Videojuegos. Rafael Rodríguez Prieto. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Rafael Rodríguez Prieto
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Сделай Сам
Год издания: 0
isbn: 9788417649531
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      CAPÍTULO 2

      Un año, un juego: una historia diferente de los videojuegos

       por ÁNGEL CODÓN Y PACO FOX

      Intentar hacer un capítulo explicando toda la historia de los videojuegos de una manera tradicional es un empeño posible, pero poco interesante. Existen muchos otros volúmenes que cubren este tema con gran detalle (si bien, a menudo, con cierto sesgo hacia la visión estadounidense del asunto). Ángel Codón trata el tema desde el punto de vista industrial en su correspondiente capítulo. Por lo tanto, hemos decidido acercarnos a ello de una manera distinta. Hemos decidido elegir un juego por año y describir por qué dicho programa marcó un momento importante dentro de la cronología de este fenómeno social y cultural. Naturalmente, los años setenta presentarán algunos lapsos, porque la historia avanzaba muy lentamente. Pero una vez se alcanzan los ochenta, los acontecimientos se precipitan, y la selección ha creado un intenso debate entre los dos autores de este capítulo, debate que, para qué vamos a negarlo, ha formado parte de la diversión de redactarlo. Porque pocas cosas gustan más a un par de jugones que charlar durante horas de los valores de los grandes clásicos. Aquí tenéis el resultado al que llegamos tras mucho discutir e, incomprensiblemente, sin una lata de cerveza.

      El primer juego influyente de la historia fue, debido a las obvias limitaciones de la época, un programa de estrategia sin apoyo gráfico. Un fenómeno muy importante en Estados Unidos, aunque menos conocido en Europa, el cual fue creado ese año con objetivos educativos (enseñar a los niños el tipo de riesgos a los que se enfrentaron los colonos del Salvaje Oeste). El juego fue reprogramado y lanzado en varias ocasiones. Tras una reedición para escuelas en 1974 que incorporaba mayor realismo histórico, la explosión llegó con la versión para Apple II, elaborada en un primer momento en 1978 y lanzada como juego comercial en 1985 con considerable éxito. Hoy en día, es un referente cultural estadounidense y es común encontrarse citas humorísticas (tanto en camisetas como en monólogos cómicos) a una de las muertes más comunes que podía acontecerle al jugador: la de disentería. Porque, para qué negarlo, lo escatológico siempre ha marcado a la infancia, y los buenos juegos educativos lo saben.

      El verdadero primer éxito masivo que abrió las puertas de la industria. De hecho, cada vez que se habla del primer videojuego, Pong es el título de referencia, a pesar de contar con predecesores como Computer Space, a su vez una conversión a máquina recreativa del Spacewar de 1962. Sería, si lo trasladamos al mundo del cine, como la relación entre el invento del cinematógrafo de los Lumière con artefactos anteriores como el kinetoscopio.

      El punto de partida del género de aventuras: una historia con el protagonista en primera persona en la que tiene que resolver varios enigmas para poder seguir adelante con la trama. Por supuesto, dadas las limitaciones de la época, llegó en forma de aventura conversacional. Esto es, como una especie de libro interactivo sin apoyo gráfico en el que el jugador interactúa con el entorno con comandos de texto. Una forma de juego que evolucionaría con el tiempo, pero encontraría defensores muy vociferantes que lograrían que conviviera durante bastantes años con versiones del género más avanzadas

      Estamos ante uno de los juegos más importantes de la historia (lo que no es mucho decir, ya que todos en esta lista lo son). El motivo es que éste fue el que trajo consigo la fiebre de las coin-op o máquinas arcade, que en Japón causó una escasez de monedas que tuvo que ser paliada por el Gobierno acuñando nuevas remesas de las mismas. Además, también fue el culpable de la creación del género de «matamarcianos», o shoot’em up. Pocos juegos han tenido durante tanto tiempo una influencia tan acusada sobre la cultura pop como Space Invaders. Esas oleadas alienígenas bajando rítmicamente hacia tu solitario tanque son todo un referente eterno, copiado y homenajeado hasta la extenuación. El juego, todavía hoy, resulta divertido y adictivo hasta extremos enfermizos.