Los Hermanos de María
Su director general es el P. Menningen. El instituto se halla recién en sus comienzos. Tiene 7 miembros que viven en Ehrenbreitstein, y hace poco todos han recibido la missio canonica. El P. Menningen tiene grandes planes. Este instituto debe configurar el paralelo masculino de las Hermanas de María. Hay que fundar residencias de aprendices, etc. Requisitos de admisión: ciclo básico de enseñanza secundaria y examen oficial. Edad: 18.
La Obra de las familias
Este instituto es aún problemático. Se halla en sus inicios. Sin embargo el PK insistió en su pronta erección como instituto secular. Otros dudan con razón de esa posibilidad, dado que en él naturalmente no se puede observar una vida en el espíritu de los consejos evangélicos. Los miembros de la Obra de las familias se reclutan de entre los miembros de la juventud masculina y femenina que se deciden por el matrimonio. En lo posible los novios son captados enseguida por la Obra de las Familias. Aquí existe una especie de “doble membresía”. Los hijos de tales padres no son recibidos como miembros eo ipso, sino que ellos deben decidirse por sí mismos. Los requisitos para la Obra de las familias: vida moral y religiosa, y consagración.
2. Federación y Liga
En Schoenstatt se llama “orden del Papa” a los institutos que aspiran a una erección como institutos seculares de derecho pontificio; “orden del obispo” a las Federaciones, cuyos miembros ocupan puestos de dirigencia en el Movimiento; y “orden del párroco” a la Liga. Los grupos de la Liga deben integrarse completamente al organismo de la parroquia, con la condición de que el párroco, que dirige responsablemente esos grupos, a la hora de admitir nuevos miembros escuche también la opinión de los jefes laicos, y en ocasión de las elecciones de jefes laicos, escuche también la opinión de los miembros. Esto no quiere decir que el párroco sea sólo un “consejero espiritual”: es más bien un padre y, por lo tanto, reviste autoridad. Así pues este organismo está pensado como autoritativo en principio y democrático en el método, similarmente a lo que ocurre en las Congregaciones Marianas.
En el movimiento de hombres y de los jóvenes (17 - 25 años) la separación no se realiza tanto por, y no sólo por edades, sino más bien por estamentos: estudiantes, académicos, obreros, docentes, etc. No se pueden estimar números concretos. Según testimonio de las cartas circulares, los miembros de la Liga son alrededor de mil.
Lo mismo vale para la Liga de mujeres y de las jóvenes. En este punto hay que tener en cuenta que, como en el caso de los hombres y de los jóvenes, no se trata siempre de miembros regulares, sino en gran medida también de interesados y amigos de la Obra de Schoenstatt. En la Liga la verdadera membresía se adquiere generalmente mediante la consagración, al cabo de un cierto tiempo de prueba. El P. Friedrich, el director del movimiento de las mujeres y de las jóvenes, tiene Hermanas de María como colaboradoras en Schoenstatt, mientras que, fuera [de Schoenstatt], las jefas diocesanas, zonales y de grupos son en su mayoría “Señoras de Schoenstatt”. Las jóvenes tienen como ideal ser “tabernáculo vivo”. Donaron el tabernáculo del Santuario. Su meta expresa es por lo tanto la virginidad, sin que se excluya a novias y jóvenes dispuestas a casarse. El P. Friedrich envía a los grupos cartas circulares hectografiadas. Me alcanzó las que han aparecido hasta ahora: están en las actas. Director diocesano de Tréveris es el P. Israel, de Püttlingen, y la jefa diocesana es la docente Bohr, de Hostenbach. (El P. Israel es a la vez el hombre de enlace de toda la Obra de Schoenstatt con las autoridades).
En la Juventud Masculina y Femenina (menos de 17 años) no se puede hablar de una verdadera labor de Liga. Si bien existe una consagración juvenil, el trabajo en este caso reviste un carácter más bien preparatorio. El P. Branzen, que atiende la Juventud Masculina (de las diócesis de Tréveris, Maguncia y Espira), me relató sobre su diligente labor de propaganda en la zona del Mosela y del Rin, en Hunsrück y el Eifel. Me entregó una lista de parroquias de la diócesis de Tréveris cuyas juventudes masculinas están vinculadas con Schoenstatt. Además una cantidad de cartas de formación y un número (véase Actas) del boletín de la Obra, impreso como “manuscrito” (sin imprimátur). Acordó con el P. Johannes Müller, encargado de la pastoral juvenil diocesana, que en el futuro el director diocesano de la Liga de la Juventud Masculina participe de las consultas del consejo de dirigentes diocesanos, pero sin voto. El boletín que edita el P. Bezler para la Juventud Femenina de Schoenstatt aparece regularmente y es presentado en Tréveris para su censura.
Se conversó a fondo con el P. Menningen la cuestión de las revistas, boletines y cartas circulares. Él propuso que las revistas en sentido estricto, vale decir, publicaciones de aparición periódica, se presenten primero en Tréveris para su examen preliminar, mientras que las demás cartas, comunicaciones y motivaciones que aparezcan en libre sucesión, impresas o no, luego de aparecer podrían ser presentadas a las autoridades para su examen. Propuso que esto último estuviese limitado “al próximo tiempo”, porque de lo contrario Schoenstatt tendría una posición especial frente a otros Movimientos y organizaciones. Además hizo propuestas de enlaces entre el Movimiento de Schoenstatt y la diócesis: Que se determine que el P. Israel sea, como hombre de confianza y mediador, quien informe al Obispo sobre toda la labor de Schoenstatt en la diócesis. Él mismo tiene colaboradores y colaboradoras de cada rama, sacerdotes y laicos, que le informan sobre todo. Le pedí al P. Menningen consignar por escrito y enviarme sus propuestas para la integración jurídica y pastoral de Schoenstatt a la vida de la Iglesia. Así lo hizo entre tanto, en carta del 7.3.49. La carta se halla en las Actas de la vicaría general.
3. Movimiento popular, de peregrinos y refugiados;
apostolado de los enfermos
El movimiento de Peregrinos y Refugiados puede ser considerado como un movimiento popular. Está dirigida por el P. Fischer, quien estuvo cuatro años junto al PK en el campo de concentración de Dachau. Los sacerdotes de Schoenstatt y otros schoenstattianos propician y fomentan fuera de Schoenstatt las peregrinaciones al Santuario de Schoenstatt. Se procura no dejar que los peregrinos queden en Schoenstatt sin atención, o que sólo recen allí, sino que mediante conferencias se trata de introducirlos en el espíritu de Schoenstatt y arraigarlos allí. El P. Barton, alemán de la región de los Sudetes, lleva adelante la atención pastoral de los refugiados. El P. Barton no es sacerdote de Schoenstatt pero ha reconocido en Schoenstatt el medio adecuado para canalizar fecundamente el triste destino de los que han sido expulsados de su tierra. Algo similar acontece con el apostolado de los enfermos, que atiende el ex provincial, el P. Kolb. Un informe sobre el apostolado de los enfermos se halla en las Actas.
Director de la Columna de Hombres es el P. Menningen; director de la Columna de las Mujeres es el P. Mühlbeyer. Dirigentes de distintos institutos lo asisten en calidad de colaboradores y colaboradoras.
b) Originalidad de la Obra de Schoenstatt
Se pone injustamente en tela de juicio la rectitud del ideario teológico de Schoenstatt y su eclesialidad. La visitación canónica reforzó esta convicción mía. Remito a mi dictamen sobre el esbozo de un “ultimátum” para Schoenstatt presentado por Su. Exca. Rdma. el Arzobispo de Bamberg. También la designación de Schoenstatt como creación predilecta u “ocupación predilecta” de Dios y de la Sma. Virgen no es en sí misma errónea. Pero como se presta a confusión, propongo solicitar que se la utilice moderadamente y sólo en contextos que excluyan toda posibilidad de confusión.
La originalidad de la Obra de Schoenstatt puede describirse brevemente con tres palabras: pedagogía de ideales, de Alianza y de vinculaciones. Este método que en realidad es bueno, entraña en sí ciertos peligros que hay que ver y afrontar. Se los puede caracterizar con las siguientes palabras claves: vinculación local al Santuario de Schoenstatt, vinculación personal al PK; una indebida aparición en primer plano del PK ; exagerada reserva y aislamiento; “disciplina de arcano”; pretensión de una cierta exclusividad y totalidad; secta. En relación con este último término, nótese desde un principio que ningún “schoenstattiano” pretende conscientemente formar una secta, pero que si no se contrarresta oportuna y enérgicamente los peligros mencionados, al final se tendrá ineludiblemente una secta.
Dado que los peligros aludidos