Revelado básico con Capture One
Técnicas de edición creativas, Fine Art
Técnicas especiales de revelado
Juan Zas Espinosa
Juan Pixelecta
Rubén Domínguez
Fotografía de naturaleza de autor. Vemos la naturaleza desde el lado más personal, aunando creatividad, técnica y plasticidad en pos de la belleza.
Esteve Garriga
Textos:
Juanjo Sierra (autor), Javier Alonso Torre, Roberto Iván Cano
Juanjo Sierra
El equipo y los controles fotográficos
AL FINALIZAR ESTE CAPÍTULO, HABRÁS APRENDIDO A:
•Elegir la cámara que más se adapte a tus necesidades.
•Configurar tu cámara, sacando el máximo partido a la misma.
•Conocer las posibilidades de cada tipo de óptica.
•Conocer los diferentes accesorios para cada tipo de fotografía en la naturaleza.
•Elegir el trípode óptimo para cada tipo de fotografía.
•Proteger el equipo y a uno mismo contra las inclemencias meteorológicas.
•Transportar el equipo con eficacia y seguridad en el medio natural.
•Desarrollar la técnica fotográfica básica que te permita ampliar tu creatividad en las diferentes disciplinas de la fotografía de naturaleza.
La cámara
Los avances tecnológicos de la era digital nos ofrecen una oferta de sistemas fotográficos como nunca se había conocido en la ya larga historia de este arte. Los innumerables formatos pueden añadir cierta confusión, y la elección del sistema es siempre complicada. Dilema que suele provocar incertidumbre y algún quebradero de cabeza. En este capítulo intentaremos resolver estas dudas, buscando siempre la optimización de recursos para sacar el máximo rendimiento a nuestros equipos.
Una cámara fotográfica es en esencia un cajón oscuro con un agujero por donde entra la luz (diafragma), con un sistema de control del tiempo de exposición (velocidad), y un material fotosensible al extremo contrario de la caja, en el cual se imprime o captura una imagen fija. Por simple que parezca esta descripción, es bastante ajustada a la realidad. No obstante, a partir de este concepto básico, el desarrollo tecnológico digital, electrónico y óptico han supuesto una auténtica revolución en la fotografía moderna.
Sería injusto pasar por alto todos los avances que se han dado, especialmente a lo largo del siglo XX, en el campo de la óptica y los sistemas de película y placas, en los materiales fotosensibles y en el estudio de la imagen. Pese a que no tengamos espacio para recordarlos todos, sí cabe destacar que la fotografía actual sigue basándose en los mismos conceptos y preceptos, aunque la revolución digital los haya facilitado enormemente. La fotografía, como expresión artística, sigue proponiendo los mismos dilemas de siempre, “pintar con luz”.
Actualmente coexisten en el mercado una gran cantidad de tipos de cámara, sistemas y formatos, lo que permite llegar a un gran número de usuarios. Cada uno de nosotros tiene sus propias necesidades, preferencias y sensibilidades, y nuestra elección ha de adaptarse a ello. No obstante, queremos centrarnos exclusivamente en los sistemas que permiten un control absoluto de los diferentes aspectos que conforma la técnica fotográfica, porque nuestra obra pretende servir de guía e inspiración a todos aquellos que persiguen hacer de sus fotografías algo personal y creativo.
De entre los sistemas de cámara relativamente ligeros y manejables, hasta hace muy poco tiempo el auténtico rey era el sistema réflex; DSLR (Digital Single Lens Reflex) heredera de las SLR no digitales que imperó en gran parte del siglo XX.
Las DSLR se caracterizan por el sistema de espejos que permiten ver por el visor a través de la lente, por lo que la imagen que observamos es la luz que realmente pasa por el objetivo. Este mecanismo facilita mucho la tarea de componer y la toma de decisiones en el entorno natural, porque trabajamos con luz real, y ya sabemos que es nuestra materia prima. Sigue siendo el sistema preferido por un gran número de profesionales y entusiastas, y el estándar en el que los nuevos sistemas se miden si quieren tener éxito. Versatilidad, durabilidad, portabilidad y el gran número de lentes disponibles son sus puntos fuertes.
Los avances tecnológicos de los últimos años han posibilitado el desarrollo de nuevos sistemas, que en la actualidad compiten con las cámaras DSLR. Son las llamadas sin espejo; Mirrorless o EVIL (Electronic Viewfinder with Interchangeable Lens) o cámaras de “visor electrónico con objetivos intercambiables”. La característica fundamental de este tipo de cámaras es que prescinden del sistema de espejos de las réflex, desarrollando visores electrónicos. Este diseño permite reducir considerablemente el tamaño y el peso de las cámaras, sin renunciar a la calidad de imagen. Con un visor mucho más pequeño que el clásico pentaprisma de la DSLR, y un cuerpo sin espejos, permite que este sea bastante más estrecho.
Esta fórmula posibilita que el sensor de la cámara se sitúe mucho más cerca de la lente, siendo necesario nuevos diseños ópticos para optimizar las características de las EVIL. Sus principales ventajas son un peso y tamaño más contenido, y que la menor distancia de la lente al sensor optimiza el rendimiento óptico. Así mismo el disparo en ráfagas suele ser más rápido al no tener que levantar espejo alguno en la toma.
Las desventajas principales son los posibles daños o suciedad que puede depositarse en el sensor al no tener delante ningún elemento físico que lo proteja al cambiar de lente, o la menor duración de las baterías debido a las necesidades energéticas del visor electrónico. También hay un menor número de lentes disponibles, aunque esto cambia rápidamente debido a la pujanza de las EVIL. No debemos cometer el error de pensar que los objetivos para estas cámaras serán más pequeños y ligeros que los de las réflex, porque esto depende más del tamaño del sensor, y no del tipo de cámara.
Otros sistemas que normalmente permiten un control total de los ajustes fotográficos son las cámaras telemétricas, que hoy día suelen ser mixtas, y algunas compactas. No obstante, estos sistemas han sido desbancados por las nuevas tecnologías, y habitualmente conllevan una considerable