Científicas en Colombia. Carolina Romero. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Carolina Romero
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Социология
Год издания: 0
isbn: 9789585188228
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este decreto se creó el Fondo Colombiano de Investigaciones Científicas y Proyectos Especiales «Francisco José de Caldas», adscrito al Ministerio de Educación Nacional, con el objetivo de coadyuvar la financiación de planes, programas y estrategias en torno al desarrollo científico; establecer estímulos y reconocimientos a las actividades investigativas, y promover las inversiones públicas y privadas en este sector, entre otros.

      Durante la década de los ochenta, Colombia atravesó un estancamiento productivo por la falta de progreso tecnológico en el sistema productivo nacional, así como por la ausencia de capital humano altamente cualificado en términos de desarrollo científico. Por ello, en la década siguiente el Gobierno Nacional aprobó la Ley 29 de 1990, por la cual «se dictan disposiciones para el fomento de la investigación científica y el desarrollo tecnológico en el país». En esta norma se estableció el papel del Estado como promotor del adelanto científico y se le atribuyó la obligación de incorporar la ciencia y la tecnología en los programas y planes de desarrollo económico del país; asimismo, se estableció una triple articulación entre la universidad, la comunidad científica y el sector privado. Con esta norma (29), el Estado tiene la obligación de crear las condiciones favorables para la generación de conocimiento científico, la estimulación de la capacidad innovadora del sector productivo y para la creación de un sistema nacional de información científica y tecnológica.

      Posteriormente, en el siguiente siglo, la Ley 1286 de 2009 modifica la Ley 29 de 1990 y transforma a Colciencias en Departamento Administrativo, además de fortalecer el SNCTeI; es decir, Colciencias se convirtió en una entidad con un rango similar a un Ministerio. El objetivo de la norma (1286) enfatizó en lograr un modelo productivo sustentado en la ciencia, la tecnología y la innovación, de modo que los productos y servicios nacionales tuvieran un valor agregado y se propiciara una nueva industria nacional. Asimismo, se buscó fortalecer la incidencia del SNCTeI en el entorno social, económico y ambiental, en los ámbitos regional e internacional, mediante la formación de ciudadanos creativos, críticos e innovadores, capaces de influir constructivamente en el desarrollo del país. Entre otras novedades, esta Ley estableció principios y criterios de fomento y estímulo que rigieron las actividades de investigación que realizan los organismos y las entidades públicas:

      • La evaluación (los resultados debían ser evaluados y tomados en cuenta para la posterior asignación de apoyos).

      • La participación en la toma de decisiones (la comunidad científica y el sector productivo debían ser partícipes en la formulación y determinación de políticas de ciencia en el país).

      • Descentralización (los instrumentos de apoyo científico serían promovidos a nivel territorial con el objetivo de fortalecer los departamentos y municipios).

      • Revisión y actualización (las políticas y programas implementadas debían ser revisadas y actualizadas periódicamente).

      • Transparencia (los criterios de selección fueron de mérito y calidad y mediante convocatoria pública).

      • Continuidad, oportunidad y suficiencia (para garantizar el crecimiento y sostenibilidad).

      • Divulgación (con el fin de garantizar la divulgación de los resultados).

      • Protección (el Estado debía implementar las herramientas para proteger la propiedad intelectual).

      Hasta el año 2018, el Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación, Colciencias, fue la entidad encargada de ejercer la administración del SNCTeI y de promover los programas y las políticas de fomento de la CTI en el país. Sin embargo, con la Ley 1951 de 2019 se creó en Colombia el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (Minciencias) y se le adjudicó la responsabilidad de velar por una política de ciencia, tecnología e innovación que, además de generar crecimiento y desarrollo en el país, lograra anticiparse a los futuros retos tecnológicos siempre en pro del bienestar de los colombianos.

      ¿La legislación colombiana promueve la equidad de género en la ciencia?

      La Dirección de Mentalidad y Cultura de Colciencias, ahora Minciencias, en el 2016 implementó en el territorio nacional programas y estrategias que incentivaran la construcción de una cultura que valora y gestiona el conocimiento en la ciencia, la tecnología y la innovación (CTeI). Un ejemplo de ello es la estrategia Todo es Ciencia, que busca acercar a la comunidad a la CTeI, mediante series web, artículos periodísticos y de opinión y, documentales que sirvan de inspiración para apropiarse de la ciencia. Una de las iniciativas que forma parte de esta estrategia es la denominada MujerES Ciencia, con la cual se busca visibilizar los logros de las científicas colombianas a través de su propio relato. Esta iniciativa reconoce la escasa participación y los obstáculos históricos que la mujer ha enfrentado cuando de participar en la actividad científica se trata; por ello, aspira empoderar a niñas y jóvenes para que a través de los testimonios se incentiven a formar parte la ciencia.

      Para el año 2020, Minciencias inició la construcción del Fondo Mujeres más Ciencia más Equidad, que contaría con recursos para fomentar pasantías de investigación en la academia y en el Estado. Asimismo, financiará pasantías a nivel internacional y capacitaciones en el uso de las TIC de niñas y jóvenes de escasos recursos y de zonas alejadas del país que estudien carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas). Con la creación de este fondo, se establece la ruta guía para la construcción de una política de género para el sistema de ciencia, tecnología e innovación. Más recientemente, en 2021, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones lanzó una convocatoria para capacitar a más de 35.000 mujeres colombianas en temas de creación de contenido y transformación digital de forma gratuita. Con este programa se busca que las mujeres se conviertan en replicadoras del conocimiento y, a su vez, empoderen a otras mujeres mediante el uso de las herramientas digitales.

      Más recientemente, en junio de 2021 el Gobierno Nacional, en alianza con la Universidad EAN y el International Business Machines Corporation, IBM, lanzó la iniciativa «la Red de Mentoras Estudiantes STEM», que tiene por objetivo promover los escenarios de ciencia y tecnología en 14 departamentos del país, mediante la formación de al menos 500 mujeres jóvenes. Con esta iniciativa se espera que el país avance en el cierre de brechas de género que existe en el campo de la investigación bajo dos líneas: una orientada a niñas y adolescentes que aún no ingresan a un programa profesional, y la segunda con mujeres que ya estén vinculadas a programas de ciencia y tecnología.

      Por último, es importante precisar que la representación femenina no ha estado ajena a los cargos decisorios que promueven las leyes de ciencia y tecnología en el país. Desde su creación en 1968 hasta su transformación a Ministerio en 2018, Colciencias estuvo bajo la dirección de cuatro mujeres: entre 2000 y 2003, 2003 y 2006, 2013 y 2014 y, 2014 y 2016. Sin embargo, las acciones de política para promover la igualdad de género en la ciencia y la tecnología fueron escasas en esos periodos. En este sentido, en el siguiente apartado se expone cómo otras investigaciones han abordado la temática en el país y cómo, pese a ello, la igualdad de género en la ciencia y la tecnología aún es una tarea pendiente en la agenda pública del país.

      ¿Se ha abordado la temática en Colombia?

      En Colombia los estudios sobre la participación de la mujer en la ciencia son jóvenes. Los primeros aportes se registran a comienzos del siglo xx con los trabajos realizados por Tovar (2002; 2005) y Olaya (2003), dedicados el análisis de indicadores que evidenciaban la participación desigual de hombres y mujeres en las actividades y productos asociados a la ciencia y la investigación. Estos trabajos también inspiraron el realizado por Daza y Pérez (2008), quienes hicieron una revisión sobre el rol que tienen los indicadores de género, ciencia y tecnología en la promoción femenina en estas áreas. A partir de una exploración en el ámbito latinoamericano, las autoras estudiaron los indicadores que en Colombia se han trabajado, proponiendo posibles líneas que fortalezcan la producción de indicadores y que sirvan de insumo para la creación de políticas de ciencia y tecnología con una perspectiva de género.

      En este mismo año, Tovar (2008) presentó los resultados de una investigación en la que cuestionó si en Colombia