Las anclas de principio y fin siempre deben aplicarse sin tensión. Esto se basa en el conocimiento de que algunos pacientes son sensibles a los receptores de cizallamiento en la piel. La zona de tensión cero se aplica con la intención de que se disipen las fuerzas de cizallamiento de la tensión del vendaje.
Aplicación de inhibición o de longitud (inhibition taping)
El taping de longitud también se conoce como taping de inhibición (inhibition taping) debido a que se sabe que un acortamiento observado en la prueba de longitud puede deberse a una excitación neural o a una falta de factores de inhibición que regulen la hiperactividad del músculo. La intención del taping es estimular un efecto neuroinhibidor para restaurar la longitud y la función. El término de «inhibición» no indica que el objetivo sea que en la reevaluación tengamos un músculo «más débil».
El tejido en que se va a efectuar el taping se lleva a una posición elongada sin que haya agravación o provocación, de forma que la tensión aplicada en el vendaje siempre está en relación con la extensión máxima de ese paciente en el momento de la aplicación. El vendaje se coloca desde la inserción hacia el origen (distal a proximal) con un 15-25 % de la tensión disponible aplicada sobre la zona terapéutica. La tensión leve en el vendaje sirve para que el profesional clínico recuerde que el objetivo del vendaje es reducir el solapamiento de los filamentos de actina-miosina o reducir la hiperactividad de determinados vectores musculares o fasciales.
La respuesta inmediata de «longitud» alcanzada con el taping refleja la mejora de la coordinación nerviosa del sistema en cuanto a ese movimiento en particular y en respuesta a la colocación correcta del kinesiotape. El profesional clínico debe recordar que el kinesiotaping funciona restaurando la homeostasia del sistema y no puede fomentar la coordinación neural de una zona que ya es «normal» y está en equilibrio. Por lo tanto, es evidente que los investigadores que evalúan la eficacia del kinesiotaping para «mejorar» la longitud en una población normal no observarán resultados significativos. En los pacientes que precisan una mayor «flexibilidad», pero se sitúan en la amplitud normal (es decir, derecha igual a la izquierda, o por lo demás normal en el individuo), no se podrá conseguir una mejora de la longitud a largo plazo solo con el kinesiotape.
Aplicación de fuerza o facilitación (facilitation taping)
El taping de fuerza también se denomina de facilitación (facilitation taping), dado que indica que puede haber factores de inhibición cortical que se abordan con el vendaje; por ello, la intención de este es propiciar o facilitar una actividad neural adecuada.
Habitualmente, el vendaje se coloca desde el origen hacia la inserción o del segmento más estable en relación con un segmento más móvil (proximal a distal). Por encima de la zona terapéutica, la tensión del vendaje es del 25-35 % del estiramiento disponible. La variedad de tensión ligeramente superior recuerda al profesional que con el vendaje debe intentar fomentar el solapamiento de los filamentos de actina-miosina para restaurar la función muscular.
En los músculos que presentan un déficit en el examen de fuerza, así como una restricción en la prueba de longitud, se coloca el vendaje con una tensión del 15-25 %. La interpretación de estos hallazgos en las pruebas es que el músculo es incapaz de producir su tensión máxima, sobre todo debido al compromiso de su longitud. La restauración de la longitud muscular debe mejorar la relación longitud-tensión del músculo y así restaurar la fuerza. Con el músculo en su posición elongada, se aplica una tensión del 15-25 % del estiramiento disponible para restaurar tanto la longitud como la fuerza del músculo. En estas circunstancias, la reevaluación del músculo debe incluir tanto las pruebas de longitud como de fuerza del músculo.
La respuesta inmediata de «fuerza» alcanzada con el taping refleja la mejora de la coordinación nerviosa del sistema en cuanto a ese movimiento en particular y en respuesta a la colocación correcta del kinesiotape. El profesional clínico debe recordar que el kinesiotaping funciona restaurando la homeostasia del sistema y no puede fomentar la coordinación neural de una zona que ya es «normal» y está en equilibrio. Por lo tanto, es evidente que los investigadores que evalúan la eficacia del kinesiotaping para «mejorar» la fuerza en una población normal no observarán resultados significativos. Para conseguir aumentos de la fuerza en la población «normal» se recomienda que los profesionales realicen intervenciones para promocionar la hipertrofia muscular en este tipo de pacientes (por ejemplo, trabajo en el gimnasio).
REHABILITACIÓN
El objetivo de este libro no es dirigir un proceso de rehabilitación completo. Sin embargo, en el programa de un paciente es apropiado incluir los entrenamientos de longitud y fuerza relevantes para un determinado músculo que ha mejorado con el kinesiotape. Si una aplicación de longitud ha sido eficaz, entonces deberá instaurarse un programa de trabajo miofascial dinámico para mantener la longitud alcanzada y para que el paciente se implique de manera activa en el programa, con lo que al retirar el vendaje se podrán mantener mejor los resultados alcanzados. Si una aplicación de fuerza ha sido eficaz, sería adecuado instaurar un programa de fortalecimiento dirigido a utilizar el músculo vendado y facilitar una normalización del control neural una vez completado el proceso de taping.
El objetivo del profesional clínico es procurar cambios con la aplicación del vendaje. Concienciar al paciente de la implicación del músculo concreto vendado contribuye a restaurar la propiocepción normal y le hace valorar los pequeños ajustes que ha de realizar para conseguir una ganancia funcional que puede llegar a ser considerable.
Directrices generales
EN MÚSCULOS QUE PRESENTAN UN ACORTAMIENTO EN EL EXAMEN (tensos, hiperactivos o con puntos gatillo)
Utilizar la aplicación de longitud (inhibition taping):
•Pasar el músculo a una posición elongada (para ello se suele alejar el origen de la inserción).
•Aplicar el ancla inicial sin tensión en la inserción, colocar el cuerpo (base) del vendaje con una tensión del 15-25 % y aplicar el ancla final sin tensión en el origen
EN MÚSCULOS QUE PRESENTAN «DEBILIDAD» EN EL EXAMEN
Utilizar la aplicación de fuerza (facilitation taping):
•Pasar el músculo a una posición elongada (para ello se suele alejar el origen de la inserción).
•Aplicar el ancla inicial sin tensión en el origen, colocar el cuerpo (base) del vendaje con una tensión del 25-35 % y aplicar el ancla final sin tensión en la inserción.
EN MÚSCULOS QUE PRESENTAN ACORTAMIENTO Y DEBILIDAD EN EL EXAMEN
Pasar el músculo a una posición elongada (para ello se suele alejar el origen de la inserción). Aplicar el ancla inicial sin tensión, colocar el cuerpo (base) del vendaje con una tensión del 15-25 % y aplicar el ancla final sin tensión.
Los profesionales clínicos han de saber que la producción óptima de fuerza de un músculo en particular puede verse comprometida por los cambios en la relación de longitud-tensión de ese músculo (Goldspink y Williams, 1992). En los músculos que presentan un acortamiento y debilidad en el examen, se recomienda una aplicación inicial para restaurar la longitud y así recuperar la relación de longitud-tensión del músculo (con una tensión del 15-25 %). En este caso, la reevaluación debe incluir tanto el examen de preferencia de la longitud como el de la fuerza. Cabe la posibilidad de que al haberse restaurado la longitud normal, también se normalice la capacidad de producir tensión, por lo que en la prueba de «fuerza» se observará una mejora.
Los profesionales clínicos han de evaluar a cada paciente en función de sus síntomas y «evidencias» individuales que se averiguan a través de sus antecedentes y de su cuerpo, y no aprender determinadas aplicaciones solo porque fueron eficaces en alguien o con anterioridad. La eficacia del kinesio-tape solo se obtendrá en tejidos que evidencian la necesidad de una intervención. Por ejemplo, la causa principal de un dolor