Figura 14: Ilustración de la combinación de los dos principios fundamentales de la contracción muscular (modificado de Lieber 2002).
Figura 15: Zona de funcionamiento de la contracción pliométrica.
Bibliografía
Fukunaga T, Kawakami Y, Kubo K, Kanehisa H. “Muscle and tendon interaction during human movements”. Exerc Sport Sci Rev. 2002 jul; 30(3):106-10. Review.
Gordon, A. M., Huxley, A. F. y Julian, F. J. “The variation in isometric tension with sarcomere length in vertebrate muscle fibres”. Journal of Physiology 184:170-192, 1966.
Lieber R. Skeletal Muscle Structure, Function, & Plasticity: The Physiological Basis of Rehabilitation, 2ª Edición. Baltimore, MD: Lippincott Williams & Wilkins, 2002.
Historia del concepto de pliometrÍa
En 1966, Zatsiorki utiliza el trabajo de Margaria de 1960 para justificar el entrenamiento con la utilización del reflejo de estiramiento, e introduce el término “pliométrico” que extrae de sus conocimientos de griego (pliometría deriva del griego “plio”, que significa “más” (grande, largo) y “métrico”, que significa medir (evaluar, comparar) sustancialmente “aumento medible” (vamos a ser prudentes sobre el valor de estas explicaciones).
También en 1966, Verkhoshansky, entrenador y fisiólogo soviético, insistía sobre la importancia de este método. Entrenando a atletas de triple salto descubrió la gran capacidad de sus atletas para efectuar impulsos con un tiempo de contacto corto y con grandes tensiones musculares. Descubrió la importancia de la fase excéntrica del impulso (fase de amortiguación). Los músculos deben ser fuertes en excéntrico para poder aumentar la tensión en la fase de amortiguación. El entrenamiento de los saltadores debe basarse en este parámetro (Verkhoshansky 1966).
Verkhoshansky propone tres etapas en la preparación de los saltadores:
— Una etapa de desarrollo general de la fuerza y de saltos.
— Seguida de una etapa de trabajo en pliometría con aumento de la musculación con cargas a fin de preparar a los atletas para el aumento de las tensiones musculares.
— Y finalmente una tercera etapa de aumento de la capacidad de “reacción” neuromuscular de los atletas que consiste en una serie de ejercicios pliométricos más intensos (saltos hacia abajo).
En 1967, Verkhoshansky introduce los saltos hacia abajo en los programas de entrenamiento. Propone alturas de caída del salto de 0,75 a 1,15 metros.
En 1975 Fred Wilt, un famoso entrenador de atletismo americano, introduce la pliometría en los Estados Unidos.
En Europa es Carmelo Bosco quien, durante la década de 1980, actualiza y completa los tests de Asmussen y propone un sistema simple para medir los saltos: el ergojump está formado por una colchoneta de contacto que mide el tiempo de suspensión y el tiempo de apoyo. De este modo, los entrenadores disponen de una herramienta accesible para controlar mejor las cualidades de impulso de los atletas.
En Francia, Alain Piron, profesor de la UFRSTAPS (Unidad de Formación y de Investigación en Ciencias y Técnicas de las Actividades Físicas y Deportivas) de Dijon, imparte desde 1970 un tipo de enseñanza de atletismo que nos ha permitido descubrir todas las facetas de la pliometría (concepto teórico y variedad de ejercicios de salto).
Observemos que “plio” puede escribirse con “i” o con “y”; la cultura americana elige la ortografía “plyometric”, mientras que la escuela italiana propone ”pliométrico”. Nosotros hemos elegido la segunda posibilidad dada la riqueza de los estudios realizados por Carmelo Bosco, que ha dado sus cartas de nobleza a este método.
Bibliografía
Verkhoshansky, V. “Are depth jumps useful?”. Track and Field, 12(9), págs. 75-78, 1967.
Verkhoshansky, V. Perspectives in the improvement of speed-strength preparation of jumpers. Review of Soviet Physical Education and Sports. 4(2), págs. 28-29, 1966.
Verkhoshansky, V. y Tatyan, V. “Speed-strength preparation of future champions”. Soviet Sports Review. 18(4), págs. 166-170, 1983.
El ciclo de estiramiento-acortamiento
Datos fisiológicos
Ésta es la terminología utilizada en fisiología para designar el fenómeno particular que caracteriza la solicitación muscular específica de las contracciones pliométricas. De hecho, el funcionamiento pliométrico no se resume en la yuxtaposición de una acción excéntrica seguida de una acción concéntrica, sino que se basa en mecanismos que le son propios.
La intervención de “ciclo de estiramiento-acortamiento” (CEA) o “stretch-shortening-cycle” requiere 3 condiciones (Komi y Gollhofer, 1997):
— tener una buena “preactivación” de los músculos antes de la fase excéntrica,
— una fase excéntrica corta y rápida,
— una transmisión inmediata (corto plazo) entre la fase de estiramiento (excéntrica) y la de acortamiento (concéntrica).
Constatación de la eficacia del “ciclo de estiramiento-acortamiento”
En 1966 Zatsiorski ya había subrayado la eficacia especial de las condiciones pliométricas. Un atleta que realiza un test máximo isométrico en medio-squat, (con barra guiada, como por ej. en la fig. 16) podrá ejercer una fuerza superior en el transcurso de un salto hacia abajo del orden del 150 a 200% de la fuerza máxima isométrica.
El análisis de la actividad eléctrica confirma la diferencia de solicitación muscular entre la acción isométrica y el salto hacia abajo (fig. 17).
¿Por qué esta fuerza es superior?
Figura 16: Zatsiorski fue uno de los primeros en constatar que un atleta producía más fuerza en un salto hacia abajo que durante una contracción isométrica (150 a 200% de la fuerza isométrica).
Figura 17: Actividad muscular (EMG) de los dos vastos del cuádriceps durante un squat isométrico (derecha) y durante la realización de un drop jump (izquierda). La actividad muscular es claramente superior para la acción pliométrica.
Explicaciones fisiológicas
Las causas de la eficacia de esta modalidad de funcionamiento muscular descansan sobre tres elementos:
—