La Güera Rodríguez. Silvia Marina Arrom. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Silvia Marina Arrom
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Изобразительное искусство, фотография
Год издания: 0
isbn: 9788417866471
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desafíos con determinación —y con la ayuda de sus parientes y buenas amistades—. De ahora en adelante su situación económica más favorable le permitiría vivir cómodamente, aunque las guerras de Independencia le habían de traer nuevos tropiezos y su vida se complicaba por las responsabilidades de la maternidad. Mas lucharía por resolver sus problemas a solas, y esperó casi dos décadas para casarse de nuevo.

      1 Ver el Diario de Bustamante, apuntes del 12 de junio de 1826, 2 de agosto de 1828, 16 de mayo de 1830, 2 de abril 1832, 8 de enero de 1835, 26 de octubre de 1838, 5 de diciembre de 1839, 1 de febrero de 1846 y 4 de septiembre de 1846.

      2 Calderón de la Barca, Life in Mexico, p. 142.

      3 La primera tal referencia que he encontrado está en una carta de 1812 escrita por la marquesa de Villahermosa a la exvirreina Inés de Jáuregui en España, en que identifica a su nuera Josefa Villamil como “hija de la Güera”. Citada en Romero de Terreros, Ex-Antiquis, p. 234.

      4 Sobre las dos familias, ver Muñoz Altea, “La Güera Rodríguez”, pp. 200-201. El acta de nacimiento de María Ignacia Rodríguez en FS, México bautismos, 1560-1950”, Ref. 2: CH01KG, FHL microfilm 35,190.

      5 Ladd hizo esta observación para la nobleza, pero igualmente podría describir el círculo social de la Güera, en que muchos no tenían títulos nobiliarios. Ladd, Mexican Nobility, p. 163.

      6 Las fuentes secundarias se contradicen sobre las edades de sus hermanas. Me he valido de los documentos en las bases de datos en FS y FN (ver Apéndice 2). Algunas también mencionan a un hermano, José, que debe haber sido uno de los “otros que fallecieron” en la infancia, según el testamento del padre. En 1810 este solamente declara tener tres hijas, e identifica al esposo de Vicenta como José Marín, un empleado de vista en la Real Aduana de Guadalajara, Testamento de Antonio Rodríguez de Velasco (31 de octubre de 1810), AHN, Francisco de la Torre #675, vol. 4557, ff. 448v-450. En 1833 Vicenta se refirió al marido difunto como administrador cesante de la Aduana de Valladolid, AHN, Ignacio Peña #529, vol. 3530 (6 de agosto de 1833), ff. 55-155v.

      7 Todas las citas del expediente de divorcio vienen de la selección del caso en Arrom, Mujer mexicana, pp. 63-107.

      8 AGN, Instituciones Coloniales/Inquisición (61), vol. 1468, exp. 26 (1800), ff. 297-298.

      9 García, Leona Vicario (1910), pp. 35-44; Calderón de la Barca, Life in Mexico, pp. 286-288.

      10 Sobre la familia Villar Villamil, ver Muñoz Altea, “La Güera Rodríguez”, pp. 201-203.

      11 “Autos que sigue don José Gerónimo López de Peralta Villar y Villamil, apelando al matrimonio que pretende contraer su hijo” (julio de 1794), AGN, Instituciones Coloniales/Indiferente Virreinal, Matrimonios caja 1185, exp. 1, esp. ff. 2v y 3v.

      12 AP, Matrimonios Españoles, libro 35, f. 176v, #154. Sobre Rivero, ver Aguirre Salvador, El mérito, p. 431.

      13 “Autos sobre alimentos” (1794-98), AGN, Vínculos y Mayorazgos 115, vol. 215, exp. 8, f. 104v.

      14 El mayorazgo también consistía en alhajas, una finca productora de harina (el Molino Prieto), la hacienda de la Soledad en el pueblo de Dolores, el agostadero de San Cristobal de Cabezones en Monterrey, el rancho de Santiago en Tenosotlán, y la hacienda de San Nicolás Zasni colindante a Bojay. En octubre de 1794 las rentas de estas propiedades sumaban por lo menos 9.025 pesos (aunque Villamil padre decía que no todas produjeron rentas ese año por no estar arrendadas o estar en litigios y, de hecho, él estaba involucrado en diez pleitos). El padre además poseía bienes libres valorados en 52.060 pesos. Ver “Autos sobre alimentos” (1794-98), AGN, Vínculos y Mayorazgos 115, vol. 215, exp. 8, esp. ff. 8-8v y 11-12v; AGN, Vínculos y Mayorazgos (115), vol. 214, exp. 7; y Romero de Terreros, Condes de Regla, p. 86.

      15 Villamil obtuvo el puesto de subdelegado en octubre de 1796. AGN, GD36, Correspondencia de Virreyes, 1a Serie, Marqués de Branciforte (1796), vol. 185, ff. 80-80v. Según el acta de bautismo de Josefa, ya para julio de 1795 era maestrante de Ronda, pero en marzo de 1800, cuando nació Agustín, todavía no lo habían nombrado Caballero de Calatrava. La posición militar de Villamil a veces se identifica como Teniente de Granaderos y Ayudante del Regimento de Infantería de Milicias Provinciales.

      16 En 1794 las propiedades del mayorazgo estaban hipotecadas por lo menos por 46.251 pesos (Ladd, Mexican Nobility, p. 85). El litigio contra los residentes del Cerro, Denqui y Múñi sobre la extensión de Bojay ya había empezado para finales de 1800 y segúia en enero de 1803. AGN, Tierras, vol. 2583, exp. 2 y vol. 3584, exp. 2 (1800-1803).

      17 Testamento de María Ignacia Rodríguez (16 de agosto de 1850), AHN, Francisco de Madariaga #426, vol. 2873, art. 6.

      18 Ver AGN, Bienes Nacionales, leg. 1844, exp. 2 (1808), ff. 2-2v.

      19 Una copia de los autos del caso criminal se encuentra dentro del expediente de divorcio: “Cuaderno reservado contra D. Josef Villamil y Primo, 1801”, insertado en “Causa de divorcio del Capitán don José Villamil y su mujer da. María Ignacia Rodríguez”, AGN, Instituciones Coloniales/Ramo Criminal, vol. 582, exp. 1 (1802). Para una selección de estos autos, ver Arrom, Mujer mexicana, pp. 63-107. Para mi análisis del divorcio eclesiástico, ver Arrom, Mujeres de la ciudad, cap. 5.

      20 “Súplica del Conde de Regla”, AGN, Indiferente Virreinal/ Matrimonios, caja 159, exp. 47 (1811-12), f. 6v.

      21 Parece que el fallo del rey, con fecha de 2 de mayo de 1803, tomó meses en llegar a México. AGN, Instituciones Coloniales/ Gobierno Virreinal/ Reales Cédulas Originales y Duplicadas (100), vol. 188, exp. 94, ff. 101-101v.

      22 Los testigos fueron escogidos por el alcalde del crimen de la Real Audiencia, José Arias Villafañe, “quien conoce al matrimonio íntimamente.” El conde de Contramina también testificó, pero como lo hizo en persona y no por escrito, su testimonio no aparece en los autos. La lista completa de testigos en Arrom, Mujer mexicana, pp. 92-93.

      23 Es posible que haya habido otros autos posteriores en el caso de divorcio, pero no se conservan en la copia que yo encontré, que fue la copia de la Audiencia. El expediente del provisor eclesiástico parece estar perdido. Algunas instancias del tribunal militar se encuentran en la “Causa formada al Capitán Don José Villamil a pedimento de su mujer Da. María Ignacia Rodríguez de Velasco, por haberla tirado un pistoletazo” (1802-4), AGN, Instituciones Coloniales/Real Audiencia/Criminal (037), contenedor 214, vol. 454, exp. 6, ff. 201-232.

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