… sorprende la escasa atención que ha recibido el estudio de las relaciones entre la 4RI, la humanidad y la sociedad. Estas dos últimas “variables son básicamente ignoradas como factores claves a considerar en el impacto de la cuarta revolución industrial” (Sae-Lima & Jermsittiparsert, 2019, pág. 13). La anterior afirmación concuerda con los resultados de la revisión de literatura, que de manera exploratoria se realizó para el desarrollo de este análisis. Dichos resultados evidenciaron una preocupación por las discusiones en materia de productividad y competitividad, y una marginal atención a las variables mencionadas.
Esta situación resalta la necesidad de la presente publicación, la cual busca subsanar en alguna medida dicha carencia.
Para iniciar los comentarios de la obra parto de determinadas características comunes a los cuatro tomos, que se expresan en cuatro ideas centrales transversales.
Una primera idea central: la llamada Cuarta Revolución Industrial (en adelante 4RI) ha cambiado el paradigma de la investigación en CSH. Las nuevas tecnologías suponen elementos de construcción de lo social inexistentes en épocas anteriores. Como revolución sustentada en los datos, esta revolución exige que el investigador en CSH aprenda a manejar instrumentos como el Big Data, los algoritmos y las redes sociales, y que al mismo tiempo los aprehenda –esto es, los apropie más allá de la mera instrumentalidad– para poder elaborar con plena solidez su discurso. Sin querer afirmar que toda investigación en CSH tiene que pasar por el prisma de los instrumentos de la 4RI, sí estimo y resalto que estos son de utilidad extrema y por tanto habrán de estar presentes en la gran mayoría de investigaciones que en adelante se realicen. Queda a favor de nuestra comunidad académica el esfuerzo constante realizado por los investigadores y las investigadoras para entender el cambio de paradigma y operar el consecuente cambio metodológico con vistas a la comprensión de los fenómenos sociales.
Una segunda idea central: las fuerzas que alimentan y dan forma a la 4RI han influido y seguirán influyendo en todos los campos de la sociedad, sean estos económicos, políticos, medioambientales, culturales o de cualquier otra naturaleza. Es extremadamente raro encontrar sectores sociales en los cuales la transformación radical de su contexto y su práctica no se haya presentado o esté en proceso. Por ello, en la presente obra será posible estudiar, naturalmente no todas las facetas de lo social, por demás indefinibles, pero sí una amplia gama de las expresiones a partir de las cuales se construyen y funcionan las sociedades.
Una tercera idea central consiste en afirmar que la gran mayoría de autores y autoras que aquí escriben dan cuenta de lo que en el país existe sobre la temática en estudio y también de la enorme potencialidad que tienen las tecnologías disruptivas en todos los ámbitos de nuestra sociedad. La frecuente remisión a las experiencias de otros países otorga un plus de gran relevancia a la presente publicación. En efecto, uno de los elementos comunes a la gran mayoría de los ensayos es la remisión a experiencias internacionales, al estudio de la influencia de los escritos de opiniones de expertos extranjeros y de doctrina foránea, a los análisis normativos y de las prácticas de países que, por ser más industrializados, tienen un acopio mayor de información sobre nuestro objeto de estudio. Estas experiencias son estudiadas y referidas con suma atención por nuestros autores y autoras, para permitir al lector la comparación con la situación en la que se encuentra Colombia, buscar su mejoramiento y plantear ideas sobre el tratamiento del tema.
Finalmente, la cuarta idea central es que la presente publicación no es solo de carácter investigativo, sino también propositivo. El esfuerzo realizado por los autores y las autoras de hacer pesquisas en experiencias ajenas otorga elementos preciosos y profundos para proponer reformas legislativas, de políticas públicas, de prácticas organizacionales, de cambios de metodología, de valoraciones de la realidad, que se encontrarán plasmadas en sus páginas de manera constante. Por ese motivo la obra prestará grandes servicios a quienes tengan en mente la toma de decisiones en este ámbito social.
Con base en las anteriores observaciones transversales, que autorizan predicar que los cuatro tomos de la presente colección serán de utilidad para cualquier profesional que se dedique al cultivo y al ejercicio de las CSH, me permito entonces pasar a unas anotaciones generales sobre el contenido de cada uno de ellos.
El primero, denominado ¿Cuarta revolución industrial? Contribuciones tecnosociales para la transformación social, plantea y analiza, en sus 19 escritos organizados en 6 secciones, la discusión acerca de la influencia de la 4RI sobre lo tecnosocial, así como el aporte que las CSH deben realizar en el análisis de las tensiones que allí se presentan. Si se califica como tecnosocial el estudio de la tensión entre ciencia, tecnología y sociedad, y se entiende por tecnociencia el análisis de la relación entre ciencia y tecnología, se puede afirmar que el objetivo principal del volumen es el estudio tecnosocial de las repercusiones de las actuales tecnociencias. Teniendo en cuenta que la tecnociencia y lo tecnosocial son conceptos que también se pueden aplicar a cualquiera de las revoluciones industriales anteriores, como la del vapor o la de la electricidad, el tomo se centra en observar cómo se presentan dichos conceptos de manera particular en la nueva era de los sistemas ciberfísicos, también llamada la era de la 4RI. Es decir, se busca determinar cómo están incidiendo las nuevas tecnologías sobre el tejido social, para lo cual se analiza la profunda alteración que se presenta en la metodología y, en general, en la forma de abarcar el estudio en las CSH. Esta profunda alteración, que bien puede suponer un cambio de paradigma, implica un mayor compromiso con la interdisciplinariedad y el hábito de manejar nuevos lenguajes como el de las matemáticas y, en particular, el de los algoritmos, para ampliar el conjunto de herramientas que puedan utilizarse con miras a analizar y comprender de mejor manera la complejidad social de nuestros días.
Uno de los aspectos interesantes del tomo es que no solo plantea discusiones teóricas generales sobre el papel de las CSH en esta nueva era, sino que se concentra en temas que podríamos denominar más específicos pero que, sin embargo, giran en torno de la misma problemática: ¿cómo la construcción de lo social y de áreas sociales específicas está siendo influida por la 4RI? Así, por ejemplo, algunos escritos se ocupan de la incidencia de las tecnociencias en la concepción de lo político y de los movimientos sociales, en la infancia y en la educación, o en la forma de buscar las interpretaciones de la realidad a partir de las bases de datos, sin que se descarte un tema trascendental, como es el de las tecnociencias abordadas desde la biotecnología disruptiva y las tecnologías de la vida, que tienen incidencias aún más complejas que las tecnologías habilitantes (Big Data, Internet, etc.), puesto que se relacionan con el estudio del genoma humano, de la vida y de la medicina.
El lector estará gustoso de leer, por ejemplo, sobre la forma en la cual se construyen ciberciudadanías, la que muestra la cohesión o desvertebración de los sistemas políticos en las redes sociales, su influencia en el comportamiento de las democracias, la manera como los y las niñas y los y las adolescentes interactúan con los nuevos repertorios tecnológicos, así como las repercusiones que estos últimos tienen sobre el sistema educativo, o sobre el imaginario que está cambiando la forma de percepción de la realidad, para solo citar algunos ejemplos.
En suma, y sin desconocer la atención que ha ganado el estudio de los avances y transformaciones tecnocientíficas que supone la 4RI en relación con la productividad y la competitividad, este primer tomo invita a reflexionar sobre las tensiones que dichos avances y transformaciones están generando y pueden llegar a generar en otras dimensiones de igual importancia para nuestra sociedad.
Respecto del segundo tomo, basta leer su título para entender su contenido y pertinencia: Políticas públicas y regulación en las tecnologías disruptivas. La relación entre los conceptos que anuncia el encabezamiento ha sido uno de los grandes problemas que presenta el tema, habida consideración de la poca regulación existente y de la influencia mayúscula de los “gigantes tecnológicos” en los primeros intentos de regularlo, lo cual se torna aún más complejo en razón de su característica transnacional. Dependiendo de la forma como ello ocurra se lograrán o no diseños de políticas