cabezales con una enorme precisión para evitar que se vean bordes de distintos colores en cada letra.
El efecto de los pigmentos, cian, magenta y amarillo, se va superponiendo y oscureciendo el resultado, por eso se denomina método sustractivo. Si el papel no recibe tinta mantiene su color, habitualmente blanco. Si los pigmentos fueran puros y baratos, el negro lo conseguiríamos aplicando un 100 % de cada color pero como no es así, se añade tinta negra.
Modo de color Lab
Se compone de tres canales, uno para la luminosidad (L), otro para la dominante verde-roja (a) y el tercero para la dominante azul-amarilla (b). El componente de luminosidad (L) varía entre 0 y 100, mientras que los otros dos canales pueden estar comprendidos entre +127 y –128.
El Modo Lab solo puede interpretarse en un espacio tridimensional. El eje vertical (y) indica lo oscuro o claro del tono, el eje horizontal (X) la dominante amarilla - azul y el eje de profundidad (Z) la verde - roja.
Es un modo de color basado en la percepción humana. Se creó para describir la apariencia del color que experimenta nuestro ojo. Al no limitarse a indicar la cantidad de colorante que es necesario para que nuestro monitor, impresora, cámara… lo muestre, se considera un modelo de color independiente del dispositivo. A fin de cubrir un espectro tonal suficiente, las imágenes Lab deberían editarse siempre con una profundidad mínima de 16 bits por canal.
Modo de escala de grises
Es un modo que no conserva la información de color y se limita a la escala de grises. Si la imagen tiene solo 8 bits de profundidad tendríamos un modo de color compuesto por 256 tonos de gris que irían del 0 al 255.
El histograma es una de las herramientas más importantes para editar una fotografía. Conocerlo en profundidad nos permitirá analizar correctamente a qué dificultades nos enfrentaremos en el revelado y nos dará las claves para solucionarlas. Nos dejará saber si la exposición de la cámara es la adecuada, con independencia de su aspecto en la pantalla de la cámara, si nuestro trabajo de edición ha sido correcto, si existen dominantes de color…
El histograma no es más que un gráfico estadístico, una representación en forma de barras de una variable. En nuestro caso particular, representa los valores tonales de los píxeles que contiene la imagen, siendo cada barra proporcional a la cantidad de píxeles que tienen ese tono concreto.
En el eje horizontal del histograma encontraremos los valores analizados. El valor negro puro se ubica a la izquierda y el blanco puro a la derecha. Entre ambos se representan los valores