Gente de tango. Carlos Federico Torres. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Carlos Federico Torres
Издательство: Bookwire
Серия: Cultura
Жанр произведения: Философия
Год издания: 0
isbn: 9789508441522
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2000 hasta 2008, año en el que habiendo cumplido 90 años y acentuados sus problemas de audición, decidió transferir esa responsabilidad a Néstor Marconi.

      Bajo su dirección y participación como bandoneonista, esta agrupación de jóvenes músicos grabó dos discos compactos: Bien compadre, grabado en su totalidad en Canadá entre los años 2001 y 2003, y De contrapunto.

      Integraron la orquesta en estas grabaciones el violín solista del santafesino Ramiro Gallo, fila en la que también participaron Cristine Breves, Helena Buchbinder, Dimitri Grigoriev, Luis Sava y Florencia Ciafone, Franco Ciaffone y Ana Corrado se alternaron en viola, mientras que Daniela Schuster y Villanueva lo hicieron en violoncello y Guillermo Delgado y Romain Lecoueyer en contrabajo.

      Los pianistas fueron Abel Rogantini, Juan Pablo Gallardo y Fernando Bruguera, en distintas versiones y en cuanto a los bandoneones, alternaron como cabeza de fila Horacio Romo, Federico Pereiro y el propio Balcarce, integrando además esa fila Luciano Sciarreta, Juan Boero, Matías González, Lucía Ramírez, Eva Wolff, Martín Benedetti y Natalia Pedraza.

      En los temas cantados intevinieron las voces de Noelia Moncada y Jesús Hidalgo.

      A los orígenes y la actividad de la Orquesta Escuela de Tango está dedicada precisamente la película Si sos brujo, filmada en el año 2005 bajo la dirección de la cineasta Carola Nin, cuyo título recuerda uno de las más bellas composiciones musicales de Balcarce.

      El redescubrimiento de Balcarce que se produjo a partir de la fundación de esa orquesta, acentuado aún más por la referida película, dio lugar a un justo reconocimiento concretado en el año 2006, cuando fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires.

      Además del tema con el que se tituló ese film, en su importante producción musical se destacan los tangos El tobiano, Bien compadre, Norteño y Mi lejana Buenos Aires entre los instrumentales.

      A su vez Pincelada, Cuando caigan las hojas, Lecherito del Abasto, Embrujo de mi ciudad, Que habrá sido de Lucía, Por una muñeca, La conciencia y Papá gallego, se encuentran entre sus composiciones que cuentan con el aporte de letristas.

      Los tres últimos cuentan todos con versos de Manuel Barros, siendo Por una muñeca y La conciencia llevados al disco por la orquesta de Osvaldo Pugliese con la voz de Miguel Montero el 29 de octubre de 1954 y el 24 de junio de 1957, respectivamente, mientras que Papá gallego fue grabado por el Sexteto Tango con el cantor Jorge Maciel el 4 de mayo de 1973. En los tres casos Balcarce participó en las grabaciones en su carácter de integrante de los respectivos conjuntos.

      Pincelada y Lecherito del Abasto fueron a su vez grabados por Alberto Castillo con el acompañamiento de la orquesta dirigida por Balcarce, el primero de ellos el 10 de enero y el segundo el 1º de agosto, ambos en 1944.

      Que habrá sido de Lucía, con versos de Leopoldo Díaz Vélez, fue llevado al disco por Alberto Marino en el año 1947, en la primera etapa de la carrera de solista de este destacado cantor, cuando precisamente lo acompañaba el marco orquestal dirigido por Balcarce. En 1970 Marino grabó también Cuando caigan las hojas, acompañado en este caso por la orquesta dirigida por Carlos García.

      Embrujo de mi ciudad, nuevamente con versos de Leopoldo Díaz Vélez, fue llevado al disco por Ángel Vargas el 29 de marzo de 1949, con la orquesta dirigida por Eduardo Del Piano, el primero que lo acompañó en su etapa de solista.

      La enorme trascendencia de su producción incluye además un tango verdaderamente de antología La bordona, un instrumental del que existen magníficas grabaciones de varias de las orquestas más importantes.

      La revista de colección nº 2 del Buenos Aires Tango Club, dedicada al cantor Alberto Marino, señala en relación a este tango que se trata de un mojón en los anales de la música popular rioplatense agregando que esta pieza «está inspirada en un diseño melódico de raigambre, forma y acentuación estrictamente guitarrístico, tratado como preludio y postludio» destacando luego «el encadenamiento de dos partes: una melódica y otra rítmica, de inmensa belleza, perfectamente articuladas en la obra», agregando posteriormente que hay en ella «un dejo español curiosamente entrañado a esta música que es un verdadero modelo de composición tanguística y a la vez síntesis esencial y profunda de tres tiempos interiores del arte porteño: el recuerdo de la frontera urbana, la presencia del clasicismo milonguero y el dramatismo de la ciudad moderna».

      Quizás la mera mención de que Osvaldo Pugliese con su orquesta grabó once de las composiciones de Balcarce, sirva para avalar la trascendencia de este músico como compositor, cantidad que sólo fue superada por los registros de temas pertenecientes al propio Pugliese y a Julio De Caro, con veintinueve y trece grabaciones respectivamente.

      Esos once títulos, algunos ya recordados en la reseña que efectuáramos de su producción, son los siguientes: Bien compadre, Candombe blanco, De mi ciudad, El tobiano, La bordona, La conciencia, Mi lejana Buenos Aires, Norteño, Por una muñeca, Si sos brujo y Vamos tropilla, este último cantado a dúo por Jorge Maciel y Alfredo Belusi, cuando a comienzos de los años sesenta el maestro Pugliese grabara para el sello Stentor.

      A su vez, el violinista santafesino Ramiro Gallo le dedicó el tema A Emilio Balcarce, que la orquesta El Arranque grabó a comienzos del siglo xxi, con la participación especial en carácter de invitados de los bandoneonistas Raúl Garello, Néstor Marconi y Julio Pane y del violinista Mauricio Marcelli.

      De sus trabajos como orquestador a su vez, se destacan entre muchos otros los arreglos efectuados de sus propios tangos Si sos brujo para Alfredo Gobbi, grabado en 1952 y La bordona, para Aníbal Troilo, quien lo grabó en 1956, además de sus orquestaciones de los tangos Sideral, para Leopoldo Federico en 1964 y La mariposa, para Osvaldo Pugliese en 1967.

      También para los registros discográficos de la orquesta de Pugliese, deben recordarse sus trabajos de orquestación de los once títulos de su producción que le grabó el maestro.

      Integrando ya el Sexteto Tango, conjunto que cofundara con otros cinco ex integrantes de la orquesta de Pugliese en abril de 1968, realizó los arreglos de los tangos El choclo y Papá gallego, que esa recordada formación grabó en los años 1969 y 1973 respectivamente para el sello rca Víctor.

      Radicado en el barrio porteño de Villa Urquiza desde su regreso de Neuquén, allí falleció el 19 de enero de 2011, a poco más de un mes de cumplir 93 años de edad.

      23. Barbieri, Guillermo Desiderio

      Guitarrista y compositor nacido Buenos Aires el 25 de setiembre de 1894. Cronológicamente fue el segundo de los guitarristas que se incorporó al acompañamiento de Gardel, con quien estuvo desde 1921 hasta la desaparición física de ambos en Medellín, salvo una breve interrupción a la que se hará luego referencia.

      Se inició en su barrio natal de San Cristóbal interpretando la guitarra, agregando a veces también su voz en algunas presentaciones. Participó hacia 1912 en un trío con Félix Rodríguez en bandoneón y Pedro Vallarino en violín y a partir de 1916 acompañó al cantor Luciano Cardelli integrando el dúo criollo Cardelli–Barbieri durante casi cinco años, actuando con gran suceso en el teatro Esmeralda.

      El 18 de febrero de 1921 Barbieri se incorporó como segundo guitarrista al acompañamiento del dúo Gardel–Razzano, fecha indicada por el mismo Guillermo en un reportaje publicado en el mes de octubre de 1933. Sin embargo, la primera actuación de la que se tienen noticias de este guitarrista acompañando a Gardel y Razzano, junto con el Negro Ricardo, se produjo el 2 de junio de 1921 en Junín, en el inicio de una gira que cubrió las ciudades de Chivilcoy, Bragado, Lincoln y General Viamonte, en la provincia de Buenos Aires.

      Ambos guitarristas acompañaron al dúo Gardel–Razzano desde entonces y hasta la disolución del dúo en septiembre de 1925, para continuar luego haciéndolo con el Zorzal en su rol de solista, salvo durante un período iniciado dos meses más tarde, cuando Gardel realizó una gira por España, acompañándolo en la ocasión sólo José Ricardo, permaneciendo en cambio Barbieri en Buenos Aires, reincorporándose como su segundo guitarrista al regreso del cantor a Buenos Aires en marzo del año siguiente.

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