Me alegra poder decir que estoy en desacuerdo con Franklin e Eve en algunos puntos (si quieres saber cuáles son, tendrás que leer nuestros dos libros). Pero, honestamente, me preocuparía que no discrepáramos. Hay tantas maneras de llevar a la práctica el poliamor como personas que lo practican, y más allá de lo básico respecto a transparencia y consenso, no existe una manera «correcta» o «incorrecta», solo hay cosas que le han funcionado a alguna gente y otras que no le han funcionado a otra. La gente monógama tiene que decidir qué consejos escucha, tiene que decidir a qué terapeuta hace caso de la gran cantidad que llena nuestras ondas y pantallas; la gente poliamorosa debe tener las mismas oportunidades de escuchar opiniones diferentes y tomar sus propias decisiones.
Cada cual tiene su estilo al escribir. Dossie y yo hemos sido descritas como las «hermanas mayores» (si tu hermana mayor es un putón hippie envejecido y pervertido); Eve y Franklin son más como la «pareja lista del vecindario». Imagínate al protagonista de Mejorando la casa (Un chapuzas en casa en España) al otro lado de la valla, relajado, sabio y divertido. Dossie y yo nos centramos principalmente en los aspectos sexuales del poliamor; Eve y Franklin tienen más interés en la vivencia cotidiana. A Dossie y a mí nos gusta darnos el lujo, solo de vez en cuando, de dejarnos volar por los mundos de la abstracción y el idealismo; a Eve y Franklin les gusta mantener los pies en el suelo.
Probablemente te encuentres más cerca de un estilo que del otro, y eso es exactamente como debe ser. Cuanta más gente abra su mente a las infinitas posibilidades del poliamor, más espacio habrá para nuevos libros (¿falta mucho para Poliamor para dummies?), nuevas opiniones, publicaciones especializadas, reuniones y demás.
Un día, quizá, habrá tantas fuentes y modelos para las personas poliamorosas como hay hoy día para las monógamas. Me gustaría vivir en un mundo en el que las futuras criaturas de mis hijos puedan ver El show de Bill, Joan y Pat de manera tan natural como yo vi La tribu de los Brady. Bueno, quizá mis bisnietas y bisnietos.
Y que se publiquen libros como Más allá de la pareja es una de las cosas que harán que eso suceda. Espero que disfrutes leyéndolo tanto como yo.
Janet W. Hardy
Todos estos agradecimientos se refieren a la edición original en inglés, publicada por Thorntree Press en 2014 [Nota de las Editoras].
Agradecimientos
El éxito en el poliamor es fruto de un esfuerzo colectivo. Por lo que, quizá, es lo más adecuado que haya hecho falta el esfuerzo de mucha gente para crear este libro. Sin su ayuda y apoyo, More Than Two no existiría. Escribir este libro ha sido un largo camino, y mucho ha cambiado desde el primer borrador a lo que estás leyendo ahora. Alan M. MacRobert hizo importantes correcciones, quien no solo trabajó muy duro para convertir nuestro boceto en un texto coherente, sino que cubrió lagunas, aportó ideas y nos retó a tratar temas y hablar de colectivos que habíamos pasado por alto.
Shelly DeForte contribuyó por escrito con su sabiduría y conocimientos a los capítulos 3, 7, 9 y 15, entre otros. Pepper Mint hizo importantes contribuciones al apartado dedicado a las comunidades LGBTQ en el capítulo 25, y nos dio un valioso feedback de uno de los primeros borradores. Sophia Kelly, Aggie Sez y dos personas anónimas también nos dieron feedback respecto a algunos capítulos fundamentales. Los miembros del grupo de mujeres poliamorosas de Vancouver aportaron un valioso feedback y debate. También queremos agradecer a Janet W. Hardy, coautora de The Ethical Slut y pionera poliamorosa, haber apoyado el libro contribuyendo con el prólogo.
Encontrarás muchas historias personales a lo largo de este libro, tanto las nuestras como las de otras personas. Esas historias ayudan a ilustrar las numerosas lecciones que hemos aprendido en nuestro recorrido. Los nombres que leerás, aparte de los nuestros, son seudónimos y hemos cambiado o eliminado algunos detalles que podrían identificar a alguien para mantener su anonimato. Hemos tenido cuidado de elegir historias que nos involucraban directamente, otras en las que al menos una de las personas participantes nos dio permiso para usarlas e historias que nos contaron hace más de diez años y que nos fueron reveladas en un marco de confidencialidad.
Queremos agradecer a Paul Mendoza la bella ilustración de la cubierta y a Tatiana Gill por las ilustraciones interiores. También hemos tenido la tremenda suerte de tener un equipo de producción de primer nivel: Naomi Pauls, que corrigió el manuscrito; Vanessa Rossi, que diseñó la cubierta; Mari Chijiiwa, que diseñó y maquetó el interior; Roma Ilnyckyj, que revisó el texto; y Krista Smith, que elaboró el índice y aportó investigación detallada y comprobó datos del capítulo 20. [Informaciones relativas a la edición original.] Cualquier error que contenga el libro es nuestra responsabilidad.
Recibimos generosos patrocinios para escribir y producir el libro de parte del Dr. Kenneth R. Haslam, conservador de la colección de poliamor del Kinsey Institute for Research in Sex, Gender and Reproduction, y de Alan M. MacRobert y Ola Rozenfeld. La financiación para el proyecto provino de una campaña de micromecenazgo, que llegó a tener éxito gracias al apoyo de muchas personas que aportaron apoyo material en forma de recompensas o de publicidad de nuestras ideas en sus plataformas. Esas personas incluyen a Greta Christina, Abzu Emporium, Kendra Holliday, Louisa Leontiades, Alan MacRobert, Cunning Minx, Christopher Ryan, Aggie Sez y Elisabeth Sheff. Por supuesto, no podríamos haber completado este proyecto sin las 455 personas que contribuyeron a nuestra campaña; quienes contribuyeron con cien dólares o más, y el resto figuran en morethantwo.com/supporters.
A Franklin también le gustaría dar las gracias a sus otras relaciones, nombradas en el libro como Vera, Amy, Amber y Sylvia, no solo por su apoyo al libro sino por llenar su vida de amor y cosas maravillosas. Eve está muy agradecida a su marido, Peter, y a su pareja, Paloma, por su apoyo emocional y sus ideas, y por soportar sus largas ausencias físicas y emocionales durante la escritura y corrección del libro. También nos gustaría darles las gracias a nuestras madres por ser tan maravillosas.
Aunque quizá no lo sepan, este libro no existiría sin una peculiar cadena de eventos que incluyen a la NASA, la misión Curiosity en Marte, Phil Plait, Paul Fenwick y Twitter.
El primer boceto de More Than Two fue escrito en una cabaña de madera en las profundidades de la naturaleza rural más remota del estado de Washington, donde Kay y Harry Hibler –y su gato– nos permitieron estar (¡y recoger champiñones!) durante seis semanas. Sentimos un agradecimiento inmenso por la oportunidad que nos dieron, y porque el libro no sería lo que es sin su generosidad y hospitalidad. Su impresionante cabaña, conocida cariñosamente como Hibber Hill, es un inspirador monumento a las colaboraciones amorosas y creativas, lo que la hace un lugar muy apropiado para haber creado este libro.
Introducción
Will está casado con Rachel. Tienen una bonita casa. Will (no es su nombre real) es un exitoso hombre de negocios que dirige una próspera empresa. Cada día, vuelve a casa con Rachel y su novio Arnold, que también comparte su casa. Will y Arnold son buenos amigos y a menudo pasan tiempo juntos. Planifican sus vacaciones y el senderismo a tres. A veces la novia de Arnold, Leila, se une al grupo.
Santiago y Winona se han comprometido. Tienen una relación con otra mujer, Helen. Santiago y Winona han sido pareja desde hace más de seis años. Empezaron su relación con Helen hace tres años y, aproximadamente un año después de eso, Helen y Winona empezaron su relación. Santiago y Winona conviven en la misma casa. Helen vive cerca.
A Eliza le gusta su independencia. No le gustan las ataduras de una relación convencional. Vive sola, y lo prefiere así. Ha estado teniendo una relación con Kyle durante cinco años y se aman locamente. Kyle es su relación a distancia; vive en otro estado con su novia Melody. Cuando Eliza visita a Kyle, conviven las tres personas. Eliza también tiene una relación con Stacie, que vive cerca de su marido, Seth. Eliza y Stacie han estado teniendo una relación desde hace cuatro años. Seth y Eliza tienen una relación de amistad, aunque no tienen una relación romántica. Conocemos a todas estas personas.
Sí, es posible vivir de esa manera. Cientos de miles de personas lo están haciendo en este momento.