Antiperonista es tu culpa. Matías Pérez Manghi. Читать онлайн. Newlib. NEWLIB.NET

Автор: Matías Pérez Manghi
Издательство: Bookwire
Серия:
Жанр произведения: Социология
Год издания: 0
isbn: 9789874666420
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soberanía popular y donde se legislara para todo el pueblo. El parlamento es la autoridad sobre la que reside el poder político. Es el gobierno de una nación quien otorga a dicha autoridad el poder político. Para Locke, el estado debía sostenerse en los principios de soberanía popular y legalidad, respetando los derechos de todos los ciudadanos.

      Muchos historiadores ven a Locke como una de las principales influencias de la política moderna. No sólo porque sus postulados fueran el inicio del liberalismo moderno, sino porque tuvo una gran repercusión entre los pensadores de la época. John Locke describió una separación de poderes entre el Poder Legislativo y el Ejecutivo, algo que más adelante ampliaría Montesquieu.

      Este sistema, según la literatura liberal, presta un nivel de seguridad jurídica que proporciona suficientes garantías para la empresa. Esta corriente de pensamiento se sumó a una mentalidad protestante más abierta que en otros países del sur de Europa.

      Hago una salvedad a esta información histórica. En ese entonces, las garantías jurídicas que tenían las empresas para operar no eran solo por este sistema al que considero de los menos malos; se debieron también al desconocimiento de los alcances de la nueva industria que generaría niveles de riqueza extrema en los empresarios y buenas ganancias en el proletariado.

      Este fue un período de paz dentro de Gran Bretaña, que tenía un buen sistema bancario dominado por el Clan Illuminati Rotschild, cierto equilibrio monetario y ausencia de inflación, circunstancias que generaron las condiciones para que apareciera el CAPITALISMO.

      Inglaterra además tenía una posición geoestratégica privilegiada y poseía una gran flota naval que dominaba los mares. Controlaba -entre otros- los territorios del subcontinente indio, fuente importante de materias primas para su industria; como el algodón, que alimentaba su industria textil.

      Así como a partir de la filosofía de John Locke se generó el cambio político y el nacimiento del capitalismo a fines de siglo XVII, la Revolución Industrial generó cambios importantes en la sociedad británica.

      Los súbditos se convirtieron en ciudadanos que podían tomar decisiones sobre su propio destino. Cuando empezaron a sucumbir las coronas europeas -y con ellas el poder absolutista-, desapareció la brecha social entre los privilegiados y el pueblo llano. El Humanismo de la Edad Moderna tuvo como consecuencia el surgimiento de una nueva clase social, la burguesía. A partir de la Revolución Industrial comenzó a predominar el individualismo. El esfuerzo personal, la innovación y el afán de lucro fueron derrocando al sistema feudal de la Edad Media. Nació así la burguesía, una nueva clase social revolucionaria enfrentada a los estamentos sociales aristocráticos llenos de privilegios.

      Junto con la burguesía apareció también el proletariado, es decir los trabajadores, la clase obrera que carece de propiedades y de medios de producción, por lo que se ve obligada a arrendar sus fuerzas de trabajo a la burguesía (propietaria de los medios de producción) para subsistir. Las condiciones laborales de los trabajadores eran todavía muy precarias, con largas jornadas y malas condiciones sanitarias.

      Había, como siempre sucede en el desconocimiento de lo nuevo, una necesidad de la burguesía propietaria de extremar el uso de su maquinaria nueva para recuperar la inversión en el mínimo tiempo posible. Había incertidumbre con respecto a los alcances de esta Gran Revolución Industrial.

      A pesar de estas consecuencias indeseables de la Revolución Industrial, fueron mayores los avances positivos que los escasos efectos negativos.

      Los cambios supusieron un rápido progreso y un gran desarrollo respecto a épocas anteriores:

      • Hubo un éxodo del campo a las ciudades.

      • En las de ciudades mejoraron los sistemas de desechos orgánicos. Se pusieron cloacas y un sistema de alcantarillado y túneles subterráneos de desagüe.

      • Mejoraron las condiciones de salubridad.

      • Se redujeron las epidemias por los avances en higiene y seguridad y por los descubrimientos medicinales.

      • Se produjo una gran explosión demográfica. En un siglo se triplicó la población de Inglaterra.

      • Las ciudades de Birmingham y Manchester prosperaron como ciudades textiles.

      • Ruedas mecánicas tejían su tela y sus chimeneas echaban humo sin parar.

      • Aparecieron los ferrocarriles, modificando la geografía de las ciudades con nuevos trazados urbanos.

      • Aparecieron los barcos de vapor.

      • Edward Jenner descubrió la primera vacuna contra la viruela y esto redujo la mortalidad infantil.

      • El desarrollo de la industria farmacéutica fue paralelo al de la Revolución Industrial. Al ver incrementado su capital, el empresariado empezó a invertir en las mejoras medicinales, ya que para disfrutar el momento que se estaba viviendo no había que enfermarse.

      • Aumentó la esperanza de vida de 35 años a 50.

      • El capitalismo trajo progreso y el salario medio en Inglaterra se duplicó.

      • El ingreso real per cápita en Inglaterra, en apenas cien años y a pesar de que durante dicho período el país vivió también un impresionante aumento de la población, se duplicó.

      • Durante el siglo XIX, los precios cayeron más que los salarios.

      • El poder adquisitivo se incrementó de forma casi exponencial en todos los estamentos de la sociedad nueva que surgía.

      • Los precios bajaron por la oferta de bienes y servicios y el proletariado tuvo una mejora considerable por el incremento exponencial del poder adquisitivo.

      • Bajó el precio de la ropa, del té, el café, el azúcar y todos los bienes de la canasta básica.

      • Mejoró sustancialmente la calidad de vida de la gente, aunque la brecha de las rentas entre el proletariado y la burguesía se incrementaba año a año.

      • En 1830 el londinense medio consumía semanalmente la misma cantidad de alimentos básicos que en 1959.

      • Gracias a esta mejor alimentación y al mayor acceso a bienes de todo tipo, la gente fue menos propensa al contagio de enfermedades como la tisis o tuberculosis.

      • El nivel de vida mejoró en el cómputo general, pero entre la avaricia y codicia extrema del empresariado y la envidia y malicia del proletario europeo, comenzaron a surgir filósofos y pensadores con ideas muy locas y raras. Entre las más ridículas y cavernícolas están las del vago Karl Marx, entre muchos otros, algunos de ellos financiados por las Logias Masónicas infiltradas por los Illuminati.

      Los grandes ganadores de todo este gran cambio fueron los burgueses, que pasaron de ser una clase social revolucionaria a convertirse en una clase acomodada. La burguesía, cuya situación de privilegio social se basó fundamentalmente