36:6.4 (404.2) Una vez que los Portadores de Vida han diseñado los modelos originales de la vida, después de haber organizado los sistemas de energía, allí debe ocurrir un fenómeno adicional; se debe impartir el «aliento de vida» a estas formas sin vida. Los Hijos de Dios pueden construir las formas de la vida, pero es el Espíritu de Dios el que realmente contribuye con la chispa vital. Y cuando la vida así impartida se consume, nuevamente el cuerpo material que queda pasa a ser materia muerta. Cuando se agota la vida otorgada, el cuerpo vuelve al seno del universo material de donde fue tomado en préstamo por los Portadores de Vida para servir como vehículo transitorio para esa dotación de vida que hicieron converger en tal visible asociación de energía y materia.
36:6.5 (404.3) La vida otorgada a las plantas y animales por los Portadores de Vida no vuelve a los Portadores de Vida después de la muerte de la planta o el animal. La vida que abandona tales cosas vivientes no posee ni identidad ni personalidad. Individualmente no sobrevive a la muerte. Durante su existencia y el tiempo de su estadía en el cuerpo de materia, se somete a un cambio, sufre una evolución de la energía y sobrevive solamente como parte de las fuerzas cósmicas del universo; no sobrevive como vida individual. La supervivencia de las criaturas mortales se basa enteramente en la evolución de un alma inmortal dentro de la mente mortal.
36:6.6 (404.4) Hablamos de la vida como «energía» y como «fuerza», pero en realidad no es ninguna de las dos. La fuerza-energía es diversamente sensible a la gravedad; pero no así la vida. El modelo original tampoco responde a la gravedad, siendo una configuración de energías que ya han cumplido todas las obligaciones sensibles a la gravedad. La vida, como tal, constituye la animación de cierto sistema de energía configurado en un modelo original o de otra manera segregado —material, mental o espiritual.
36:6.7 (404.5) Existen algunas cosas relacionadas con la elaboración de la vida en los planetas evolucionarios que no nos resultan completamente claras. Comprendemos plenamente la organización física de las fórmulas electroquímicas de los Portadores de Vida, pero no entendemos del todo la naturaleza y fuente de la chispa de activación de la vida. Sabemos que la vida fluye del Padre a través del Hijo y por el Espíritu. Es muy probable que los Espíritus Rectores sean el canal séptuple del río de vida que es vertido sobre toda la creación. Pero no comprendemos la técnica por la cual el Espíritu Rector supervisor participa en el episodio inicial de concesión de la vida en un nuevo planeta. Creemos que los Ancianos de los Días, también juegan un papel en esta inauguración de la vida en un nuevo mundo, pero ignoramos completamente la naturaleza del mismo. Sabemos que el Espíritu Materno del Universo realmente vitaliza los modelos originales sin vida e imparte a ese plasma activado las prerrogativas de la reproducción orgánica. Observamos que estos tres son los niveles de Dios el Séptuple, a veces designados como los Creadores Supremos del tiempo y el espacio; pero por otra parte sabemos muy poco más de lo que saben los mortales de Urantia —simplemente que el concepto es inherente al Padre, expresado en el Hijo, y la realización de la vida en el Espíritu.
36:6.8 (405.1) [Redactado por un Hijo Vorondadek asignado a Urantia como observador y que actúa en esta función a petición del Jefe Melquisedek del Cuerpo Supervisor Revelador.]
El libro de Urantia
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Documento 37
Las Personalidades del Universo Local
37:0.1 (406.1) A LA cabeza de todas las personalidades en Nebadon se encuentra el Hijo Creador Soberano y Mayor, Micael, el padre y soberano del universo. Coordinado en divinidad y complementario en atributos creativos está el Espíritu Materno del universo local, la Ministra Divina de Salvington. Y estos creadores son, en un sentido muy literal, el Padre-Hijo y la Espíritu-Madre de todas las criaturas oriundas de Nebadon.
37:0.2 (406.2) Los documentos previos han tratado sobre las órdenes creadas de filiación. Las sucesivas narraciones describirán los espíritus ministrantes y las órdenes ascendentes de filiación. Este documento está principalmente dedicado a un grupo intermedio, los Ayudantes Universales, pero también se considerarán brevemente algunos de los espíritus más elevados que están estacionados en Nebadon y ciertas órdenes de ciudadanía permanente en el universo local.
1. Los Ayudantes Universales
37:1.1 (406.3) Muchas de las órdenes singulares, generalmente agrupadas bajo esta categoría, no son reveladas, pero de acuerdo con la presentación de estos documentos, los Ayudantes Universales incluyen las siete órdenes siguientes:
37:1.2 (406.4) 1. Las Brillantes Estrellas Matutinas.
37:1.3 (406.5) 2. Las Estrellas Vespertinas.
37:1.4 (406.6) 3. Los Arcángeles.
37:1.5 (406.7) 4. Los Asistentes Altísimos.
37:1.6 (406.8) 5. Los Altos Comisionados.
37:1.7 (406.9) 6. Los Supervisores Celestiales.
37:1.8 (406.10) 7. Los Maestros de los Mundos de Estancia.
37:1.9 (406.11) De la primera orden de Ayudantes Universales —las Brillantes Estrellas Matutinas— hay sólo uno en cada universo local, y es el primogénito de todas las criaturas nativas de un universo local. La Brillante Estrella Matutina de nuestro universo es conocida como Gabriel de Salvington. Él es el jefe ejecutivo de todo Nebadon y actúa como representante personal del Hijo Soberano y como portavoz de su consorte creativa.
37:1.10 (406.12) Durante las primeras épocas de Nebadon, Gabriel trabajó completamente a solas con Micael y el Espíritu Creativo. Al crecer el universo y multiplicarse los problemas administrativos, se le proporcionó un cuerpo personal de asistentes no revelados, y finalmente este grupo fue aumentado con la creación del cuerpo de Nebadon de las Estrellas Vespertinas.
2. Las Brillantes Estrellas Vespertinas
37:2.1 (407.1) Los Melquisedek proyectaron estas brillantes criaturas y luego fueron traídas a la existencia por el Hijo Creador y el Espíritu Creativo. Sirven en muchas capacidades, pero principalmente como funcionarios de enlace de Gabriel, el jefe ejecutivo del universo local. Uno o más de estos seres actúan en su representación en las capitales de cada constelación y sistema en Nebadon.
37:2.2 (407.2) Como jefe ejecutivo de Nebadon, Gabriel es presidente ex-oficio u observador en la mayoría de los cónclaves de Salvington, y frecuentemente hasta mil de ellos están en sesión simultáneamente. Las Brillantes Estrellas Vespertinas representan a Gabriel en estas ocasiones; no puede estar en dos lugares al mismo tiempo, y estos superángeles compensan esta limitación. Realizan un servicio análogo para el cuerpo de los Hijos Instructores Trinitarios.
37:2.3 (407.3) Aunque personalmente ocupado en tareas administrativas, Gabriel se mantiene en contacto con todas las demás fases de la vida y asuntos del universo a través de las Brillantes Estrellas Vespertinas. Éstas siempre lo acompañan en sus giras planetarias y frecuentemente van en misiones especiales a los distintos planetas como sus representantes personales. En tales asignaciones se las ha denominado a veces como «el ángel del Señor». Frecuentemente van a Uversa para representar a la Brillante Estrella Matutina ante las cortes y asambleas de los Ancianos de los Días, pero rara vez viajan más allá de los confines de Orvonton.
37:2.4 (407.4) Las Brillantes Estrellas Vespertinas constituyen una orden dual única en su género, pues comprenden algunos de dignidad creada y otros de servicio alcanzado.