Elisa Lynch estaba cavando la tumba con las uñas.
Los soldados vencedores, atónitos, la dejaban hacer.
Los zarpazos de esta mujer alzaban nubes de polvo rojo y sacudían la rojiza melena que le llovía sobre la cara.
Solano López yacía a su lado.
Ella, mutilada de él, no lo lloraba, no lo miraba: le iba arrojando tierra encima, inútiles manotazos que querían enterrarlo en la tierra que había sido su tierra.
Él ya no era, y el Paraguay ya no era.
Cinco años había durado la guerra.
Había caído, asesinado, el único país latinoamericano que negaba obediencia a los banqueros y a los mercaderes.
Y mientras Elisa seguía echando puñados de tierra sobre el hombre que había sido su hombre, el sol se iba, y con el sol se iba este maldito día del año 1870.
Desde la fronda del cerro Corá, unos pocos pájaros le decían adiós.
Marzo
2
Silbando digo
El silbido es el lenguaje de La Gomera.
En 1999, el gobierno de las islas Canarias decidió que en las escuelas se estudiara el idioma perpetuado por el pueblo que lo silba.
En tiempos antiguos, los pastores de la isla La Gomera se comunicaban silbando, desde lejanas montañas, gracias a los barrancos, que multiplicaban los ecos. Así trasmitían mensajes y contaban sucedidos, noticias de los idos y los venidos, los peligros y las alegrías, los trabajos y los días.
Han pasado los siglos, y en esa isla los silbos humanos, envidiados por los pájaros, siguen siendo tan poderosos como las voces del viento y de la mar.
Marzo
3
Libertadoras brasileñas
Hoy culminó, en 1770, el reinado de Teresa de Benguela en Quariterê.
Éste había sido uno de los santuarios de libertad de los esclavos fugitivos en Brasil. Durante veinte años, Teresa había enloquecido a los soldados del gobernador de Mato Grosso. No pudieron atraparla viva.
En los escondites de la floresta, hubo unas cuantas mujeres que además de cocinar y parir fueron capaces de combatir y mandar, como Zacimba Gambá en Espírito Santo, Mariana Crioula en el interior de Río de Janeiro, Zeferina en Bahía y Felipa María Aranha en Tocantins.
En Pará, a orillas del río Trombetas, no había quien discutiera las órdenes de la Mãe Domingas.
En el vasto refugio de Palmares, en Alagoas, la princesa africana Aqualtune gobernó una aldea libre, hasta que fue incendiada por las tropas coloniales en 1677.
Todavía existe, y se llama Conceição das Crioulas, en Pernambuco, la comunidad que en 1802 fundaron dos negras fugitivas, las hermanas Francisca y Mendecha Ferreira.
Cuando las tropas esclavistas andaban cerca, las esclavas liberadas llenaban de semillas sus frondosas cabelleras africanas. Como en otros lugares de las Américas, convertían sus cabezas en graneros, por si había que salir huyendo a la disparada.
Marzo
4
El milagro saudí
En 1938, estalló la gran noticia: la Standard Oil Company había descubierto un mar de petróleo bajo los inmensos arenales de Arabia Saudita.
Actualmente, éste es el país que fabrica a los terroristas más famosos y el que más viola los derechos humanos; pero las potencias occidentales, que tanto invocan el peligro árabe para sembrar pánicos o arrojar bombas, se llevan de lo más bien con este reino de cinco mil príncipes. ¿Será porque también es el que más petróleo vende y el que más armas compra?
Marzo
5
El divorcio como medida higiénica
En 1953, se estrenó en México una película de Luis Buñuel llamada Él.
Buñuel, desterrado español, había filmado la novela de una desterrada española, Mercedes Pinto, que contaba los suplicios de la vida conyugal.
Tres semanas duró en cartel. El público se reía como si fuera una de Cantinflas.
La autora de la novela había sido expulsada de España en 1923. Ella había cometido el sacrilegio de dictar una conferencia en la Universidad de Madrid cuyo título ya la hacía insoportable: El divorcio como medida higiénica.
El dictador Miguel Primo de Rivera la mandó llamar. Habló en nombre de la Iglesia católica, la Santa Madre, y en pocas palabras le dijo todo:
—Usted se calla, o se va.
Y Mercedes Pinto se fue.
A partir de entonces, su paso creativo, que despertaba el piso que pisaba, dejó huella en Uruguay, en Bolivia, en Argentina, en Cuba, en México…
Marzo
6
La florista
Georgia O’Keeffe vivió pintando, durante casi un siglo, y pintando murió.
Sus cuadros alzaron un jardín en la soledad del desierto.
Las flores de Georgia, clítoris, vulvas, vaginas, pezones, ombligos, eran los cálices de una misa de acción de gracias por la alegría de haber nacido mujer.
Marzo
7
Las brujas
En el año 1770, una ley inglesa condenó a las mujeres engañeras.
Estas pérfidas seducían a los súbditos de Su Majestad y los empujaban al matrimonio utilizando malas artes tales como perfumes, pinturas, baños cosméticos, dentaduras postizas, pelucas, rellenos de lana, corsés, armazones, aros y aretes y zapatos de tacones altos.
Las autoras de estos fraudes, decía la ley, serán juzgadas según las leyes vigentes contra la brujería, y sus matrimonios serán declarados nulos y disueltos.
El atraso tecnológico impidió incluir las siliconas, la liposucción, el bótox, las cirugías plásticas y otros prodigios quirúrgicos y químicos.
Marzo
8
Homenajes
Hoy es el Día de la mujer.
A lo largo de la historia, varios pensadores, humanos y divinos, todos machos, se han ocupado de la mujer, por diversas razones:
• Por su anatomía
Aristóteles: La mujer es un hombre incompleto.
Santo Tomás de Aquino: La mujer es un error de la naturaleza, nace de un esperma en mal estado.
Martín Lutero: Los hombres tienen hombros anchos y caderas estrechas. Están dotados de inteligencia. Las mujeres tienen hombros estrechos y caderas anchas, para tener hijos y quedarse en casa.
• Por su naturaleza
Francisco de Quevedo: Las gallinas ponen huevos y las mujeres, cuernos.
San Juan Damasceno: La mujer es una burra tozuda.
Arthur Schopenhauer: La mujer es un animal de pelo largo y pensamiento corto.
• Por su destino
Dijo Yahvé a la mujer, según la Biblia: Tu marido te dominará.
Dijo Alá a Mahoma, según el Corán: Las buenas mujeres son obedientes.
Marzo
9
El día que México invadió a los Estados Unidos
En esta madrugada