Cómo ser un buen médico calificador
Guía básica para elaborar un peritaje médico
Ligia Montoya Echeverri
Formación / Salud
Colección Formación / Salud
© Ligia Montoya Echeverri
© Editorial Universidad de Antioquia®
ISBN: 978-958-714-906-7
ISBNe: 978-958-714-907-4
Primera edición: agosto del 2019
Hecho en Colombia / Made in Colombia
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Agradecimientos
Quiero manifestar mi gratitud infinita a Dios, a mis padres y hermanos, a la Universidad de Antioquia y a mi práctica profesional, porque me permitieron formarme como médica y me ayudaron a encontrar mi vocación de servicio. Por la génesis de este texto agradezco a las entidades de seguridad social y de servicios asistenciales en las que laboré por más de dos décadas, así como a la academia que me permitió ser docente y con la ayuda de los alumnos y colegas plantearme preguntas de forma constante e investigar y tratar de aprender cada vez más sobre el tema de la calificación del daño a la salud. Agradezco a mi esposo y a mis hijas, que me han alentado en la escritura de este texto; también a mis pacientes, que con su vivencia de enfermedad y discapacidad me motivaron para aprender a servirles cada día con más entusiasmo y compromiso.
Introducción
Dentro de las actividades médicas están comprendidas las de medicina legal, es decir, la elaboración de peritajes para el desarrollo de procesos jurídicos encaminados a proteger la integridad física y mental de las personas y a reparar el efecto de los daños o secuelas en ella, y en especial en el campo de la medicina laboral, de los trabajadores afectados por lesiones traumáticas o no traumáticas.
En el desarrollo histórico de la medicina legal, rama que aplica todos los conocimientos médicos y biológicos necesarios para la resolución de los problemas que plantea el derecho, los profesionales de esta área auxilian a jueces y tribunales en la administración de justicia, con el estudio del origen de las lesiones sufridas o la causa de la muerte mediante el examen clínico pertinente, y se dedican a servir de soporte al derecho en los casos de compromiso de la salud e integridad de las personas afectadas por diferentes noxas.
En principio, las actividades médico-legales se orientaron especialmente al derecho penal (lesiones personales y muerte violenta), pero con la aparición de la Revolución Industrial las lesiones asociadas al trabajo cobraron auge y se desarrolló la medicina del trabajo, una de cuyas actividades es precisamente la valoración de los daños o secuelas que son consecuencias de la actividad laboral, en especial los traumas definidos como accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales o laborales.
Tras el surgimiento del derecho laboral y la necesidad de proteger el aparato productivo y la fuerza de trabajo, apareció la seguridad social en el siglo xix, y en su desarrollo aparecieron las prestaciones sociales de tipo asistencial y económico; para estas últimas se hizo necesaria la certificación médica del daño a la salud que las soportara, lo que abrió el campo de la medicina del trabajo, en una vertiente conocida entre nosotros como medicina laboral, para la valoración del daño a la salud, de la pérdida funcional o de la pérdida laboral. Esta función pericial es de vital importancia para fundamentar compensaciones equilibradas y legales para los individuos, las empresas, las entidades responsables de la seguridad social y, por ende, para el Estado garante de todos estos derechos y beneficios de los ciudadanos, que generan un impacto social importante.
En la formación profesional de un médico dedicado a la medicina del trabajo, cuyo objetivo es lograr la salud de la población trabajadora, es fundamental saber efectuar valoraciones de la pérdida de la capacidad funcional, laboral y ocupacional de los individuos afectados por traumas o enfermedades. El concepto de responsabilidad en sus aspectos humano y jurídico exige que se determinen con objetividad las consecuencias reales de una lesión para que se pueda efectuar su resarcimiento; por lo tanto, es importante que el médico sepa utilizar los baremos existentes para brindar soporte técnico al proceso de valoración y compensación de las secuelas físicas o mentales de los eventos de salud.
En el ámbito de la seguridad social, se requiere de profesionales formados para evaluar y calcular la magnitud de las consecuencias de los diferentes padecimientos para la compensación administrativa que contempla la ley. Las herramientas de valoración y cuantificación del daño permiten aportar pruebas técnicas en los procesos de responsabilidad legal desarrollados en el Sistema General de Seguridad Social Integral (en adelante sgssi) y en el ámbito judicial.
La sociedad necesita médicos valoradores bien formados, que sepan aplicar de forma técnica las herramientas de baremología (métodos de valoración del daño a la persona), para apoyar los procesos que tratan de lograr la reparación y compensación justa de las diferentes lesiones y trastornos de las personas, con el fin de conseguir el equilibrio social y la sana convivencia. Debido al poco espacio que tiene dentro de los programas académicos el tema de la valoración médica del daño, la mayoría de los médicos egresados terminamos con una formación teórica y práctica muy limitada en esta materia; llegamos al ejercicio de la calificación de manera casi empírica y con frecuencia con un direccionamiento institucional fuerte por parte de los aseguradores, quienes buscan en todos sus órdenes “la estabilidad económica del sistema”, a menudo a costa del acto médico. Este libro busca ayudar a remediar estos vacíos de formación con una guía útil para el médico interesado en realizar peritajes excelentes.
Desde mi experiencia y la información sobre el desarrollo del proceso de valoración del daño a la salud en otros países, esta es una actividad médica en la cual es fundamental conocer el funcionamiento biológico humano y las condiciones o factores que lo dañan, y no debe delegarse en profesiones auxiliares, como ha sido la tendencia en Colombia después de la expedición de la Ley 100 de 1993.
Este texto dirigido a los médicos calificadores surge como fruto del estudio y reflexión compartidos con mis colegas y alumnos durante veinte años de cátedra en diferentes universidades, en reuniones de estudio con los compañeros de la Sociedad Colombiana de Medicina del Trabajo (Sometra), Capítulo Antioquia, y en muchos congresos y espacios académicos. La intención que me anima al escribir este manual, además de aportar a la formación de estudiantes de posgrado de Salud y Seguridad en el Trabajo, es brindar una herramienta de fácil consulta especialmente para los médicos del trabajo, pero que también pueda servir a los abogados, a los jueces y a los demás profesionales relacionados con la valoración del daño a la salud, quienes con frecuencia solicitan y estudian peritajes para resolver las situaciones conflictivas que plantean las secuelas en la salud; a ellos, que no tienen siempre la opción de asistir a las aulas para recibir una formación específica, este texto les puede aportar conceptos básicos para desarrollar mejor su labor cotidiana.
El proceso de análisis y de síntesis de la información teórica sobre la valoración del daño corporal, el daño a la persona y el daño a la salud y la evaluación de miles de trabajadores y pacientes en mi práctica como médica calificadora son el soporte de los conceptos aquí emitidos, los que espero sean útiles para los colegas que quieran llegar a ser calificadores y peritos médicos de excelencia.
1. El fenómeno de la discapacidad
Esta situación es la que obliga a la valoración médica, sobre todo cuando el afectado o su familia