Pensamientos. Susana Flomenbaum. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Susana Flomenbaum
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Сделай Сам
Год издания: 0
isbn: 9789878720869
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donde no te interrumpan, donde puedas estar cómodo/a, y relaja desde tus pies hasta tu mandíbula, tensa los músculos y luego deja ir, cierra lentamente tus ojos, respira profundo y exhala. Hazlo por un par de veces.

      Luego respira normal, pero escucha el ruido de tu respiración, siéntela, cuando ingresa el oxígeno, y cuando exhalas, concéntrate en ella, respira, cuenta hasta diez y luego exhalas, luego cuenta hasta 9, y así hasta hacerlo por esas 10 veces.

      Mueve los dedos de tus pies y manos, y abre los ojos despacio.

      Por esos 10 minutos, si fue más, mejor, diste un descanso a tu cerebro, energizaste tus células, y practicaste una homeostasis de sanación curativa a todo tu cuerpo, de las emociones, relaciones, y situaciones tóxicas que pasaste ese día.

      Energía

      Tu conciencia es energía, es presencia, para algunos, alma, espíritu, esa energía fluye y conecta con otras energías.

      Has notado, cuando estás en un lugar, una habitación, oficina, comercio, e ingresa alguien que tiene como suele decirse MALA VIBRA, mala onda, energía negativa, y te has dado cuenta de que se siente, cómo se te pega, y de acuerdo a tu propia energía, esta va a influir o no en la tuya.

      De la misma manera cuando ingresa a un lugar alguien genial, con buena onda, con mucha energía positiva e invade el recinto, como si fuera un aroma de un perfume bonito y fuerte que queda impregnado en todas partes.

      Pues tú haces lo mismo con los demás, en más o en menos, de acuerdo en qué estado de vibración te encuentres.

      Si llegas a tu casa, de un humor pésimo, cuando entras, es posible, que si hay niños, lloren, si hay mascotas huyan, y que, si esto es repetido, si tienes plantas, se sequen.

      O chocas con, por ejemplo, la mala vibra de tu pareja, se produce un cortocircuito que puede terminar en una gran pelea, sin haber abierto la boca.

      ¿Has notado que cuando las cosas salen mal tienden a salir todas mal? Tuviste un mal día, llegas a tu casa, sigues mal, tal vez discutes, se rompe un caño, se quema una lamparita, se cae un vaso, o no funciona el ascensor, te quedaste sin agua, o te das cuenta de que la luz se cortó porque olvidaste pagar la factura y te cortaron la energía. Y entonces solemos decir A MÍ ME PASAN TODAS.

      ¿Has notado que cuando la cosas salen bien tienden a salir todas bien?, se nos dan todas, y llegamos a sentir que somos poderosos, o también puede suceder que nos dé temor, y pensar por favor que no se corte, que no pase nada malo.

      Cuando nuestra energía es positiva, cuando nuestros pensamientos son reales, certeros, alegres, estamos alineados con el universo, con la naturaleza, estamos tranquilos, contentos, y así naturalmente todo ocurre y es como debe ser.

      Pero debemos aprender, y es sencillo pero no es fácil, ni instantáneo. Paso a paso debemos analizar primero esos pensamientos, e inculcarnos como un hábito, controlarlos.

      Debemos expandir nuestra conciencia al presente, que es lo único y más valioso que tenemos, el ahora, y también debemos aprender a disfrutarlo.

      Un buen ejercicio es tomar una hoja y escribir eso que estábamos pensando y no nos gustó, para luego en calma analizar su sentido, para saber para qué pensamos lo que pensamos.

      Es igual que descubrir a alguien que nos miente, vamos a estar más atentos con lo que nos dice esa persona, y analizaremos sus dichos. Bueno, descubrámonos primero nosotros, y estaremos más atentos, y diremos: te pillé, pensamiento inútil, te dejo pasar y te cambio, no me haré mal a mí mismo y a los que me rodean.

      Todos dialogamos con nosotros mismos, en realidad, dialogamos con nuestro ser interior, nos preguntamos si está bien o mal lo que hacemos. Pero ojo que el ego está siempre presente para recordarnos lo que debe ser, para decirnos más de esto, menos de aquello, eso está mal.

      Tenemos muchos sistemas de creencias incorporados, que vienen del contexto donde crecimos, y de siglos de cosas que nos hicieron incorporar como absolutas, a nosotros, a nuestros padres, abuelos y tatarabuelos y más allá.

      Y así esas creencias absolutas de cómo deben ser las cosas, sin ni siquiera cuestionarlas.

      Es como las publicidades que vemos con estrategias que hacen que incorporemos un producto (imágenes subliminales), y no nos damos cuenta, es invisible a nuestros ojos, con estrategias de marketing logran millones de ventas, al incorporarse en nuestras mentes que son necesariamente absolutas.

      Al expandir nuestra conciencia, logramos hacernos a un lado del manejo externo, del marketing, del ego, de las creencias limitantes, y reconocernos, para lograr vivir plenamente el viaje, por supuesto sin olvidar el destino.

      Somos energía, todo ser vivo es energía, prueba de poner una planta, por ejemplo si tienes un POTUS, que es una de las plantas con más energía, cuyas hojas siempre están hacia arriba y crece con mucho vigor, ponle a su lado una planta, puede hasta ser otro potus que esté mal, caído, seco, con la hojas como tubo, y serás testigo de la magia, del milagro, de la realidad, de observar cómo esta otra planta absorbe o recibe energía positiva de su compañera y comienza a abrir sus hojas y a crecer sana.

      Esto es igual para todos, puedes absorber la energía del otro o recibirla, y esta puede ser negativa o positiva.

      Si tu ambiente diario es tóxico o negativo, es por supuesto difícil, no intoxicarse, por ello la importancia de saber de qué manera protegernos, y también proteger.

      Respirando

      Cuando tomamos conciencia de que estamos haciéndonos daño a nosotros mismos con pensamientos negativos, que no nos llevan a ningún lugar bonito, ya hemos realizado un paso gigante para expandir justamente nuestra conciencia hacia un camino de abundancia.

      Pero, ¿cómo continuar? Porque pasados unos días seguramente olvidaremos esto y volveremos a proceder como toda nuestra vida lo hemos hecho.

      Debemos salir de ese sistema de creencias, implantado en nuestro cerebro, esas ideas de sufrimiento, de esfuerzo, de culpas y remordimientos, de juzgar todo el tiempo, de creer, que solo hay una realidad.

      Comencemos respirando, sí, respirando, ya sé que si no respiro muero, pero cuántas veces ante una situación de estrés, respiramos profundo y luego expiramos, para controlar nuestra ira, nuestro enojo o nuestra angustia.

      Debemos aprender a hacerlo siempre, unos minutos, como un ejercicio que se transforme en hábito, respirar y solo pensar en ello, tomar una bocanada de aire profunda, por la nariz o por la boca, contener el aire, 1, 2, 3, 4, 5, y soltarlo lentamente, así 5 veces.

      Notaremos cómo nos hemos relajado, y también si nos concentramos en el ruido de nuestra propia respiración, huimos 5 minutos de nuestro parloteo de pensamientos. Y oxigenamos nuestro cuerpo, templo de nuestra alma, de nuestra energía, de nuestro espíritu o de nuestra conexión con el universo, como quieras llamarlo.

      Otro ejercicio de respiración más avanzado, consiste en inspirar por una fosa nasal, tapando la otra con el dedo, y largar el aire, tapando la primera, así 10 veces. Hay diferentes ejercicios respiratorios, que cada uno adapta a su propio bienestar físico.

      Más adelante cuando ya estemos familiarizados con estos ejercicios y habiendo comenzado a sentir sus cualidades, aprenderemos a respirar, controlando nuestro oxígeno y llevándolo a nuestros centros de energía o chakras, y de esa manera recuperaremos vitalidad, así lo dicen los grandes maestros del yoga, extendiendo la vitalidad del practicante.

      Respirando, nos oxigenamos, nos protegemos de un ambiente tóxico, protegemos a nuestro entorno, pero respirando con conciencia.

      Cuántas veces ante una situación estresante, o intolerante, para poder contener un grito o no reaccionar mal, respiramos profundo y luego exhalamos. Es innato, pues bien realizado, como un ejercicio aprendido, nos ayuda a realizar una homeostasis, capaz de limpiar nuestro cuerpo y energía.

      Puedes practicar yoga, puedes hacer reiki, puedes meditar.

      Meditando