Parte 2. Una síntesis de la evaluación comparativa
5. El modelo integrado en la dirección general de empresas
Sistema 1. El sistema de objetivos y valores de una empresa
Sistema 2. El sistema de dirección de la organización
Sistema 3. El sistema de creación de valor para el cliente
Quiero empezar por agradecerles a mi esposa Marcela y a mis hijos, Sofía, Tomás y Samuel, por todo el apoyo y la comprensión que me brindaron durante las duras y extensas jornadas de trabajo. A mis padres, por su entrega generosa e incondicional. A mi esposa dedico especialmente este libro, porque ella fue testigo de mi compromiso y determinación para culminar este proceso que tuvo momentos de alegría, reflexión y preocupación. Además, es ella, Marcela, la compañera de viaje que ha vivido y compartido cada minuto y momento de mi vida: emociones, sentimientos, recuerdos, dificultades, satisfacciones y, especialmente, el convencimiento de tener un proyecto común que está unido en el amor, la mutua admiración y el respeto.
Este libro está dirigido y pensado para la razón de ser de mi labor profesional: los actuales y futuros directores generales de empresa; muchos de ellos han sido o son mis alumnos en INALDE Business School. Escribí este texto pensando en ellos, con la esperanza de que estas ideas les sirvan para que construyan un marco de referencia práctico y relevante, a fin de que muchos puedan ser mejores personas y directivos y, sobre todo, logren tomar mejores decisiones en beneficio propio, de su empresa y la sociedad.
Muchas gracias al profesor Joan Fontrodona, a quien le debo muchos aprendizajes que contribuyeron profundamente a mi empeño de crecer como investigador y, además, fue testigo y protagonista de la maduración paulatina de este proceso de investigación. Es un maestro generoso y dedicado.
Finalmente, quiero agradecer a los colaboradores de la institución en la que trabajo, INALDE Business School, de la Universidad de La Sabana; especialmente, a los directivos de la institución, quienes me apoyaron con el tiempo y la paciencia que se requiere tener con alguien que acomete tareas de semejante naturaleza. Me siento muy agradecido por haber tenido la oportunidad de contar con el tiempo para estudiar a fondo estos temas, asunto que en la vida moderna se constituye en un privilegio.
Fueron muchas las lecturas, las reflexiones, los diálogos internos y los esquemas elaborados para llevar a feliz término el presente libro. De todo lo leído hay una frase que recuerdo con mucha fuerza, ya que me dio un gran sentido para este propósito; por este hecho, la quiero compartir: “El gran regalo de la vida es en quien te conviertes mientras persigues tus metas. La clave está en amar y disfrutar del proceso. Si las metas son importantes, el proceso aún lo es más” (Samso, 2009, p. 5).
La presente investigación surgió a partir de la observación de que algunas escuelas de negocios han dejado de lado la enseñanza de la dirección general, sustituyéndola por la enseñanza de la dirección estratégica y de los postulados de la economía industrial dentro de la dirección general. En ese sentido, se considera pertinente y necesario un desarrollo integral de la dirección general que, mediante contenidos prácticos, integren un conocimiento completo que ofrezca a los directores generales una visión en conjunto basado en un conocimiento multidisciplinar. Tal es el objetivo de este libro.
Hasta ahora, no existe dentro del campo de la dirección general de empresas un modelo o esquema general, comprensivo e integral que abarque y articule los diferentes aportes de los principales y más representativos autores de esta disciplina académica, a partir de dicho modelo integral sería posible formular una serie de procesos esenciales que permitan perfeccionar el quehacer directivo.
En ese tenor, este libro pretende ser una guía que oriente a aquellas personas que desempeñan un cargo de director general de empresa para llevar a cabo su labor de manera justa y eficaz a través de un modelo integrado en dirección general. A raíz de lo que se ha señalado, y con fines investigativos, se formuló la siguiente pregunta: ¿cuáles son los procesos o actividades fundamentales que debe llevar a cabo un director general de empresa para que sea justo y eficaz en su quehacer directivo?
Para responder a la pregunta se realizó una evaluación comparativa de los autores más representativos del campo de la dirección, la dirección general y la estrategia empresarial, a saber: Kenneth R. Andrews, Michael E. Porter, Peter F. Drucker y Henry Mintzberg. La selección se basó en su gran prestigio intelectual y el reconocimiento de la comunidad empresarial —especialmente, de los directores generales de empresa—, sus publicaciones y, sobre todo, el impacto y grado de contribución a la disciplina que compete a este libro.
Se eligió a Kenneth R. Andrews porque fue el principal exponente de la asignatura Business Policy (BP) en la Harvard Business School (HBS), esta materia fue la precursora de todas las asignaturas en dirección general. Asimismo, se seleccionó porque fue uno de los autores que trazó el camino de esta disciplina académica en términos de objetivos de aprendizaje, competencias, habilidades, valores y orientación de la dirección general de una empresa.
Luego, se eligió a Michael E. Porter por su contribución al campo de la dirección general a partir de la introducción de conceptos como estrategia competitiva, ventaja competitiva y, recientemente, valor compartido. Porter es un ícono de la estrategia, sobre todo, dentro de la competencia entre las empresas en mercados globales y especializados.
Para complementar el pensamiento de los autores mencionados, Andrews y Porter, se eligió a un autor también clásico, con autoridad intelectual y reconocimiento general de la comunidad empresarial: Peter F. Drucker, quien es considerado uno de los padres del management moderno.
Finalmente, se eligió a un autor crítico de los anteriores y que, además, contribuye con ideas más actuales en materia de dirección y estrategia. Se trata de un autor con ideas disruptivas, provocadoras que se posicionan fuera de las corrientes dominantes: Henry Mintzberg, quien puede complementar este esquema integral con puntos de vista diferentes, innovadores y diversos.
Una vez seleccionados los autores, se establecieron criterios generales para deducir algunos elementos útiles y comunes en el campo de la dirección general, especialmente, para el quehacer del director general. Tales criterios son: contribuciones, limitaciones y conceptos clave para un modelo integrado en dirección general. A partir de la evaluación comparativa basada en dichos criterios, se diseñó y construyó un modelo o esquema integrador de estos enfoques, conceptos y teorías estudiadas. El producto de este análisis comparativo fue un esquema integral sobre los procesos o actividades fundamentales