Atrapamiento y recuperación del alma. José Luis Cabouli. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: José Luis Cabouli
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Сделай Сам
Год издания: 0
isbn: 9789507546778
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        Otros títulos de esta editorial

      A Eduardo H. Grecco, maestro, amigo y hermano del alma

      Introducción

      Han pasado veintisiete años desde mis primeras experiencias con la Terapia de vidas pasadas (TVP). Todavía están frescas en mí las sensaciones vividas en mi primera sesión como sujeto de demostración didáctica en un seminario conducido por mi maestra, la doctora María Julia Moraes Prieto Peres. Recuerdo muy bien el estupor que experimenté antes las vivencias que se sucedían, y que yo no podía evitar que ocurrieran a pesar de mi mente racional. Al mismo tiempo que estaba sorprendido por las escenas que surgían, era plenamente consciente de que nada de eso era producto de mi imaginación, lo que hacía aún mayor mi sorpresa. Lo que se sucedía era algo más que imágenes; yo lo estaba viviendo intensamente con todo mi ser. Yo estaba allí, en el lugar de los hechos y todo acontecía sin ningún control de mi voluntad.

      Desde entonces, mi comprensión de lo que sucede durante el trabajo con la TVP ha variado sustancialmente, y me ha llevado a modificar el enfoque original que tenía sobre la técnica. Ahora entiendo que, en el preciso momento en el cual me encontraba en el lugar de los acontecimientos, realmente estaba allí. Sin saberlo entonces, había entrado en otra realidad que estaba sucediendo aquí y ahora, al mismo tiempo que estaba recostado en el suelo, acompañado por mi maestra.

      Hace ya una docena de años o más que vengo trabajando con un abordaje diferente al que aprendí inicialmente, pero el campo de la experiencia con la TVP es tan vasto que es imposible cubrir en un solo libro todo lo que sucede en la práctica cotidiana. Es así que, después de haber escrito sobre la técnica, la vida antes de nacer, el espacio entre vidas, las almas perdidas y el propósito del alma, ha llegado el momento de explicar el funcionamiento de la TVP desde una comprensión distinta a aquella desde la cual partí originalmente. La estructura básica y la técnica de la terapia siguen siendo las mismas descriptas en mi primer libro –Terapia de vidas pasadas, técnica y práctica–, pero entender de manera diferente lo que sucede cuando el paciente está en una experiencia de vidas pasadas hace que cambie el abordaje y que el trabajo terapéutico llegue a niveles antes insospechados.

      Fueron los mismos pacientes, con sus experiencias, y mis propias vivencias quienes me obligaron a cambiar mi enfoque terapéutico y con ello mis creencias. Aprendí así que toda creencia constituye un límite y que existe tanto una creencia espiritual como una creencia científica. Ambas, la espiritual y la científica, constituyen límites que no nos permiten ir más allá, porque no podemos ver lo que no estamos dispuestos a aceptar, y hasta puede suceder que pretendamos acomodar la experiencia del paciente a la creencia que tenemos. Cuando soltamos estas creencias es cuando comenzamos a trascender y a ir más allá de los límites conocidos. En nuestro caso, es como lograr el plus ultra de la terapia. Un discípulo me enseñó que el paciente llega hasta donde llegó el terapeuta.

      Lo que verán en este libro constituye un nuevo paradigma en la práctica de la terapia de vidas pasadas. Este nuevo paradigma es producto justamente de haber dejado de lado las creencias que yo mismo tenía cuando me inicié en el estudio y desarrollo de esta técnica.

      Comenzaremos por explicar las claves del funcionamiento de la TVP bajo este nuevo enfoque. Estas claves son la condición atemporal del alma, el atrapamiento de la conciencia, la multisimultaneidad y la fragmentación del alma. Una vez comprendido el fenómeno del atrapamiento del alma en las experiencias traumáticas pasaremos revista a una serie de incidencias que ocurren tanto en vidas pasadas como en la actual, y a las cuales no me pude referir en libros anteriores. Se trata de las promesas, votos, pactos y maldiciones, como así también el fenómeno de la pérdida y recuperación del alma.

      Ampliaremos el concepto de víctima, victimario y observador, ya esbozado en mi anterior libro, y profundizaremos en la causa del sufrimiento, un trabajo fundamental para cerrar definitivamente el ciclo como víctima. Finalmente, comprobaremos que, si bien el objetivo inicial de la TVP es el trabajo con las experiencias traumáticas de vidas pasadas, también es posible sanar al niño interior herido en la vida actual.

      A riesgo de parecer tedioso, he mantenido en las historias tanto el desarrollo del trabajo terapéutico como las consignas del terapeuta, para que sirvieran de guía a los profesionales interesados en esta técnica. No obstante, lo he simplificado en la medida de lo posible e incluso suprimido en algunas ocasiones.

      Como siempre, he mantenido en las sesiones de trabajo la forma de expresarse de cada protagonista, según el lugar de proveniencia.

      Agradezco a todas las personas que confiaron en mí como docente y como terapeuta, y en particular a los protagonistas de este libro. Sin su coraje para entregarse al trabajo terapéutico desnudando su alma, y su disposición para compartir con otros sus dolores y sufrimientos, este libro no se hubiera podido concretar. Vaya para ellos mi sincero homenaje y reconocimiento.

      JOSÉ LUIS CABOULI

      Blanes, Gerona, 12 de febrero de 2014

      Capítulo I

       El atrapamiento del alma.

       Las claves de la terapia de vidas pasadas

      LA ATEMPORALIDAD DEL ALMA

      Lo primero que hay que saber para comprender cómo y por qué funciona la TVP es que para el alma el tiempo no existe. La clave de la TVP está en la condición atemporal del alma o de la conciencia que, a mi criterio, es lo mismo. La encarnación en el cuerpo físico obliga a la conciencia a experimentar eso que hemos denominado tiempo. Pero el concepto de tiempo es una construcción de la mente humana. Hemos acordado una convención universal para manejarnos en forma práctica con los sucesos de la vida cotidiana, para poder relacionar y situar ciertos acontecimientos respecto de otros, y para saber que tal día a tal hora hemos de encontrarnos. Pero cuando el 31 de diciembre, a las doce de la noche, estamos celebrando la llegada de un año nuevo, al Universo no se le mueve una sola estrella. Somos nosotros quienes hemos acordado que ese día, 31 de diciembre, cambia el año, y a ese día le hemos dado un significado especial, pero para la Tierra, la Luna, el Sol, la Vía Láctea y el resto de las galaxias todo sigue igual que antes y no se dan por enterados.

      El tiempo es un concepto asociado a la experiencia del cuerpo físico. La percepción interna de que algo cambia nos da una sensación que denominamos paso del tiempo, y vemos esa experiencia en términos de una línea recta. Por eso hablamos de tiempo lineal. El cuerpo envejece y eso afirma la sensación del paso del tiempo. A esta sensación interna se la llama tiempo subjetivo, y el tiempo que medimos con los relojes y los calendarios se denomina tiempo objetivo. Pero creer que realmente podemos medir el tiempo es una ilusión. Podemos medir una distancia o un objeto material, pero al medir el tiempo no sabemos lo que estamos midiendo. Nadie ha tenido en su mano o bajo un microscopio un segundo de tiempo como para poder medirlo, compararlo y conocer sus propiedades. En el instante en que pretendemos medir el tiempo en nuestro reloj pulsera ese tiempo se desvanece súbitamente. Hablamos de algo que en realidad no puede ser medido y, sin embargo, hemos quedado atrapados en ese concepto del tiempo.