Refugiados ambientales. Teófilo Altamirano. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Teófilo Altamirano
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Математика
Год издания: 0
isbn: 9786123170011
Скачать книгу
las localidades, al igual que los procesos de capacitación, la toma de conciencia y la experiencia previa. Los resultados de las experiencias sobre implementación de políticas ambientales en las localidades son de enorme importancia, porque pueden ser ejemplos concretos replicables en otros lugares del mundo. También los errores y la falta de incorporación de la población local en el proceso de la aplicación del proyecto sirven de lección, tanto para quienes hacen las políticas como para la población local. En muchos lugares se aprende más de aquellos proyectos fallidos.

      Para ilustrar el nivel local, seleccionamos el nevado de Huaytapallana, la cuenca del Shullcas y la ciudad de Huancayo, en la sierra central del Perú; adicionalmente, incluimos la cuenca del Perené en la selva central del Perú. En el capítulo 5, se analiza este caso y se pone mayor énfasis al aspecto mágico-religioso, simbólico y ritual, aspectos ausentes en estudios ambientales y de cambio climático.

      2.2. El factor humano

      La ecología no debe prescindir del factor humano, pues la interacción entre el hombre y la naturaleza hace posible la dinámica ambiental. La presencia humana y de sus organizaciones define las condiciones que hacen posible una convivencia en equilibrio con el ambiente.

      Fotografía 2. Actores sociales y culturales

      Fotografía: Teófilo Altamirano, julio de 2013.

      La población ejerce presión sobre el medio ambiente y sus recursos renovables y no renovables. En general, el factor humano es responsable de su propia reproducción biológica y social. Cuando las necesidades de la población exceden los recursos, se produce un desequilibrio ambiental. La redistribución equitativa de los recursos, en general escasos, puede ser una manera de reducir el riesgo de deterioro en el medio ambiente.

      La dimensión humana también se refiere a los patrones culturales que condicionan la manera como se usan los recursos. Ciertas sociedades y culturas no requieren de abundancia de recursos para su propia reproducción, pero otras sí. La diferencia, en general, estriba en la producción, así como en su uso y distribución. Esta puede ser agropecuaria, extractiva, artesanal, etc., resultado de la combinación del trabajo, el capital, el manejo de la información y la experiencia que se transmite de generación en generación. Los sistemas de herencia son propios de cada sociedad. Además, la herencia, que en parte reproduce la igualdad o desigualdad social, es de dos tipos:

      1 La herencia física: cada individuo y familia cuenta con recursos financieros o capital monetario, además de patrimonio, como tierra, agua, bosques, minas, animales domésticos, instrumentos de producción agropecuaria o artesanal, vivienda, etc. El capital monetario está representado por los ahorros, ingresos por trabajo, venta de productos, etc. En sociedades campesinas e indígenas, estos recursos son muy escasos.

      2 La herencia cultural: cada familia, sociedad y cultura tiene un estilo de vida, una forma de ser y un comportamiento que se manifiestan dentro del proceso cultural. Así, una persona que pertenece a un grupo, clase social o grupo étnico heredará sus bienes físicos y culturales a la siguiente generación, la cual los transmitirá de igual manera a la generación que viene. Esto sucede en sociedades y culturas que mantienen una continuidad. En aquellas donde prima la desigualdad, la herencia cultural puede alterarse con la migración voluntaria o forzada y con la movilidad social y económica.

      Los cambios climáticos se producen en este contexto humano. Los procesos no actúan en el vacío, sino dentro de una determinada población y demografía. Generalmente, el impacto del cambio climático es mayor en poblaciones rurales campesinas e indígenas o en centros urbanos populares marginalizados ecológica y económicamente, que no cuentan con recursos para la mitigación. Es cierto que el mayor capital con el que cuenta esta población es social y cultural, en tanto el financiero está ausente o casi siempre proviene de afuera, sea del Estado o de instituciones privadas nacionales o internacionales.

      Un aspecto común a estas poblaciones es que no son las principales causantes del cambio climático. Los causantes son los países ricos, que además cuentan con recursos financieros y técnicos y son los que sufren menos los impactos del cambio climático. Algunos de estos países ya se están beneficiando del calentamiento global porque: el cambio climático hará posible una mayor producción agropecuaria; la desglaciación permitirá la apertura a nuevas fuentes agrícolas; y los casquetes de hielo, al derretirse, permitirán nuevas rutas de navegabilidad, transporte y comercio marítimo. En consecuencia, los países ricos recibirán oportunidades de prosperidad económica, mientras que los migrantes climáticos en países pobres buscarán cómo sobrevivir al cambio climático. Las capacidades de adaptación a las nuevas condiciones climáticas y a sus efectos, la resiliencia frente a los cambios, las respuestas y estrategias de acción colectiva e individual o la decisión de migrar forzosamente hacia otros lugares y la posterior readaptación a nuevos e inciertos contextos socioculturales, económicos y políticos son, en conjunto, respuestas humanas a las nuevas condiciones ambientales y climáticas.

      Capítulo 1

      Migraciones forzadas inducidas por el cambio climático

      Las migraciones forzadas son también llamadas involuntarias, compulsivas o ambientales, términos que se refieren al mismo fenómeno: la migración forzada motivada por el cambio climático.

      Las políticas sobre el medio ambiente y la población deben evitar el desplazamiento poblacional; sin embargo, cuando se afectan las condiciones de vida, directa o indirectamente, el éxodo es inevitable. ¿Cómo se deben manejar las salidas para no afectar la vida de las personas o para que el impacto sea menor? A diferencia de la migración voluntaria, económica o laboral, incluso de la que se produce por causas naturales, la migración forzada por razones ambientales se origina por los efectos del cambio climático sobre la población y se produce frente al quiebre de la relación entre la ecología y el ser humano. Esto sucede porque las condiciones de habitabilidad se hacen insostenibles y se agotan las posibilidades de una adaptación positiva, pues los mecanismos de resiliencia o mitigación no son suficientes. En estos casos, la única alternativa es prepararse para la evacuación o el traslado a lugares más seguros.

      El problema es dónde ir. ¿Está la población preparada para adaptarse a la nueva situación? En estas condiciones, la población se hace más vulnerable y dependerá fundamentalmente de sus propias organizaciones y fortalezas, de su capacidad de resiliencia no solo frente al cambio de lugar, sino también frente a nuevos retos, condiciones climáticas, ambientales, económicas, sociales y culturales. Se tendrá que tomar en cuenta también la unidad familiar, las redes preexistentes y las experiencias previas.

      Hasta el momento, la mayor parte de éxodos involuntarios se realizaron de manera desorganizada, no planificada. Las redes familiares— como tener un familiar o un compueblano en el lugar de destino— pueden reducir el riesgo de desadaptación.

      Se estima que la principal razón del éxodo en el futuro será la falta de agua, elemento capital para la vida en zonas rurales. De manera paralela a estas migraciones ambientales, continúan las convencionales o no climáticas, que se originan por otros factores, como la desigualdad entre el campo y las ciudades consecuencia del atraso y la ausencia del Estado.

      En todo proceso de migración ambiental, hay tres fases o etapas:

      1 Las condiciones ambientales internas en los lugares de salida donde se producen o se combinan los factores de desplazamiento.

      2 El proceso mismo de la migración, que se subdivide en: temporal, estacional y permanente.

      3 La readaptación o reasentamiento.

      1. Condiciones internas previas a la migración o desplazamiento

      En lo que una vez fue un lugar donde existía un equilibrio entre el medio biofísico y la población animal, vegetal y humana, el factor ambiental se ha convertido en la fuerza que empujará con más intensidad a la población a salir de su contexto de origen.

      Las razones para este nuevo tipo de migración son biofísicas y ecológicas, pero a ellas se debe agregar los cambios en el medio ambiente,