4 Todas las opciones son correctas.
Capítulo 2
Labores profundas de preparación de suelos
1. Introducción
El suelo que se va a cultivar necesita estar en unas condiciones físicas, además de poseer una serie de elementos que son necesarios para que los tomen las plantas. Ambos condicionantes están totalmente ligados el uno al otro.
Cuando el terreno está compactado, no es apto para el cultivo, por lo que hay que recurrir a la realización de unas determinadas labores. Cada una de estas labores se realiza con un determinado tipo de aperos, los cuales son regulables, para poder realizar la labor de manera que resulte lo más adecuada posible a las necesidades.
2. Exigencias de los cultivos en la preparación profunda de suelos
Todos los cultivos herbáceos necesitan, para desarrollarse correctamente, que el suelo se encuentre en unas condiciones óptimas, tanto en su forma física como en el contenido de elementos químicos y nutrientes. Si un suelo es rico en todas las sustancias que la planta necesita, pero se encuentra compacto, sin aire y sin capacidad de retener agua, las raíces no podrán hacer su trabajo, por lo que la planta no podrá llevar a cabo su misión de absorber el agua y los nutrientes. Igualmente, si un suelo posee buena capacidad de aireación, retención de agua y está suelto, no será apto para el cultivo si no posee los elementos nutrientes necesarios.
Por ello, es importante que el suelo, en todas las capas donde las raíces vayan a desarrollarse, cumpla las mencionadas características.
Dependiendo de la estructura, textura, humedad y cantidad de aire retenido en el suelo, así será la capacidad de penetración de las raíces. Un suelo seco impedirá que las raíces progresen, y un exceso de humedad hará el mismo efecto.
Con el laboreo de la tierra, además de actuar en la estructura del suelo, se consigue luchar contra los parásitos que afectan a los cultivos y se ayuda a la realización de otras labores con la incorporación de abonos y estiércoles.
Sin duda, el mayor beneficio obtenido por el laboreo de los suelos, y especialmente de la parte más profunda, es la descompactación del mismo, ya que ello supone que el suelo queda suelto, aireado y con mayor capacidad de retener agua, por lo que será fácil que las raíces se desarrollen.
Una vez que la capa más profunda del suelo ha sido descompactada, es necesario seguir realizando prácticas para manejar el suelo, para evitar que de nuevo vuelva a su estado anterior. Una de estas prácticas es el uso de tractores y maquinaria adecuada.
3. Tipos y regulaciones de subsoladores, arados y gradas
Los aperos agrícolas que trabajan el suelo, según su utilidad y atendiendo al modo en que actúan en el suelo, se puede decir que son útiles para:
1 Voltear-nivelar.
2 Mullir-descompactar.
Las labores que realizan estos aperos se pueden clasificar en:
1 Primarias, que están destinadas a acondicionar el suelo a gran profundidad, dejándolo listo para que las raíces penetren. Dentro de las labores primarias, existen las que voltean la tierra y las que no lo hacen.
2 Secundarias o labores superficiales, que son un complemento de las labores primarias, y refinan el terreno superficialmente.
Otra clasificación de los aperos atiende a si la acción que realizan sobre el suelo es de manera vertical u horizontal.
1 Aperos de laboreo horizontal:Arados de vertedera.Arados de discos.Gradas de discos.Rotocultores de eje horizontal.Cavadoras.
2 Aperos de laboreo vertical:Subsoladores.Cultivadores.Chiseles.Rotocultores de eje vertical.
El subsolador es un apero que realiza una labor vertical en el suelo sin invertir el perfil del mismo. Trabaja a una profundidad de 30-100 cm. Se inserta en el suelo por debajo de la profundidad que realmente es necesario romper, aproximadamente unos 10 cm. El suelo queda roto en forma de surco en “V” desde la parte más profunda. El subsolador es un apero que no se usa para eliminar malas hierbas, ya que no trabaja sobre la parte superior de la tierra. Según la profundidad a la que inserte, se habla de subsolador para una labor muy profunda o descompactador para una labor superior.
Se compone de uno o varios brazos metálicos, a los que se colocan unas rejas de perfil normalmente rectangular, aunque a veces es trapezoidal. La separación entre los distintos brazos es la que condiciona la profundidad del trabajo, así como la mayor o menor longitud de púas. Al final de cada una de las púas se sitúan unas aletas laterales.
Las púas pueden ser de forma recta, llegando casi a vertical, de forma inclinada, o con un perfil en forma de parábola. Se sitúan en forma de “V”, colocando la más cercana en el centro y las más alejadas en los extremos. Esto se hace para que el tractor que tira del apero no actúe con sus ruedas en la zona que se debe romper.
A veces se colocan ruedas de apoyo al apero o bien un rodillo en la parte trasera, que cumple la misión de nivelar el suelo y no dejar grandes surcos abiertos, que pudieran servir para que el agua se perdiese por evaporación.
También es posible que se coloquen sistemas que provoquen vibración, reduciendo así el esfuerzo que tiene que realizar el tractor al arrastrar el subsolador.
Normalmente, el número de púas es de una a siete. Si trabajan a una profundidad de unos 50 cm, son llamados descompactadores; mientras que si la profundidad llega a los 100 cm, se llaman subsoladores.
Cada púa tiene un peso que oscila entre los 200 o 300 kg, en el caso de los subsoladores más pesados, y de 75 a 100 kg en los más ligeros.
El tipo de enganche del apero al tractor puede ser de varios tipos: enganche suspendido, para los que son de peso medio o ligero; y enganche semisuspendido o arrastrado, para los aperos pesados.
Existen varios tipos de subsoladores:
1 Subsolador topo. Es el que lleva en la parte posterior de la reja un cilindro en forma de “bola de cañón”, la cual crea galerías en el fondo, con la finalidad de ayudar al drenaje.Subsolador topo
2 Subsolador fijo. Es el más usado y se utiliza para romper lo que se conoce como “suela”, que es una capa dura del terreno a cierta profundidad. Suele constar de cinco brazos terminados en una reja en forma de cuña. Este número de brazos varía dependiendo de la fuerza del tractor y de la dureza o compactación del terreno, pero siempre hay que tener en cuenta que este número ha de mantener un equilibrio para que el apero trabaje en condiciones óptimas. Si se quiere quitar de un subsolador de cinco brazos algunos de ellos, estos tienen que ser los dos más exteriores, o bien los que están en segundo y cuarto lugar, para que siempre haya una equidistancia entre ellos y un reparto de peso homogéneo. La inclinación de los brazos es de un 25 % aproximadamente sobre lo que sería el brazo recto.
3 Subsolador vibrador. Consigue en el terreno una mayor porosidad e incluso rompe el terreno existente entre los brazos, debido a que transmite vibración a su paso. Dentro de los subsoladores vibradores hay varios tipos:Accionados de brazo alternativo, que están accionados por la toma de fuerza del tractor, mediante un sistema de ejes que hacen que el brazo se mueva de atrás hacia delante.Accionados de reja accionada, donde cada reja se mueve oscilando de arriba hacia abajo.De bloques