general suele producirse con aguas blandas y ácidas: las aguas con pH menor que 6,5 y dureza menor que 60 mg de carbonato cálcico por litro tienen una alta capacidad de corrosión del cobre. La corrosión por picadura del cobre suele asociarse a aguas subterráneas duras con una concentración de dióxido de carbono mayor que 5 mg/l y un contenido alto de oxígeno disuelto. Una gran parte de los problemas de corrosión general y por picadura se producen en tuberías nuevas en las que no se ha formado aún una capa de óxido protectora.
Latón
|
El principal problema de corrosión de los latones es la descincificación, que es la disolución selectiva del cinc del latón dúplex (latón con 35-45% de cinc), dejando una masa porosa de cobre de resistencia mecánica baja. Puede controlarse manteniendo una proporción de cinc a cobre baja (1:3 o menor) y un pH menor que 8,3. También puede producirse disolución general del latón, con liberación de metales, incluido el plomo. Puede producirse corrosión por erosión en sistemas con velocidad de flujo del agua alta y aguas que forman capas de producto de corrosión poco protectoras y que contienen cantidades grandes de aire ocluido o disuelto.
|
Cinc
|
La solubilidad del cinc en agua es función del pH y de la concentración de carbono inorgánico total, la solubilidad del carbonato básico de Cinc disminuye al aumentar el pH y la concentración de carbonatos. En aguas de alcalinidad baja, un aumento del pH a 8,5 debería bastar para controlar la disolución del cinc. La corrosión del acero galvanizado aumenta cuando se asocia a tuberías de cobre.
|