19:1.11 (215.8) 4. La historia por sí sola no consigue revelar adecuadamente el desarrollo futuro —el destino. Los orígenes finitos son útiles, pero sólo las causas divinas revelan los efectos finales. Los fines eternos no se manifiestan en los comienzos del tiempo. El presente sólo puede interpretarse a la luz de su correlación con el pasado y el futuro.
19:1.12 (215.9) Por lo tanto, por este motivo y aun por otras razones, la técnica que utilizamos para acercarnos al hombre y a sus problemas planetarios, es embarcándonos en el viaje espacio-temporal partiendo de la Fuente y Centro Paradisiaco infinito, eterno y divino de toda la realidad de personalidad y de toda la existencia cósmica.
2. Los Perfeccionadores de la Sabiduría
19:2.1 (215.10) Los Perfeccionadores de la Sabiduría constituyen una creación especializada de la Trinidad del Paraíso cuya función consiste en personificar la sabiduría de la divinidad en los superuniversos. Hay exactamente siete mil millones de estos seres, y mil millones están asignados para cada uno de los siete superuniversos.
19:2.2 (215.11) Juntamente con sus coordinados, los Consejeros Divinos y los Censores Universales, los Perfeccionadores de la Sabiduría pasaron por la sabiduría del Paraíso, de Havona y de las esferas paradisiacas del Padre, a excepción de Divinington. Después de estas experiencias, se asignaron permanentemente los Perfeccionadores de la Sabiduría al servicio de los Ancianos de los Días. Su puesto de servicio no está ni en el Paraíso ni en los mundos de los circuitos Paraíso-Havona; se dedican exclusivamente a la administración de los gobiernos de los superuniversos.
19:2.3 (216.1) Dondequiera y cada vez que funcione un Perfeccionador de la Sabiduría, ahí mismo funciona sabiduría divina. Hay actualidad de presencia y perfección de manifestación en el conocimiento y la sabiduría representados en las acciones de estos seres poderosos y majestuosos. No reflejan la sabiduría de la Trinidad del Paraíso sino que son esa sabiduría. Son las fuentes de sabiduría para todos los maestros que enseñan la aplicación del conocimiento sobre el universo; las fuentes de la prudencia y los manantiales del discernimiento para las instituciones de enseñanza y esclarecimiento de todos los universos.
19:2.4 (216.2) La sabiduría es de doble origen, pues deriva de la perfección del discernimiento divino intrínseco en los seres perfectos, y de la experiencia personal adquirida por las criaturas evolutivas. Los Perfeccionadores de la Sabiduría son la sabiduría divina de perfección paradisiaca del discernimiento de la Deidad. Sus asociados administrativos en Uversa, los Mensajeros Poderosos, Aquellos sin Nombre ni Número, y los Elevados en Autoridad, cuando actúan en conjunto, son la sabiduría universal que proviene de la experiencia. Un ser divino puede tener la perfección del conocimiento divino. Un mortal evolutivo puede algún día llegar a alcanzar la perfección del conocimiento ascendente, pero ninguno de los dos por sí solos agota las potencialidades de toda la sabiduría posible. Por consiguiente, cada vez que se requiera un máximo de sabiduría administrativa en la conducta del superuniverso, estos perfeccionadores de la sabiduría de discernimiento divino se asocian siempre con aquellas personalidades ascendentes que han alcanzado las altas responsabilidades de la autoridad superuniversal a través de las tribulaciones experienciales de la progresión evolutiva.
19:2.5 (216.3) Los Perfeccionadores de la Sabiduría necesitarán siempre de este complemento de sabiduría experiencial para completar su obra de sagacidad administrativa. Pero se ha postulado que tal vez los finalistas del Paraíso en el futuro, después de ser iniciados en la séptima etapa de la existencia espiritual, lleguen eventualmente a un alto nivel de sabiduría, hasta ahora no alcanzado. Si esta inferencia es correcta, dichos seres perfeccionados de ascensión evolutiva indudablemente llegarían a ser los administradores universales más eficaces jamás conocidos en toda la creación. Creo que tal es el alto destino de los finalistas.
19:2.6 (216.4) La versatilidad de los Perfeccionadores de la Sabiduría les permite participar prácticamente en todos los servicios celestiales de las criaturas ascendentes. Los Perfeccionadores de la Sabiduría y mi orden de personalidad, los Consejeros Divinos, juntamente con los Censores Universales, constituyen las órdenes más elevadas de seres que pueden, y se ocupan en el trabajo de revelar la verdad a los planetas y sistemas individuales, tanto en sus épocas primitivas como cuando estén plenamente establecidos en luz y vida. De vez en cuando, todos nosotros tenemos que ver con el servicio de los mortales ascendentes, sea en el planeta de su vida inicial, sea en un universo local o, más comúnmente, en el superuniverso. Los seres coordinados de origen en la Trinidad
3. Los Consejeros Divinos
19:3.1 (216.5) Estos seres de origen en la Trinidad constituyen el consejo de la Deidad para los dominios de los siete superuniversos. No son reflejos del consejo divino de la Trinidad; son ese consejo. Hay veintiún mil millones de Consejeros en servicio, tres mil millones son asignados a cada superuniverso.
19:3.2 (217.1) Los Consejeros Divinos son los asociados e iguales de los Censores Universales y de los Perfeccionadores de la Sabiduría; de uno a siete Consejeros se asocian con cada una de estas últimas personalidades. Estas tres órdenes participan en el gobierno de los Ancianos de los Días, incluyendo los sectores mayores y menores, en los universos locales y las constelaciones, y los concilios de los soberanos de los sistemas locales.
19:3.3 (217.2) Actuamos como individuos, como yo lo estoy haciendo al pronunciar esta declaración, pero también funcionamos en trío cuandoquiera que la ocasión lo exija. Cuando actuamos para ejecutar, siempre nos asociamos de la siguiente manera: un Perfeccionador de la Sabiduría, un Censor Universal y de uno a siete Consejeros Divinos.
19:3.4 (217.3) Un Perfeccionador de la Sabiduría, siete Consejeros Divinos, y un Censor Universal constituyen un tribunal de la divinidad Trinitaria, el más elevado cuerpo asesor móvil en los universos del tiempo y el espacio. Estos grupos de nueve se conocen como tribunales para recolectar información o para revelar la verdad, y cuando juzgan un problema específico, y pronuncian un dictamen, es como si la decisión hubiera provenido de uno de los Ancianos de los Días, porque en todos los anales de los superuniversos jamás ha ocurrido que los Ancianos de los Días hayan revocado un veredicto de esta índole.
19:3.5 (217.4) Cuando los tres Ancianos de los Días actúan, la Trinidad del Paraíso actúa. Cuando el tribunal de nueve llega a una decisión después de sus deliberaciones con-juntas, para todo fin y propósito es como si hubieran dictaminado los Ancianos de los Días. Y ésta es la forma en que los Gobernantes del Paraíso se ponen en contacto personal con los mundos, sistemas y universos individuales en los asuntos administrativos y en la reglamentación.
19:3.6 (217.5) Los Consejeros Divinos son la perfección del consejo divino de la Trinidad Paradisiaca. Nosotros representamos, y de hecho somos, el consejo de la perfección. Cuando nos complementa el consejo experiencial de nuestros asociados, los seres de ascensión evolutiva perfeccionados y abrazados por la Trinidad, nuestras conclusiones combinadas son no sólo completas, sino pletóricas. Una vez que un Censor Universal ha asociado, adjudicado, confirmado y promulgado nuestro consejo con-junto, es muy probable que se acerque al umbral mismo de la totalidad universal. Estos veredictos representan la máxima aproximación posible a la actitud absoluta de la Deidad dentro de los límites espacio-temporales de la situación considerada y del problema correspondiente.
19:3.7 (217.6) Siete Consejeros Divinos, en enlace con un trío trinidizado evolutivo —un Mensajero Poderoso, un Elevado en Autoridad y un sin Nombre ni Número— representan la mejor aproximación superuniversal a la unión del punto de vista humano con la actitud divina en los niveles cuasiparadisiacos de significación espiritual y valores de realidad. Una aproximación tan grande a la unión de las actitudes cósmicas de la criatura y de su Creador sólo es sobrepasada en los Hijos Paradisiacos de autootorgamiento, que son, en cada fase de experiencia de la personalidad, Dios y hombre.
4. Los Censores