Además de estas propiedades, podemos diferenciar dos tipos de sistemas. Un sistema es abierto o cerrado en función de la relación que la familia establezca con el exterior. Las familias cerradas suelen poner barreras que dificultan las relaciones con el entorno y la incorporación de nuevos miembros, mientras que las abiertas no tienen límites tan rígidos y el intercambio de información es más frecuente.
3.1.b Cibernética: La cibernética es la disciplina responsable del estudio de los mecanismos de retroalimentación que operan en un sistema. Aunque en su origen estaba vinculada al campo de las computadoras informáticas, sus principios teóricos se utilizaron para describir las relaciones que tenían lugar dentro de la familia.
Autores como Fritz B. Simon contribuyeron a la adaptación del lenguaje cibernético y su aplicación a la terapia familiar (Simon et al., 1988). La terminología propia del campo de la cibernética comenzó a utilizarse para describir los procesos de retroalimentación que se producen en una familia a través de las relaciones.
Feedback: Es el resultado de la acción de un miembro del sistema (A) sobre otro (B) y que determina la siguiente acción de B. El feedback, o retroalimentación, puede ser positivo, siempre y cuando genere una desviación en el funcionamiento del sistema, o puede ser negativo, cuando la acción mantiene el funcionamiento habitual del sistema.
Homeostasis: Si el feedback negativo tiene por objetivo mantener el equilibrio del sistema, denominamos «homeostasis» a dicho equilibrio. La homeostasis es el estado que mantiene en equilibrio el funcionamiento del sistema.
Morfogénesis: Si el feedback positivo tiene por objetivo alterar el equilibrio del sistema, denominamos «morfogénesis» al proceso por el cual se modifica la organización habitual del sistema.
El hijo de 18 años de una familia expresa su deseo de estudiar fuera, lo cual representa una crisis para la familia que amenaza su equilibrio. Si la respuesta de la familia es negarle al hijo la salida de casa (feedback negativo), se mantendrá la homeostasis; en cambio, si lo acompañan a buscar nuevo destino (feedback positivo), se iniciará un proceso de morfogénesis.
3.1.c Teoría de la Comunicación: El grupo de profesionales que conformaban el MRI, encabezados por Watzlawick, Jackson y Beavin, publicó en 1973 la Teoría de la comunicación humana, documento de imprescindible lectura para los interesados en la intervención sistémica.
Partían de la premisa de que la conducta problemática del individuo se enmarca dentro de un conjunto de relaciones con su sistema de pertenencia. Para ellos, la relación es el elemento que hay que analizar, evaluar o sobre el que intervenir, y para llevar a cabo esta labor hay que estudiar la comunicación, ya que consideran que esta es la manifestación observable de la relación.
Toda conducta es comunicación y toda la comunicación afecta a la conducta (P. Watzlawick et al., 1981); en consecuencia, cambios comunicacionales generan cambios en la conducta. El síntoma, como conducta que es, debe ser interpretado como una manera más de comunicar en el marco de un sistema relacional.
La Teoría de la Comunicación es un análisis de la pragmática comunicativa en donde se describen características básicas a través de cinco axiomas con sus respectivas patologías comunicacionales.
1.º Es imposible no comunicar, la no comunicación no existe. 2.º Existen dos niveles de comunicación: un nivel vinculado al contenido del intercambio comunicativo (referencial) y, el otro nivel, a la relación entre los interlocutores (conativo). 3.º La comunicación está determinada por la puntuación de la secuencia de hechos de los participantes. 4.º Hay dos canales de trasmisión: el digital, por el que se trasmite el nivel referencial (verbal), y el analógico, por el que se trasmite el nivel conativo (no verbal). 5.ª La comunicación puede ser complementaria o simétrica en función del reparto de poder. |
Tabla 1. Axiomas de la comunicación humana.
El psicoterapeuta era el responsable de describir y catalogar qué era comunicarse bien y qué era comunicarse mal y sus esfuerzos iban destinados a facilitar el uso de la comunicación al servicio de la mejoría y del cambio. Era habitual ver a los terapeutas incitando conversaciones, limpiándolas de las interferencias descritas como patológicas y fomentando, desde una posición directiva.
3.2 Proliferación de las primeras escuelas de terapia familiar
Para la cibernética, el objeto de estudio son las operaciones que se dan en un sistema para mantener una organización concreta, y el cibernetista, el encargado de observar dichas operaciones. Esta observación se realizaba bajo la premisa de que el cibernetista es un observador externo, ajeno al sistema y todas sus recursividades; por lo tanto, dados sus conocimientos, imparcial.
Los psicoterapeutas sistémicos adscritos a la primera cibernética aplicaban estos principios al considerarse a sí mismos observadores externos ajenos a la familia sobre la que hacían intervenciones desde el rol de expertos.
A continuación revisaremos las principales escuelas que surgieron tras la aparición de la terapia familiar y que se circunscribían en la denominada «cibernética de primer orden».
3.2.a Escuela Intergeneracional: Las investigaciones y estudios de Ivan Boszormenyi-Nagy y sobre todo de Murray Bowen, dos psiquiatras psicoanalistas, que tienen lugar en los años sesenta, dan forma a esta escuela que mantiene que los problemas de los pacientes provienen de la historia familiar. Dichos problemas se heredan en forma de lealtades, mitos o creencias y tienen una fuerte influencia sobre el funcionamiento familiar, el de pareja, el individuo en su problemática actual.
Murray Bowen introdujo el concepto de «diferenciación» (Bowen, 1991) a partir de los estudios realizados a pacientes con esquizofrenia y a sus familiares. Utilizó este concepto para referirse al grado de individualidad que las personas mantienen frente a la pertenencia a un sistema relacional. Personas poco diferenciadas de su familia de origen son especialmente reactivas a nivel emocional a los mandatos, lealtades, expectativas que provienen de sus familias de origen, alterando el proceso de individualización y permaneciendo en una relación de fusión que Bowen describe como una misma piel emocional.
Otros autores, como Nagy y James Framo, continuaron esta línea de investigación, muy influenciada por la terapia familiar orientada al insight de Nathan Ackerman. El objetivo se centraba en acompañar a los pacientes a ser conscientes de estas herencias intergeneracionales y realizar cambios en las relaciones familiares que facilitasen procesos de individuación para protegerse de las lealtades familiares (Boszomenyi-Nagy, 1986) o las triangulaciones y lograr un crecimiento personal.
3.2.b Escuela Estratégica: Uno de los aportes más relevantes de esta escuela, instituida a partir de los estudios de J. Haley, reside en la afirmación de que el problema de los pacientes está en los intentos de solución que siguen al problema y que se dan en la familia o en el sistema relacional al que pertenece el paciente identificado.
Así pues, los problemas son las tentativas de solución, que no solo no funcionan para cambiar, sino que perpetúan y sostienen la problemática, obteniendo de este