Necesitas entender, y más importante aún, aceptar, que para lograr el éxito, debes aprender continuamente. No en la universidad, o en el aprendizaje tradicional, sino en entender que cada día trae una oportunidad para aprender y crecer.
Encuentra algo que quieras aprender: cómo empujarte en la piscina, cómo lograr un millón de dólares a los 25 años, o cualquier otra cosa que quieras aprender. Luego, ponte a pensar en el proceso de cómo llegar allí. Busca consejo pero no la aprobación de los demás.
Reconocer que tus habilidades y destrezas no son concretas, las características establecidas que tienes te permitirán comprender que puedes aprender algo nuevo, y lograr los objetivos que quieres.
Una vez que entiendas eso, nadie más tiene el poder de validarte porque ya sabes que sólo eres un trabajo en progreso, ¡y eso está bien! Acepta esta idea.
Se trata del proceso, no del final del juego
El viaje es parte de la aventura, creo que así dice el dicho. De todas formas, aprendes y creces más en el proceso real de lograr algo, que en el logro del objetivo real.
Si estás aprendiendo a hornear pan, y el pan sale horrible cada vez, ¿qué necesitas hacer? Necesitas revisar tu proceso, ¿verdad? Habiendo fallado en varios intentos de hacer pan, has aprendido que necesitas hacer los pasos en orden, en lugar de cualquier camino, ¿verdad? Al final, estás refinando tu proceso para conseguir un poco de pan.
Tal vez realmente quieras ganar un millón de dólares en los próximos 5 años, pero solo trabajas en un local de comida para llevar. ¿Qué es lo que tienes que hacer? Necesitas empezar desde el principio. Tienes que seguir el proceso, ¿verdad? Establecer los pasos para lograr tu ideal significa que necesitas experimentar el proceso. Trabajar por el salario mínimo no va a lograr el millón de dólares, pero ¿qué pasos puedes dar para asegurarte de que alcanzas tu objetivo?
Cuando te enfocas en el proceso que puedes controlar, eres capaz de desengancharte de las otras partes que alguien más controla.
¡Vaya!
A menudo, el proceso nos lleva a las mejores partes de la vida. A lo largo del camino, somos capaces de crecer como individuos.
Somos capaces de prosperar sin los grilletes del juicio. Esa es la idea clave a la que debes aferrarte para tener éxito: vive la vida a tu manera, y la opinión de los demás no tiene nada que ver con ella.
Auto-aceptación
¿Aceptas lo que eres: cicatrices, equipaje y todo eso? Si no, ¿por qué? Si tu respuesta incluye a otra persona, entonces estás haciendo esto mal.
La auto-aprobación y la aceptación son de vital importancia para lo que somos en el fondo. Da forma a nuestra integridad y nos permite honrarnos a nosotros mismos.
¿Haces más por los demás que por ti mismo? Si la batería está agotada, ¿cómo puede mantener un dispositivo en funcionamiento? Lo mismo puede decirse de las personas. Cuando estás agotado, golpeado y agotado, eres incapaz de ayudarte a ti mismo o a los demás.
¿Cómo empiezas a sentirte más feliz, más realizado y mejor contigo mismo? Empiezas por mirar tus hábitos, específicamente, cómo te relacionas contigo mismo.
Tu conversación y tu comportamiento reflejan cómo te sientes contigo mismo.
Empieza por mirar el lenguaje que usas. ¿Está orientado a buscar la aprobación de los demás? Si es así, ¡detente!
Tienes que comprobar contigo mismo si algo te parece bien. La opinión de los demás no es un factor que influya en cómo te afectará algo. No tomes proyectos para impresionar a los demás. No busques validación en los medios sociales. Deja de compararte con los demás.
Es más fácil decirlo que hacerlo, ¿tengo razón?
Cuando estás constantemente tratando de ser algo para varias personas, te quemas. Pierdes el respeto por ti mismo. ¿Quién puede vivir con alguien a quien no respeta? ¿Serías capaz de trabajar más duro para satisfacer las metas de alguien que no respetas?
El autocuidado es la clave para respetarse a sí mismo plenamente y para dejar de lado el peso de las expectativas de los demás.
Te reto a que lleves un diario de aceptación. Cada pocos días, haz una lista de todas las cosas que has hecho bien. Lista lo que has hecho que te satisface, te hace más feliz y te permite progresar.
Si te aferras al peso de las expectativas de los demás, hazme un favor. Escríbelas. Registra todas las expectativas que sientes de los demás.
Luego escribe las opiniones, juicios y declaraciones hirientes que te han sido lanzadas.
Una vez que lo hayas hecho, rompe la lista, quémala, haz lo que tengas que hacer para eliminarla de tu vida.
Este es tu nuevo comienzo. ¿Qué harás con esta nueva libertad?
Resumen
La clave del éxito está en una simple palabra: tú.
Pongamos esto en perspectiva:
● El crecimiento de la salud, la riqueza, la felicidad y el amor requiere que cambies la forma en que te ves a ti mismo.
● Las opiniones de otras personas, con respecto a ti, impedirán cualquier progreso que hagas para construir nuevos hábitos, confianza y autodisciplina.
● Deja de comparar tu vida con la de los demás y empezarás a ver los cambios en tu forma de enfocar la vida.
● Concéntrate en cómo puedes cambiar en tu interior, para satisfacer el deseo que tienes de triunfar.
● Abraza las cosas que puedes cambiar y deshazte del peso de las cosas sin importancia.
● Sé tú, quien quieras ser, y entiende que estás bien como estás. Solo cambia si deseas dejar de intentar satisfacer a los demás.
PROPÓSITO IMPULSADO
"El misterio de la existencia humana no radica solo en permanecer vivo, sino en encontrar algo por lo que vivir". -Fiodor Dostoievski, los hermanos Karamazov
Para poder abrazar el éxito, la riqueza, la felicidad y el poder, necesitas tener un propósito. Ir por la vida sin un propósito como un nómada viajero no te hace ganar el éxito. (A menos que te propongas perfeccionar esa vida, y quieras esa vida. ¿Entonces? ¡Más poder para ti!)
Todo el mundo tiene un propósito. Encontrar tu propósito suena embriagador, ¿no? Pregúntate en cambio, si te ayuda, ¿cómo puedo usar mi tiempo para hacer algo importante en la vida? Una vez que te preguntes eso, sólo depende de ti decidir y averiguar qué es. ¿Cómo lo haces?
Explora lo que te da alegría y en lo que sobresales.
Piensa en las áreas en las que sobresales y en las que sientes que te salen naturalmente. Las que te dan alegría son importantes de considerar también. Cuando algo te sale de forma natural, no significa que seas increíble en ello sin práctica o desarrollo. No, más bien significa que te sientes a gusto durante el desarrollo. Practicar y perfeccionar las habilidades no es doloroso ni forzado, y disfrutas de todo el proceso.
¿Qué cualidades disfrutas esparciendo en tu entorno? ¿Valoras el amor, la felicidad, la paz? ¿Cómo disfrutas compartiendo estas cualidades? Tómate un tiempo para reflexionar sobre ¿qué te gusta aportar al mundo.
Un ejemplo sería la satisfacción y la felicidad: Disfruto trayendo satisfacción y felicidad al mundo. Difundo estas cualidades ayudando a los demás a alcanzar su pleno potencial y a aprender a amar donde están en la vida.
La declaración anterior es una declaración de poder, y te animo a que hagas el mismo tipo de declaración para ti mismo. ¡Escríbela y colócala en todas partes! Asegúrate de que la ves regularmente. Cuando te fijas en el propósito que